Etiqueta: Luis Tovar

  • ¿La última cena?

    ¿La última cena?

    Sin mayor novedad transcurrieron las elecciones en Coahuila y el Estado de México donde los resultados eran previsibles y sólo se confirmó la tendencia que señalaban las encuestas desde hace varios meses.

    Por fin terminó la era del PRI en la entidad mexiquense y en Coahuila y Durango tendrán sus únicos bastiones reales que habrán de cuidar como la niña de sus ojos y, en una de esas, de la mano del joven gobernador, comprendan que lo que necesita la ciudadanía es un gobierno que sea capaz de dejar en el pasado las mañas del moreirato y la vieja complicidad de actores como Mary Telma Guajardo que hoy está “que no cabe” con el triunfo de Manolo Jiménez aunque ni ella, ni el PRD realmente hallan aportado gran cosa al triunfo más que cargar la matraca.

    Por cierto, hablando del PRD, vaya fin que tuvo el otrora principal partido de izquierda: no sólo llegó a su etapa terminal, sino que tristemente y traicionando todas las causas que le dieron vida, se despide de la vida política poniéndose a las órdenes de la derecha más nefasta y mohosa en la historia de los partidos políticos de este país desde el México postrevolucionario.

    Lo bueno para la ciudadanía de Coahuila y el EDOMEX es que habrán de iniciarse nuevos procesos de transformación en el gobierno que sí o sí, tendrán que mostrar un nuevo rostro a partir de las lecciones que deja la contienda. En Coahuila bien puede centrar MORENA un ejercicio de reflexión que sea capaz de repensar las alianzas con otros partidos y sus verdaderos alcances, pues en ese Estado se conjugaron dos factores internos clave: un candidato poco legitimado y la ambición de otro que le hizo el juego al ya muy desprestigiado Partido del Trabajo.

    Ahí sí, la principal crítica es para Ricardo Mejía y no porque fuera un mal candidato, sino porque le interesó un comino el proyecto y antepuso sus aspiraciones lo que probablemente lo aleje un buen rato de la vida política.

    Por otra parte, en el EDOMEX también hay que reflexionar porque el triunfo acompaña la esperanza de muchos militantes leales de MORENA y especialmente del lópezobradorismo, así que la tarea será monumental. La maestra Delfina tiene todo un reto por delante y éste va más allá de hacer un buen gobierno, el primero y más importante es dejar claro que tomará las riendas de la administración pública sin la presión e injerencia de los grupos de poder que controlan el espectro de la izquierda en el Estado.

    En fin, la hora de la verdad llegó para todos los partidos pero con mayor énfasis en los aspirantes morenistas a la presidencia, no en vano la reunión del pasado lunes de AMLO con los principales contendientes ha dado paso a la especulación de muchos y al fanatismo de otros que se desviven por hacer conjeturas o fantasear con las motivaciones del encuentro.

    Lo que sí es que quizá sea la última cena en la que coincidan todas las corcholatas con Andrés pues las definiciones y su proceso previo, sin duda van a generar un reacomodo interesante en la administración pública para garantizar un cierre de sexenio que blinde las acciones que son prioridad para Andrés Manuel. Los escenarios son amplios y comienzan a tomar forma con la renuncia de Marcelo pero, ¿Pedirá licencia Claudia Sheinbaum? ¿Renunciará Adán Augusto? Si pide licencia la jefa de gobierno, el reacomodo de fuerzas en la administración local necesariamente transita por determinar una estrategia que vigorice la fuerza electoral de MORENA en la capital dada la importancia que tiene para el país y, evidentemente por ser el principal bastión de MORENA.

    En relaciones exteriores, absolutamente nadie puede negar el trabajo de Marcelo y su capacidad para mostrar una política exterior firme, digna y sobre todo respetable para muchos países, aunque estando en la recta final de la era de AMLO, las bases de esa política exterior han quedado bien establecidas y poco efecto negativo tendrían tras la salida del canciller anunciada este martes.

    Sin embargo, un caso llama la atención por su singularidad, ¿Qué pasaría si, (cómo indican las encuestas), el crecimiento de Adán Augusto llega a tal grado que le valiera ser el candidato de MORENA a la presidencia? Su renuncia no sería un caso menor, pues el nuevo encargado de la política interior del país forzosamente debiera reunir varios aspectos: tener la confianza del presidente, contar con experiencia en política interior y, sobre todo, emular la eficiencia del actual titular de Bucareli para la solución de conflictos. En ese escenario, ojo, pudiera ser alguien de la vieja guardia que actualmente se muestre imparcial al proceso interno, sólo así garantizaría que SEGOB actuara como garante de estabilidad política frente al cierre de esta administración con todo lo que acarrea la elección de 2024.

    El caso es que parece ser que está en la figura de Adán Augusto la opción que comienza a tomar más fuerza por toda la connotación que lo acompaña y no como el aspirante preferido o más cercano a Andrés, pues la cercanía de los tres es innegable, sino como el garante de legitimidad y estabilidad que hoy requiere el proceso, tanto electivo como de continuidad de la Cuarta Transformación.

  • El futuro del EDOMEX

    El futuro del EDOMEX

    A escasos días de que acabe la era del priísmo en el Estado de México y su casi extinción en el país, comienzan a saltar una serie de dudas que deberían de preocupar a López Obrador: ¿Qué será de la entidad si el cacicazgo tiene como rehén a la Maestra Delfina Gómez?

    No se trata de una preocupación menor pues para nadie es un secreto que los dueños de MORENA en la entidad, tomarán las riendas en la conformación de lo que será el gabinete y, sobre todo, de los destinos de la entidad mexiquense que probablemente se enfrentará a una nueva era más cercana a un neo priísmo que a lo que se supone debería ser la Cuarta Transformación.

    Tampoco se trata de minimizar el carácter de la Maestra Delfina o sus capacidades y mucho menos de colocarla como apéndice de los Tlatoanis androcentristas del grupo Texcoco, sino de centrar el análisis en el problema que se avecina en MORENA y sus partidos aliados, así como las consecuencias negativas que se pueden presentar en la población. Y es que el problema del morenismo y sus seguidores es pensar que las siglas son sinónimo de buen gobierno lo que dista mucho de la realidad, baste echar un vistazo en muchos de los municipios donde gobierna ese partido para que se disipen dudas si es que alguien las tiene.

    No se puede generalizar por supuesto, hay excelentes alcaldes pero al menos en el caso del Estado de México, los emanados de MORENA se encuentran entre los peor evaluados por parte de la ciudadanía como es el caso de Ecatepec, Chimalhuacán, Chalco e Ixtapaluca. Bueno, hasta en el municipio de Texcoco la ciudadanía evalúa con menos del 50% de aprobación a la alcalde morenista y conste que de ahí es la candidata guinda. A todas luces el ejercicio de gobierno morenista en esas demarcaciones deja mucho que desear, salvo el presidente municipal de Nezahualcóyotl, pero cómo reza el clásico: “una golondrina no hace verano”Así que estamos frente a lo bueno, lo malo y lo peor, lo bueno el adiós del PRI, lo malo, la asunción de nuevos cacicazgos bajo las siglas de MORENA y lo peor, el futuro que se avecina para la entidad más poblada de la nación.

    Sin embargo, queda algo de esperanza ante ese panorama, sobre todo si la Maestra es capaz de poner un freno prudente a la tendencia manipuladora de las dos corrientes que integran la banda de los “H” (Higino y Horacio) y más aún si es capaz de construir desde ya, una nueva tendencia en la que se priorice primeramente a la ciudadanía y a la militancia. Aunado a lo anterior, Delfina Gómez está ante la posibilidad de generar nuevas alianzas con otras fuerzas, tanto políticas como de la sociedad civil organizada que pueden convertirse en un factor de equilibrio frente a la banda de los “H”.

    Eso es en el EDOMEX, en Coahuila está igual de complicado el asunto, aunque en ese caso, todo indica que se va a perder la elección gracias a la mezcla de tres factores: la impericia de Mario Delgado, la pésima candidatura de Guadiana y la ambición del ex subsecretario Ricardo Mejía a la que se suma la eterna práctica del PT de rascarle de dónde se pueda para arañar el registro aunque eso signifique traicionar el proyecto de nación que tanto pregonan y que según los identifica con Andrés Manuel.

    Por esa razón lo de Coahuila debería ser un verdadero llamado de atención para MORENA, y, quizá, una buena oportunidad para sacudirse la parasitaria presencia petista. Cabría aquí la pregunta: ¿Qué será del PT si en el 2024 no logra ir en alianza con MORENA?. Así que el petismo (ya sea el de Anaya o el de Óscar González), debería estar más que preocupado pues si nos acercamos a esa posibilidad, es muy probable que comparta la realidad que atraviesa el perredismo y que los coloca al borde de la pérdida del registro, ya ven que en términos reales, la presencia del Partido del Trabajo en casi todo el país es meramente testimonial.

    En fin, tanto el EDOMEX como Coahuila son motivo de análisis y de reflexión que forzosamente deberían acompañarse de la autocrítica, y, aunque parece ingenuo creer que puede llegar a configurarse ese ejercicio, siempre quedará abierta la esperanza para los que creemos que se puede impulsar desde abajo, desde la militancia.

  • Un millón de firmas

    Un millón de firmas

    Pues sabrá Dios de donde saca Roberto Gil Zuarth que la “candidatura” de Lilly Téllez está despuntando claramente, o se trata de una fantasía o de plano enloqueció el ex secretario particular de Felipe Calderón y protagonista de la trama de sobornos relacionados, entre otros, con el pacto por México.

    Y es que conforme nos acercamos a la elección de 2024 y por más que la oposición se lleva un palmo en las narices, un día sí y el otro también, siguen sin comprender que no existe posibilidad alguna de detener el triunfo del bloque de enfrente y menos si continúan creyendo que los seguidores en twitter se convierten en automático en electores.

    Es decir, avanza el tiempo y lejos de construir un proceso de unidad que abra paso a la conformación de un bloque con identidad más ciudadana que política, insisten en mantener la ruta de la ocurrencia por una parte y por otra la de la confrontación basada en mentiras y calumnias desde las redes sociales. Por esa misma razón comienzan a incendiar sus propios procesos electivos como si la definición de uno u otro candidato o candidata, realmente impactara en la contienda presidencial ¡Vaya ingenuidad!

    Llama la atención por ejemplo que, en su proceso interno, los gerentes de Acción Nacional ahora opten por establecer un requisito más que imposible, un millón de firmas como muestra de presencia territorial. Pues si no la tienen como partido, ¿cómo diablos habrían de conseguir tal número de firmas?, sobre todo cuando llevan casi un sexenio sin realizar una sola acción que realmente los identifique con la ciudadanía.

    Por esa misma razón les llueven las críticas de propios y extraños pues a casi un año de la elección, todavía no dimensionan que, en su caso, ya no se discute si van a perder la contienda, la discusión es en torno a cómo perder sin una caída estrepitosa. Menudo problema entonces tiene ahora el panismo con dos de sus aspirantes, pues entre el acartonado Santiago Creel y la virulenta Téllez se irá incrementando en los próximos días el tono de descalificaciones, ahí si aplica la máxima “tan poco el amor y desperdiciándolo en celos”.

    Ah, por cierto, si de descalificaciones se trata, Creel lleva las de perder. Bueno, hablando de virulencia MORENA también tiene lo suyo, pues el “compañero” de ese partido (Noroña) no se queda atrás en sus descalificaciones proferidas contra “el compañero presidente” y todo porque las encuestas lo reflejan en su realidad: no representa ni a la izquierda y mucho menos a lo que buena parte de la sociedad identifica con el movimiento de López Obrador. Bien dicen que en eso de las candidaturas “no sólo hay que quererla, también hay que creérsela” pero pues este abusa.

    Total que en ambos casos, el de Lilly Téllez y el de Noroña son una vacilada y no porque se trate de menospreciar su legítima aspiración, sino porque en los tiempos actuales y a cómo está el país, lo necesario es optar por un personaje prudente, con madurez política y solvencia moral que pueda equilibrar la ya muy desgastante polarización en la que se encuentra la vida política del país y que ha alcanzado otras esferas.

    La elección la ganará sin duda el bloque encabezado por MORENA y de ahí tendrá que salir ese personaje, lo bueno es que esta semana tanto Ebrard como Sheinbaum le fueron bajando a la estridencia, lo malo es que el club de fans de cada lado anda muy calientito.

    Quizá en eso radiquen en buena parte las claves del crecimiento de Adán Augusto: el no meterse en el terreno de la confrontación y el de equilibrar diversas posturas a través de los resultados como Secretario de Gobernación.

    En fin, más allá de las filias y odios de cada quien, incluidas las del suscrito, y más allá de las encuestas, queda claro que el papel del tabasqueño terminará siendo determinante para el proceso interno y, de mantenerse la tendencia, ¡aguas! Le puede alcanzar.

  • CORCHOLATAS: MUCHAS POSIBILIDADES Y POCA SENSATEZ

    CORCHOLATAS: MUCHAS POSIBILIDADES Y POCA SENSATEZ

    Una y otra vez hemos manifestado en este espacio que la desesperación del bloque opositor tiene tantas motivaciones cómo rostros, la principal motivación es que ni por donde se asome una posibilidad de triunfo en las elecciones futuras, salvo Coahuila, entidad que podrá mantener bajo su control el priísmo, ya sea ganando o perdiendo la elección, pues por más que el morenismo lo quiera negar, Guadiana es una pésima apuesta.

    Con todo y eso, lo cierto es que la recta final del gobierno de López Obrador atravesará por un proceso de definiciones y traiciones que están ligadas a la sucesión y que van a tambalear las estructuras internas de MORENA, situación que irá dejando muchos lastimados del proceso, aunque tratándose de militantes poco importa para los jefes tribales.

    Al fin y al cabo, los “operadores” siempre terminan acomodándose donde sea y como sea por aquello de las cuotas. Pero bueno, al menos en la visión reduccionista de muchos no está en riesgo la elección o el triunfo, aunque visto desde otro ángulo, lo que si está en riesgo es el proyecto.

    Estando así las cosas y con la guerrita de declaraciones que se traen algunos aspirantes, ha llegado la hora de establecer un pacto de unidad entre Claudia, Marcelo y Adán Augusto, en el que impere la sensatez y se logre trazar una ruta que obligue moralmente a todos a comportarse de manera digna y sobre todo a legitimar el proceso de selección interna en aras de dar continuidad a un proyecto que costó décadas construir.

    Aquí el morenismo se enfrenta a un gran problema: ¿Cómo legitimar el proceso y el resultado cuando los agravios van en aumento? Puede verse complicado y realmente lo es, quizá más de lo que se puede imaginar cualquiera, sin embargo, parece ser que entre los candidatos puede imponerse una figura que genere los equilibrios necesarios para no rebasar la prudencia que este proceso requiere.

    En ese contexto adquiere un papel más protagónico Adán Augusto López, incluso por encima de Sheinbaum y Ebrard, dado que su crecimiento constante en las mediciones deja en claro que reúne los elementos necesarios para alzarse con el triunfo, aunado a que comienza a sumar adeptos de otros sectores que se sienten lastimados o ignorados de 5 años para acá.

    Ese papel va a ser determinante para el futuro de MORENA, tal ha sido el crecimiento del tabasqueño que, de resultar ganador, contaría con la legitimidad suficiente de la militancia y con la evidente aprobación de López Obrador. Incluso, de no ser el elegido en la encuesta, terminaría siendo el elemento clave para legitimar el triunfo de cualquiera de los contendientes. Algunos colectivos sostenemos que Adán Augusto es la mejor opción dentro del morenismo para suceder a AMLO, basados en diferentes consideraciones como las siguientes: No es rehén de grupos cupulares, no se somete a intereses de la vieja práctica política y sobre todo, ampliaría la política pública que ha resultado favorable para sectores como el campesino.

    Falta poco para el momento decisivo y pronto sabremos el destino de los contendientes, pero así faltara un solo día, el llamado urgente a la sensatez y la exigencia de rectitud la mantendremos presente. Ojalá todos estén a la altura de lo que demanda una inmensa mayoría pero ya se verá.

  • El devaneo de la oposición

    El devaneo de la oposición

    ¿De qué otra manera podría definirse la actual relación de la alianza opositora sino como un devaneo? Al final de cuentas tienen completamente claro que la acción coordinada para hacer frente a la capacidad electoral de MORENA, comenzará a desdibujarse en cuanto se inicie el proceso de discusión sobre las candidaturas principales que estarán en juego para el año 2024. Recordemos que no sólo está en juego la presidencia de la república, sino también varias gubernaturas entre las que destaca la CDMX, así como las cámaras de diputados y senadores. 

    Ese proceso de discusión por parte de la oposición está a la vuelta de la esquina y no será para nada un ejercicio fácil, todo lo contrario, irá evidenciando que el clasista y por demás decimonónico partido acción nacional, será el que vaya imponiendo condiciones, tanto al PRI como a lo que queda del PRD y, al final de cuentas, ambas fuerzas tendrán sólo un par de alternativas: o someterse a la voluntad del panismo aceptando las migajas que les quieran ofrecer o tensar la liga a lo máximo amagando con romper la alianza y optar por ir completamente solos. Sea una u otra la decisión de estos partidos, en cualquiera de los escenarios quedarán en una posición por demás peligrosa pues se acercan a la extinción. 

    Por esa razón, queda claro que el envalentonado panismo tendrá la última palabra a la hora de definir al candidato presidencial aunque la apuesta fundamental será garantizar a sus principales cuadros espacios en la cámara de diputados para encabezar la alianza opositora desde el poder legislativo. Esta no sería una mala estrategia, saben perdida la elección presidencial y nuestro sistema de representación permitirá que obtengan representación nutrida, pero existe un factor clave en el que no han reparado: ni el PRI contará con las mismas condiciones para activar la estructura de mapaches, ni el PAN cuenta con suficientes liderazgos que sean capaces de ganar elecciones en el territorio. Por cierto, aun así, existen personajes en ambos partidos que creen que las redes sociales ayudan a ganar elecciones. ¡Hágame el favor!

    Estando así las cosas, para estos tiempos lo importante ya no radica en la inmundicia que acompaña el actuar de la oposición, tampoco en la sumisión y complicidad de la corte o en la campaña de desinformación de los medios de comunicación como Proceso, Reforma, LatinUs y un largo etc. Lo importante está en que las fuerzas políticas realmente identificadas con la izquierda, comiencen a jugar un papel más protagónico en el proceso de continuidad. Eso incluye más a los aspirantes de MORENA que al propio partido, y no porque se pretenda descalificar a la dirigencia de MORENA, sino porque existen muchos personajes de la Cuarta Transformación que siguen sin comprender (ya sea por interés o por ignorancia) que lo que está en juego no son los cargos sino la posibilidad de llevar al país por un rumbo mejor al que heredó el PRI y el PAN.

    Por supuesto que restan tan sólo un par de meses para que eventualmente se defina al candidato de MORENA y no será nada fácil, las acusaciones de unos hacia otros van aumentando para beneplácito de los de enfrente que le apuestan a la catástrofe interna; sin embargo, con todo y eso, (que por cierto es parte del juego político), ni Sheinbaum, Ebrard o Adán Augusto, van a poner en riesgo el proyecto de Andrés Manuel, en algún momento imperará la cordura y parece ser que en ese aspecto, el Secretario de Gobernación nuevamente jugará un papel clave como garante de unidad.

  • El crecimiento de Adán Augusto

    El crecimiento de Adán Augusto

    Enfermó Andrés Manuel y como en otras ocasiones, más tardó en saberse de lo que tardó la oposición en zopilotear en las redes sociales especulando con la salud del presidente. ¡Caray! La distorsión de la información, así como el odio de muchos políticos y comunicadores hacia AMLO ya alcanzó los niveles que fuimos pronosticando desde hace poco más de un año.

    Pero pese a las mentiras que se fueron generando desde las redes sociales, reapareció Andrés, primero en un video y posteriormente en su conferencia matutina para mofarse de aquellos que sostenían que había tenido hasta un evento cardiovascular. Fiel a su estilo, agradeció las muestras de apoyo durante su ausencia, a la vez que aprovechó para burlarse del dichoso “vaguido” que sufrió en Yucatán durante una gira de trabajo. Lo cierto es que, a pesar del semblante cansado que nadie podría negar, reapareció y retomó sus actividades para frustración de sus detractores que una vez más dieron cuenta que existe AMLO para rato.

    Sin embargo, hay varias cosas que analizar respecto a las actividades que le restan a López Obrador en este sexenio y que no son un tema menor, especialmente porque el ejercicio de gobierno entra a la recta final que habrá de estar acompañada de la carrera por la sucesión y, en la que, sin duda, el presidente habrá de jugar un papel preponderante. No en razón de erigirse como el principal encuestado del proceso interno, sino porque sabe de sobra que los avances en el gobierno se encuentran en una fase incipiente que requiere de consolidarse y sólo podría garantizarse si el sucesor cuenta con la suficiente legitimidad para encausarlos. Así que menudo trabajo tendrá AMLO en esta etapa y no por nada se reunió con los principales contendientes a sucederlo, aunque Monreal sea de chocolate.

    El tema de fondo y que realmente preocupa es la pugna que viene acrecentándose entre Sheinbaum y Ebrard cuyos equipos andan que se les cuecen las habas por acelerar la guerra de descalificaciones, sin embargo, parece ser que nadie les ha alertado sobre la posibilidad de que Andrés dé un manotazo en la mesa con tal de poner orden. Y no, no se trata de que busque en particular beneficiar a algún favorito (que sin duda lo tiene) sino de advertir una vez más que lo se busca, es mantener la presidencia en aras del proyecto de la Cuarta Transformación, misma que pudiera enfrentarse a un inminente peligro si se permite que la ruptura o la división se imponga tras los resultados de la encuesta cada vez más próxima. En este sentido, es claro que la apuesta de Monreal terminará por aferrarlo a la jefatura de gobierno de la CDMX donde por cierto, no aparece un solo candidato natural por ningún lado, pero ese escenario se encuentra lejísimos porque las tribus morenistas capitalinas, es más fácil que cierren filas a que dejen pasar al zacatecano. Y Dios nos libre de tener al aliado número uno de Sandra Cuevas como Jefe de Gobierno. Por otro lado, el propio Andrés sabe perfectamente qué representa tanto la jefa de gobierno como el canciller, ambos se conducen con lealtad al presidente y, como quiera que sea, ya sea por interés o por simpatía, gozan de respaldo de una buena parte del morenismo y de la ciudadanía. No obstante, eso no pareciera ser suficiente como para mantener el rumbo marcado por Andrés Manuel.

    El otro caso y que resulta bastante interesante es el de Adán Augusto López Hernández, no sólo por la actuación como secretario de gobernación, sino porque el crecimiento que ha tenido en las encuestas es inmejorable. No parece ser producto de la casualidad, si se analiza desde un punto de vista objetivo, el tabasqueño ha construido una red de simpatizantes que ven con buenos ojos su posible candidatura. La clave de tal ascenso pareciera estar en que, a diferencia de Claudia o Marcelo, no tiene precisamente un grupo al interior de MORENA de los que suelen mantener secuestrado el partido, lo que le otorga una ventaja dado que, por más que lo nieguen en MORENA, la auténtica militancia (que no se siente representada por los viejos liderazgos), pudiera encontrar voz en el proyecto de Adán. Como quiera que sea, el tiempo se va acabando y Adán Augusto acorta la distancia respecto a los punteros. 

    En lo personal sigo creyendo que, con todo y los errores, se avanza en un proceso de transformación en este gobierno, para muestra el comportamiento de los poderes fácticos y de la oposición, pero mantener el rumbo requiere de un liderazgo capaz de mediar entre todas las fuerzas, pero este liderazgo no sólo ocupa de la lealtad sino de la capacidad y sobre todo de firmeza para defender el multicitado proyecto. Hoy Adán es una muestra clara de esas cualidades, la pregunta es: ¿le alcanzará el tiempo? Cada vez somos más los que pensamos que sí.

  • ¿Para qué tanto brinco?

    ¿Para qué tanto brinco?

    Estando el suelo tan parejo… En realidad, podría ser una suposición eso de que el suelo realmente está parejo en MORENA, al menos de cara a la contienda interna para elegir a quien habrá de ser el, o la sucesora de López Obrador. En lo que si está bastante parejo el suelo (especialmente entre los visibles punteros) son la andanada de descalificaciones que irán acompañando el proceso, de aquí a que se realicen las encuestas.

    El caso es que, conforme avanza el tiempo, pareciera que se aceleran las posiciones en la que los diferentes operadores políticos afínes a MORENA, comienzan a acomodarse y decantarse por uno u otro de los aspirantes. Aunque en honor a la verdad, la contienda real terminará siendo entre Sheinbaum, Ebrard y el Secretario de Gobernación, Adán Augusto López. El senador Ricardo Monreal pocas posibilidades tiene por la animadversión que genera dentro y fuera del partido guinda. Quizá por esa razón, hoy sus visibles operadores se la pasan recorriendo la CDMX pregonado por todos lados que es casi un hecho su candidatura a gobernar la capital del país.

    La contienda sin duda irá generando nuevos enconos entre los simpatizantes, sin embargo, alguien de manera contundente debería de comenzar a ponerles un alto, especialmente porque pareciera que no dudarán en recurrir a la bajeza y a la eterna maña del agandalle y engaño para tratar de sorprender a la militancia que, por cierto, por ningún lado pareciera estar representada. Nuevamente, como sucedía antaño en el PRD, se vuelven a priorizar los acuerdos cupulares y las ambiciones tribales (aunque dicen que ya no existen), por encima de lo verdaderamente importante; es decir, nuevamente se priorizan los intereses de grupo, dando más importancia al personaje que al proyecto. Ese proyecto que hoy está en juego y que sufre los embates de la derecha. Cabe hacer una aclaración muy pertinente en estos días: no, no se trata de la oposición en sí, se trata particularmente de la derecha, pues mientras muchos partidos se desdibujan en su ideología, el PAN se decanta todavía más hacia la ultra derecha conservadora de amplísima doble moral.

    Por supuesto que los tres principales contendientes de MORENA poseen amplio margen para alzarse con el triunfo en 2024 y es claro que un alto porcentaje de ese margen se le atribuye a López Obrador, lo que genera dudas es, realmente quien reúne las cualidades necesarias para continuar con el proyecto y, sobre todo, de cerrar la puerta de manera tajante a lo que representan las viejas prácticas políticas y los grupos de poder a los que se les cuecen las habas por colarse en los equipos de los aspirantes. Ahí radica el verdadero problema pues, mientras entre las filas de un (una) aspirante, hay quienes son expertos en crear equipos para secuestrar al (la) aspirante; en otros lados tienen a quien pueda secuestrar a esos equipos. No hay que darle muchas vueltas, actualmente existen equipos de colaboradores que a toda costa limitan el acercamiento de simpatizantes, mientras que otros aspirantes (en particular uno) es altamente capaz de ejercer el control total sobre grupos de poder enquistados en la administración pública desde hace años.

    A varios simpatizantes y militantes de MORENA les he realizado dos preguntas: ¿Quién quieres que sea el candidato y quién crees que será el candidato? Por desgracia, la respuesta se queda en la aspiración personal y no he logrado una respuesta que acompañe un análisis objetivo sobre lo que realmente conviene al proyecto. Dicho de otro modo, la respuesta es: el mejor es el mío, porque es el mío. En fin, ojalá que la dirigencia de MORENA logre conducir el proceso dentro de los márgenes de la certeza, la prudencia y la sensatez, porque vaya que se llevan pesado al interior; por cierto, si estos valores no logran priorizarse desde los propios contendientes, van a complicar el proceso de transformación en el que algunos creemos y sobre todo, pondrán en riesgo algo más que la propia elección.

    Por último y sin afán de restarle objetividad a las líneas expresadas aquí, valga un ejemplo de cómo se las vienen gastando: un aspirante actualmente representa bien, pero es soberbio (y su equipo más); un aspirante es inalcanzable para la militancia (posee un equipo que no deja pasar a nadie), a parte, eso mismo le complica equilibrar el territorio; y otro aspirante resuelve más problemas de los que genera. Aquí el lector ponga el nombre cómo dicte su conciencia… y los hechos.

  • Otra vez el poder judicial

    Otra vez el poder judicial

    Quien quiera calificar mi opinión como subjetiva respecto al poder judicial puede que tenga razón, pero desde que tengo memoria y sobre todo, desde que he participado políticamente, jamás he visto que la corte actúe bajo los principios de transparencia, certeza y legalidad en temas que han sido de trascendencia nacional. Recuerdo que cada vez que en la izquierda recurríamos a la corte para echar abajo iniciativas del ejecutivo que lastimaban a la vida democrática o que representaban un atentado contra los intereses del pueblo, siempre manifestaba que habría que ser muy ingenuo para creer que los ministros nos darían la razón por más que la tuviéramos. 

    Resultaría por demás ocioso enumerar la cantidad de ocasiones que los ministros se ha puesto de lado de la oligarquía y de los poderosos señores del dinero, o de aquellos que siempre ostentaron el poder político de este país; sin embargo, hoy esa actuación de la mayoría (aunque uno que otro se salva) se hace más evidente porque ya ni siquiera simulan su sumisión a los poderes fácticos. Todo lo contrario, así como el INE se convirtió en el principal operador político del PAN y sus aliados, así también lo hace ahora el poder judicial.

    Sus acciones recientes, no una, sino muchas, demuestran con toda claridad que la justicia y la división de poderes, no es más que una fachada tras la que esconden una estrategia para obstaculizar las reformas que son necesarias para este país. Particularmente las que buscan reducir los privilegios de una élite que por años ha ocupado espacios relevantes que debieran de ser completamente imparciales, el INE, claro está, es la fiel muestra de cómo una burocracia sirve para favorecer a un sector y no para los fines que se creó.

    La controversia presentada por Lorenzo Córdova y que fue admitida por la SCJN a nadie sorprende, insisto: habría que ser muy ingenuo para pensar que los ministros actuarían conforme a derecho y velando los intereses de la nación, por lo tanto, era más que evidente que fieles a su tradición entreguista, se pondrían de lado de la clase política servil a los señores del dinero y que hoy patrocinan a la oposición. Tal emoción ha generado el resultado que los principales orquestadores de la política retrógrada enmarcada en la derecha, por poco se van a celebrar al ángel de la independencia. Incluso, hay uno que otro iluso que piensa que este revés propinado a López Obrador, significa la posibilidad de generar una fuerza que gane las elecciones en el 2024 a MORENA.

    Pero si de ingenuidad se trata, ahí si, personajes como Álvarez Icaza se llevan el premio al primer lugar. PRIMERO: ¿En realidad están plenamente enterados de los alcances jurídicos de la resolución o fantasean con la idea de que es una derrota para AMLO? SEGUNDO: Si es una derrota para el ejecutivo ¿Cómo harán para que esto se transmute en una fuerza electoral de cara a la elección presidencial? ¡Vaya que son ingenuos!, en primera porque una buena parte de los mexicanos que votaron en 2018 por Andrés, seguirán manifestándose a favor del partido del presidente, así que, al menos para quienes hoy buscan estar más informados del acontecer político, entienden bien que la corte sirve a la clase política contra la que se manifestaron en las urnas. En segunda porque el menosprecio al electorado es más que evidente dado que son incapaces de articular una sola propuesta que pueda ser considerada por los votantes. 

    El caso es que la oposición con su soberbia y sus fantasías, no alcanzan a comprender que las acciones que hoy celebran, son las mismas que fortalecen la figura de López Obrador, porque una buena parte de la gente que lo respalda, no tiene la mínima empatía con la oposición, por lo tanto, cada acción que pareciera un revés, termina por incrementar la popularidad del tabasqueño.

    Por cierto, la polémica desatada por la suspensión puede ser un parteaguas en la carrera por la sucesión presidencial al interior de MORENA. El titular de SEGOB avanza en las encuestas de manera significativa y pareciera que es a partir de su intervención en temas claves para AMLO, de hecho el papel protagónico del encargado de la política interior, incluye la actuación de gobernadores, diputados, y líderes sociales, pero en el caso del controvertido tema de la corte, así como la incorporación de la crisis hídrica, andará por el país marcando agenda lo que seguramente inquietará a los demás aspirantes. Así que eso que dicen los operadores de uno y otro bando de que su propuesta es la buena, como que cada vez se pone más en duda. A ver que pasa más adelante pero de que tendrá un papel relevante Adan Augusto con el tema de la corte, ni duda cabe.

  • AMLO, inevitable vitorear el discurso

    AMLO, inevitable vitorear el discurso

    La extensa referencia hecha por López Obrador al movimiento campesino en tiempos del General Lázaro Cárdenas, no sólo acompaña la realidad que empañó la situación del campo durante la presidencia de Francisco I. Madero. Es cierto, el coahuilense a pesar de sus virtudes, se alejó de los campesinos que habían acompañado la lucha revolucionaria y abandonó a uno de los sectores más afectados por la política porfirista.

    Probablemente sería muy duro sostener que Madero traicionó a los campesinos zapatistas y a los postulados del plan de San Luis pues sus motivaciones corresponden a un contexto temporal plagado de traiciones dentro y fuera del círculo maderista; pero de que existió un cálculo político por parte de Madero que afectó a los campesinos es innegable, sobre todo en su ánimo de estabilizar al país tras esa etapa de la revuelta.

    Por supuesto que el General Cárdenas durante su mandato representaba los intereses de los campesinos y los obreros, no hay el menor espacio para la duda, aunque finalmente el esfuerzo unitario terminara por corromper a la Confederación Nacional Campesina en los años subsecuentes para convertirse en uno de los colectivos más representativos del corporativismo y el clientelismo alentado desde el poder. 

    Hoy estamos frente a una reconfiguración de una buena parte de las organizaciones obreras y campesinas a partir de que enfrentamos dos realidades, por una parte la política lópezobradorista en torno a los movimientos sociales (especialmente campesinos) a los que de manera severa ha criticado por el modus vivendi de algunos de sus liderazgos, y, por otra, los efectos negativos que trajo consigo la desastrosa pandemia. Estos dos factores han resultado trascendentales para la vida de muchas organizaciones pues se sacudió considerablemente tanto la vida interna como la manera de interrelacionarse con su militancia.

    Al menos en el terreno político, las organizaciones campesinas se han visto en la necesidad de reconocer un punto de quiebre a partir de 2018 y no, no se trata de otorgar razón a las voces mimetizadas que pretendieron adoptar la narrativa de AMLO respecto de las organizaciones, pues muchas veces se convertía en la salida fácil para no resolver las demandas legítimas de los campesinos; se trata en cambio de comprender que el modelo de organización conocido hasta el momento se había agotado y requería de un proceso de refundación en el que se retomaran las causas que dieron vida a dichas organizaciones. En esa lógica, queda evidencia de los nuevos bríos que acompañan al movimiento campesino, pero, por desgracia, también han evidenciado a un sector que prefiere allanarse a las exigencias de la derecha (no precisamente de la oposición) con tal de mantener, no un movimiento campesino con ideales y principios, sino un membrete necesitado de recursos para subsistir más allá de las necesidades de su militancia.

    Por esa razón es significativo reflexionar sobre el discurso de AMLO este 18 de marzo, en principio porque quienes participamos de la lucha campesina organizada, estamos obligados a conocer nuestra historia pasada y la manera en que los poderes fácticos se han valido de todo para desprestigiar al movimiento campesino desde el porfiriato a la fecha. ¿O acaso las organizaciones que hoy se oponen a las políticas de Andrés Manuel (más allá de si son correctas o no) han sido capaces de presentar alternativas viables que fomenten procesos autogestivos para sus agremiados? ¡No!, sencillamente se montan en una narrativa que difama mucho y propone nada.

    Por lo tanto, estamos frente a la última etapa de este gobierno que terminará dejando menos organizaciones campesinas pero más sólidas y firmes pues las necesidades de las comunidades existen y requieren de representaciones dignas con posturas contundentes ante este y cualquier gobierno, por lo tanto, aquellas que hoy sólo acceden a la sobrevivencia en el ámbito político – electoral están condenadas a quedar en el olvido, lo que sería una verdadera lástima pues algunas de ellas vivieron años gloriosos cuando de manera legítima abanderaron miles de causas justas.

    Andrés Manuel posee grandes cualidades y por supuesto que tiene muchos defectos, en el discurso del pasado sábado poca atención habría que prestar al atuendo o al lenguaje corporal que tanto les encanta criticar a sus detractores. Lo que hay que vitorear merecidamente es la referencia histórica y sobre todo la posición firme ante el discurso intervencionista de uno que otro político gringo y sus escasos aplaudidores mexicanos. También hay que resaltar la capacidad de AMLO de crear identidad con cientos de miles de los asistentes, sobre todo los que no tienen mayor motivación que el respaldo al presidente, cuya postura es muy contraria a los aprovechados y arribistas que abundan en MORENA.

    El discurso de Andrés no tiene precedente alguno, como tampoco lo tiene un evento presidencial, jamás había existido un respaldo popular al presidente de tal magnitud desde Tata Cárdenas; hay que vitorearlo y celebrar la actitud patriótica pero también reconozcamos que gracias a todos los sectores, entre ellos el campesino, se ha contribuido a la transformación democrática del país, y, en consecuencia, se logró dejar atrás aquella visión que nos hacía ver como el patio trasero de Estados Unidos. 

  • Las dificultades de MORENA en la CDMX

    Las dificultades de MORENA en la CDMX

    Sin ánimo de ser pesimista ni nada que se le parezca, el panorama para MORENA en la Ciudad de México luce desolador por decir lo menos y no se ve por donde ese partido vaya nivelando las condiciones para hacer frente a la oposición que claramente está ante la posibilidad de darle un buen susto a los guindas en la capital en la contienda de 2024.

    Sin embargo y muy contrario al espejismo que quieren creerse en el PAN, no es precisamente la aceptación de los electores hacia un instituto conservador lo que les da el margen de competitividad, sino la falta de capacidad de los actores políticos de MORENA para lograr cohesionar a las distintas fuerzas políticas que operan en la capital.

    Es decir, en el gobierno de la Ciudad de México hay avances significativos en varios ámbitos que deben de reconocerse y atribuirse en buena medida a la jefa de gobierno, pero también existen una serie de prácticas que se asemejan mucho a las del otrora PRD en la que prevalecen las imposiciones de los grupos que por más que se niegue, operan como verdaderas tribus y que no permiten la participación de la verdadera militancia o la de elementos valiosos que tienen mucho que aportar a la llamada Cuarta Transformación. Muchos de los liderazgos de esas tribus (como ha sucedido por años) cierran los espacios de gobierno a los puros cuates con tal de mantener una presencia que les permita seguir dependiendo de los cargos públicos sin que les interese en lo más mínimo el proyecto al que supuestamente se deben o al que debieran de manifestar completa lealtad. Eso pasa en algunas áreas del gobierno capitalino y no pueden atribuirse directamente a Claudia Sheinbaum precisamente, pero también se presentan en varias de las alcaldías que gobierna el partido de López Obrador. 

    A esto hay que agregar un elemento clave: el electorado capitalino es muy dado a ejercer un voto de castigo cuando percibe que las autoridades o los representantes populares no cumplen con sus expectativas, y, si a eso se añaden los cuantiosos recursos que destina la oposición, además de su inmensa capacidad para aprovecharse de movimientos legítimos, pues no hay mucho que discutir. Por tal motivo, estamos frente a una verdadera debacle del morenismo que puede tener consecuencias graves y que significaría un enorme retroceso para la vida democrática de la capital más importante del país.

    Otro factor que pareciera no quiere analizar el propio morenismo, es la necesidad de ya conformar un amplio equipo de trabajo que genere las condiciones necesarias para plantear un proyecto político que consolide la participación democrática y que éste gire en torno al propio proyecto y no a las aspiraciones personales por muy legítimas que sean. Por ejemplo, Clara Brugada no ha hecho un mal papel en la Alcaldía Iztapalapa, sino todo lo contrario, pero ella y uno que otro personaje más, emanado de la izquierda y con posiciones dentro del gobierno capitalino, saben que el comportamiento de las fuerzas al interior son un verdadero obstáculo para el futuro de la capital, por lo tanto, optan por mantener una postura prudente.

    Dentro de los actores que pudieran ser considerados para la candidatura a la jefatura de gobierno, debiera destacar en principio aquel que realmente represente las necesidades de la población, pero eso mismo es lo que reduce las opciones, pues más allá de los jefes tribales, debiera de impulsarse una propuesta fresca que sea capaz de someterse al escrutinio de la militancia y garantice la cohesión de todas y todos los que comparten el proyecto lópezobradorista y que atraiga a otros sectores. Dicha propuesta, por desgracia, no se alcanza a ver por ningún lado, así que vaya problema en el que está metido el partido. 

    Pero como mencionamos al principio, no es el pesimismo el que acompaña estas líneas, sino la postura crítica de quiénes hemos vivido la descomposición de la izquierda y su incapacidad para ver más allá de la ambición personal. Por eso es más que urgente que aquellos llamados de la militancia y uno que otro liderazgo de cohesionar a varios colectivos de la ciudad, logre tener eco en MORENA y se impongan sobre los que se creen dueños del gobierno capitalino y que abiertamente tienen un pie metido en el proyecto de Sheinbaum y otro con sus contrincantes, aunque a estas alturas ya no se sabe si es Adán o Marcelo el segundo con más posibilidades. Ahí hay que echar un ojo a las encuestas, pero de que hay gente en el gobierno de Sheinbaum que juega con ella, con Marcelo y con Monreal, ni como negarlo. 

    Por cierto, el PRD jamás aprendió y como suelen decir algunos “hasta parece que lo hacen a la maldad”… ¿De dónde se les ocurrió que Cházaro es la propuesta viable para buscar la candidatura? Evidentemente no es más que una moneda de cambio que habrá de someterse a las condiciones del PAN, pero es una apuesta más que pobre. A pesar de estar en la evidente etapa final de su existencia, aún posee cuadros valiosos que van más allá de Jesús Ortega, Zambrano o el propio Camerino. Pudieron optar por una propuesta mucho más joven que conoce las condiciones de la ciudad y que ha destacado en la operación política que muchos frutos le dio al PRD y a la propia Nueva Izquierda. Esa propuesta bien pudo encabezarla un personaje como Edgar Pereyra, quien proviene del CGH y tiene una larga trayectoria en el sol azteca. Quizá una propuesta encabezada por él, pudiera significar mayores dividendos electorales pues atraería el voto de sectores que no se identifican ni con la derecha ni con MORENA. Pareciera una utopía pero a como están las cosas en el PRD, él vale mucho más que cualquier moneda de cambio.