Etiqueta: Luis Tovar

  • El futuro de la capital

    El futuro de la capital

    Leyendo “Ciudad pérdida”, el imperdible texto de Miguel Ángel Velázquez que aparece dos días a la semana en “La Jornada” pude encontrar una serie de coincidencias en cuanto a la crítica que realiza al proceso de sucesión para la jefatura de gobierno y la elección del próximo año.

    Para quienes vivimos en la CDMX, por más motivaciones políticas que tenga cada quien, no se puede tapar el sol con un dedo, en esta ciudad ha habido grandes avances en materia de derechos que son atribuibles a la izquierda, pero también existen muchos pendientes por resolver, en tanto de que habitamos una de las ciudades más importantes del mundo por sus dimensiones, su cultura y sobre todo la pluralidad por la que se compone. Esos pendientes, por supuesto que están encabezados por la inseguridad pero no se deben solamente a la actuación del gobierno capitalino, pues, salvo los aplaudidores del neoliberalismo, se reconoce que las causas de la violencia, radican principalmente en la pobreza y desigualdad.

    Sin embargo, la situación política actual de la capital le ha cerrado el paso por completo a la sensatez, mientras la oposición se niega a reconocer los avances, MORENA por su parte se niega a reconocer los errores. En el primer caso puede entenderse la lógica de no reconocer los aciertos, y menos cuando ven que el partido en el poder tiene como puntos débiles la actuación de algunos funcionarios. El segundo caso, el de MORENA es verdaderamente incomprensible pues el rechazo a la autocrítica permea en todas las áreas de gobierno, ya sea estatal o el de las Alcaldías. Es incomprensible porque la andanada de la derecha exige de la contraparte la mejor de las actuaciones, y, en honor a la verdad, muchos de los gobiernos locales dejan mucho que desear.

    Por más que se quieran auto engañar las élites del morenismo, lo cierto es que en la capital no se ve por donde emerja un liderazgo capaz de hacer frente a las exigencias de todos los sectores de la sociedad capitalina, lo que si se es claro es la manera en que muchos de los grupos tribales de ese partido, comienzan a barajar las alianzas entre sí para ver más a la ciudad como botín que como el principal motor del movimiento lópezobradorista. Ahora bien, la carencia de dicho liderazgo irá colocando a ese partido en la necesidad de circunscribir el proceso de sucesión en la capital al proceso federal, lo que significa que la inmensa mayoría de las dirigencias capitalinas, apuestan por la candidatura de la ex jefa de gobierno con la idea de que en la ciudad el o la sucesora será por decantación. 

    Ante tal circunstancia pareciera no haber más remedio, se terminará haciendo necesaria la intervención del único liderazgo moral que existe en MORENA para orientar el rumbo en la ciudad o, de lo contrario, la posibilidad de que se presente un panorama adverso se irá incrementando. El futuro de la ciudad no puede quedar a merced de las cúpulas, mucho menos de los intereses que han venido agrupándose en élites menospreciando a la militancia, el futuro de la ciudad debe enmarcarse en lo que teóricamente es el proyecto de transformación.

    Para tal escenario, como expresa el articulista de “la jornada”, existe un antídoto: “los peligros para la continuidad de la 4T en esta capital se podrían esquivar con una buena decisión. Una buena o un buen candidato que no obedezca al capricho sería la forma de evitar un problema mayor” y me atrevo a sentenciar, ya es hora de que se acabe de una vez por todas con esos caprichos pero para hacerlo se necesita más que un discurso, se requiere un nuevo liderazgo distante a los hoy existentes pero apegado a los principios que enarbola la Cuarta Transformación.

    Que no cante victoria la oposición, puede que haya liderazgos en el movimiento de la ciudad que estén despistados, pero, aún con eso, existe una militancia férrea que defenderá las causas de esta gran ciudad y que aportará (como siempre) lo más valioso que tiene el movimiento: la dignidad que hizo de esta ciudad una entidad de derechos y libertades.

  • Xóchitl Gálvez, el escaparate del frente opositor

    Xóchitl Gálvez, el escaparate del frente opositor

    No, no es Xóchitl Gálvez (por mucho que ella misma quiera creer en esa posibilidad) quien termine siendo la candidata para la presidencia de la república del dichoso frente amplio opositor, pero, por el momento, se convirtió en el escaparate que acomoda perfectamente a la simulación de los partidos políticos que pretenden vender la idea de una especie de “ciudadanización” de su proceso electivo. Es más, no sólo le es conveniente al PRI y sobre todo al PAN encumbrar la imagen de la Senadora de la República, para el emporio televisivo de este país, su posible precandidatura, candidatura, coordinación, jefatura, o como quiera se llame, la imagen de Xóchitl les viene como anillo al dedo. 

    La razón por la que estos partidos, particularmente el PAN, echarán a andar una estrategia en la que vaya destacando la figura de la hidalguense es muy sencilla: se trata de ir generando entre el electorado la idea de que la oposición puede tener como abanderada a una mujer que haga frente a otra mujer, ya que (equivocadamente) dan por hecho que la abanderada de MORENA sería la ex jefa de gobierno. Equivocadamente no por restar mérito a Sheinbaum, sino porque aquellos dentro y fuera de MORENA que creen que todo está definido de plano andan muy perdidos. Así que, siendo una mujer en la persona de Gálvez, la figura que vaya apareciendo de manera constante en ciertos medios, supondría para estos partidos generar ciertos adeptos en algunos sectores.

    Pero quiénes de verdad están de plácemes con doña Xóchitl son los dueños de la fábrica de ilusiones y mentiras, pues, tanto televisa como la televisora del usurero fanfarrón y evasor de impuestos Ricardo Salinas, ya están más que alistados para hacer toda una telenovela de la vida de la Senadora que les da el guion perfecto: la humilde hidalguense que de niña vendía gelatinas, que vivió en la azotea de un barrio pobre de Iztapalapa, de padres indígenas, etc. etc. Así que al melodrama llamado Xóchitl Gálvez, sólo le faltará la melodía que quiera implementar Santiago Creel para erigirse como el verdadero candidato.

    Por supuesto que puede parecer una especulación, pero conociendo cómo se las gastan en Acción Nacional, lo que parece evidente es que la cúpula utilizará a Xóchitl como factor que legitime el proceso pues ya han definido que será Santiago Creel el elegido para perder en la próxima elección. Toda la evidencia apunta hacia esa posibilidad, pues si se trata de deslealtades y traiciones, la competencia es muy reñida al interior de ese partido sin dejar de lado que también se enfrentarán al PRI-Alito y lo que instruya Claudio X González.

    Así que sólo bastará un mes para que el PAN acomode sus respectivas fichas en el lugar que le conviene tenerlas para pasar por encima de los otros partidos y de la propia Xóchitl Gálvez que comprenderá hasta ese momento el papel que aceptó jugar y que en principio estaba destinado para Lilly Téllez.

    Mientras tanto, en el otro frente en el de MORENA, se torna interesante el proceso y eso que apenas llevan dos semanas los aspirantes, hay que reconocer que hasta el momento los contendientes van por el camino correcto privilegiando la famosa unidad o cuando memos alejándose de la descalificación abierta, aunque, cuando decimos “por el camino correcto” es a partir de que cada uno va cayendo en su realidad y en lo que realmente representa. Así que la brecha que se visualizaba tan amplia se va acortando por lo que ya cerca del cierre se darán sorpresas para propios y extraños.  

  • Los hermanos de AMLO

    Los hermanos de AMLO

    Al parecer la semana de arranque de los aspirantes a la silla presidencial generó más expectativas de las que realmente alcanzó. Unos encomendándose al santo patrono, otros placeándose (literal) y uno que otro apenas pensando que estrategia seguir. Lo cierto es que, al menos para los efectos de lo que se pretende y que derivan en la encuesta, no se ve por donde la estrategia les funcione a algunos, más allá de mostrar músculo en cada una de las entidades. Lo que para nada pasó inadvertido estos días fueron un par de sucesos que por más que uno trata de descifrarlos, nomás no se entienden. Uno de ellos es la invitación de Marcelo Ebrard dirigida a Andrés López Beltrán para ocupar un espacio en el gabinete en una secretaría que parece más concebida en la demagogia que en algún proyecto con eficiencia y trascendencia administrativa. El otro suceso parece estar peor, Claudia Sheinbaum destacando la adhesión de un diputado capitalino panista de poca monta al proyecto (según) de la Cuarta Transformación.

    En el primer caso las reacciones no se hicieron esperar, desde el señalamiento del propio Andrés Manuel hasta la necesaria y prudente carta de López Beltrán agradeciendo la invitación, pero rechazando el ofrecimiento en aras de mantener la sensatez que exige el proceso de sucesión. El historiador Pedro Salmerón lanzó una pregunta en una red social “Lo de Ebrard sobre Andrés López Beltrán ¿fue tontería, necedad o provocación?” Dudo mucho que se trate de una tontería, tampoco de necedad, estamos hablando de Marcelo Ebrard cuya trayectoria política y, sobre todo su origen, hacen evidente que calculó perfectamente la trascendencia de su propuesta para poner sobre la palestra la reacción del principal aludido que, por supuesto, no fue el hijo del presidente sino el presidente mismo, o sea, fue una verdadera provocación. Cuantimás cuando los seguidores del Excanciller sostienen una y otra vez la idea de que las exigencias de Marcelo han ido marcando la agenda del “corcholataje” y del mismo partido en esta etapa.

    El segundo caso, el anuncio de Claudia, bien puede considerarse como una pifia pues una de las principales quejas del morenismo es la inclusión de externos que gracias al olímpico chapulineo terminan restando la posibilidad de muchos compañeros para acceder a los cargos de representación aún y cuando cuentan con el trabajo territorial que en buena medida construye a ese partido. Así que, no pareciera que en estos pocos días haya mucho que analizar sobre los principales protagonistas del proceso interno de MORENA y como habrá de beneficiar a cada quien en la encuesta, sino más bien hasta donde están dispuestos a cometer errores ya sea por ingenuidad o por provocación con tal de verse favorecidos en el ejercicio.

    El caso de Adán Augusto pareciera ser el más destacable y no lo expresamos aquí a partir de las muestras de apoyo que algunos sectores hemos expresado, sino porque en realidad lo que se busca de este proceso es identificar quien realmente reúne las cualidades para dirigir al país desde la óptica de la Cuarta Transformación y no quien es más hermano de López Obrador. Es decir, lo que se espera es que los aspirantes se abstengan o caigan en la tentación de dos elementos clave: la idea de emular al presidente en las acciones que le han significado tal grado de popularidad, así como en el uso de su imagen para tratar de allegarse adeptos. Adán Augusto ha optado por dar voz a distintos sectores en lugares clave que hoy son víctimas de políticas fallidas como el caso de Jalisco o Guanajuato, incluso como es el caso de Zacatecas donde el hermano de otro aspirante (Monreal) no ha sido bien evaluado por la ciudadanía. Adán Augusto ha sido enfático en señalar lo que para una buena parte de la población es una realidad: el movimiento está bajo el acecho de la derecha recalcitrante y de los poderes fácticos de las televisoras que mantendrán la campaña de desinformación para afectar a la Cuarta Transformación y en eso ha centrado su discurso el tabasqueño.

    En fin, todavía resta mucho tiempo para saber el desenlace de este proceso y la moneda está en el aire, absolutamente nadie puede sentirse seguro o decirse el favorito de Andrés Manuel, nadie puede sentirse el más hermano (o favorito), así que cualquiera de los principales actores pudiera ser elegido sin que nadie resulte sorprendido, pero en el camino ojalá que, por el bien del movimiento, opten por las propuestas que realmente conquisten al pueblo que habrá de ser encuestado y en el que recaerá la decisión final. 

  • Aviéntense todos

    Aviéntense todos

    La carrera por la sucesión presidencial en MORENA parece tener un comienzo sensato a partir de que las reglas quedaron plenamente definidas por un lado y, por otro, que los principales contendientes han asumido compromisos que privilegian la unidad en torno al proyecto de la cuarta transformación y que sin duda serán fundamentales para legitimar al o la elegida. Sin embargo, esa sensatez pareciera no permear en algunos de los equipos de cuando menos un par de aspirantes puesto que no se pierde oportunidad para descalificar al adversario sin ton ni son con una serie de descalificaciones que llegan a ser condenables.

    Casualmente, muchos de los que hoy propician narrativas de odio en contra del contendiente de enfrente, son los mismos que cada tres años disputan los espacios de representación sin más mérito que el de pertenecer a uno u otro equipo. Esos casos no pueden colocarse en el espectro de la pasión que despiertan las contiendas, sino que pertenecen a la eterna práctica de meter hilo desde la descalificación para sacar hebra en la negociación. Es decir, no se puede sostener que no han aprendido la lección acerca de lo que la militancia de a pie demanda, sino que se comportan fieles a la naturaleza arribista que los coloca en los espacios de poder.

    Aviéntense todos (contra el adversario) pareciera ser el grito de guerra de algunos de esos equipos que ven en este proceso la garantía de posicionarse en el proceso electoral sin que les importe un comino el proyecto. Así ha quedado de manifiesto en muchos espacios de comunicación interna de los clubes de fans dejando las propuestas al margen como si fueran lo menos importante. Pero bueno, en la lógica del todo se vale mientras no me vean, el encono irá en aumento de aquí a los resultados de la encuesta y seguramente se extenderá más allá de septiembre. 

    Sin embargo, el avance es significativo gracias a la indudable solvencia moral de AMLO al interior de MORENA que irá serenando los ánimos al grado de que difícilmente, alguno de los aspirantes se atreverá a faltar al compromiso adoptado por más que le desencantara el resultado. Estando así las cosas, y sea cual sea el elegido, lo cierto es que en MORENA pocas son las posibilidades de ruptura y éste saldría fortalecido de ese proceso interno. De ahí que la tarea fundamental sea la de comenzar la estrategia que logre posicionar a los mejores cuadros en los distritos electorales para conformar un grupo parlamentario sólido que contrarreste los embates de Acción Nacional que seguramente será la bancada más nutrida de la oposición.

    En fin, el proceso ha entrado en una nueva fase de un par de meses que se torna interesante y que se acompañará de un reacomodo no menos interesante en la administración pública (incluyendo la CDMX) además de que poco a poco se irán desdibujando mitos para dar paso a realidades, especialmente para aquellos que han pretendido construir una narrativa de cierta preferencia de López Obrador hacia alguna u otra corcholata en particular. El momento de la verdad ha llegado y ahora sí iremos viendo la realidad en la que se encuentra cada uno de los aspirantes, lo que sin duda abonará al proceso y la tan ansiada unidad que siempre ha sido una de las principales carencias de la izquierda.

    Por último: Sin mayor sorpresa transitará el nombramiento de Martí Batres al frente de la capital del país para quedar al frente de la entidad más politizada de la nación. Quiénes participamos de los movimientos sociales, celebramos que la jefatura de gobierno quede bajo su conducción porque si algo necesitará el gobierno capitalino en esta coyuntura es orden desde lo interno y un actuar político que respete la voz de todas las expresiones, no sólo las de MORENA, sino las de los otros partidos y las de la sociedad civil. Enhorabuena para el camarada.

  • ¿La última cena?

    ¿La última cena?

    Sin mayor novedad transcurrieron las elecciones en Coahuila y el Estado de México donde los resultados eran previsibles y sólo se confirmó la tendencia que señalaban las encuestas desde hace varios meses.

    Por fin terminó la era del PRI en la entidad mexiquense y en Coahuila y Durango tendrán sus únicos bastiones reales que habrán de cuidar como la niña de sus ojos y, en una de esas, de la mano del joven gobernador, comprendan que lo que necesita la ciudadanía es un gobierno que sea capaz de dejar en el pasado las mañas del moreirato y la vieja complicidad de actores como Mary Telma Guajardo que hoy está “que no cabe” con el triunfo de Manolo Jiménez aunque ni ella, ni el PRD realmente hallan aportado gran cosa al triunfo más que cargar la matraca.

    Por cierto, hablando del PRD, vaya fin que tuvo el otrora principal partido de izquierda: no sólo llegó a su etapa terminal, sino que tristemente y traicionando todas las causas que le dieron vida, se despide de la vida política poniéndose a las órdenes de la derecha más nefasta y mohosa en la historia de los partidos políticos de este país desde el México postrevolucionario.

    Lo bueno para la ciudadanía de Coahuila y el EDOMEX es que habrán de iniciarse nuevos procesos de transformación en el gobierno que sí o sí, tendrán que mostrar un nuevo rostro a partir de las lecciones que deja la contienda. En Coahuila bien puede centrar MORENA un ejercicio de reflexión que sea capaz de repensar las alianzas con otros partidos y sus verdaderos alcances, pues en ese Estado se conjugaron dos factores internos clave: un candidato poco legitimado y la ambición de otro que le hizo el juego al ya muy desprestigiado Partido del Trabajo.

    Ahí sí, la principal crítica es para Ricardo Mejía y no porque fuera un mal candidato, sino porque le interesó un comino el proyecto y antepuso sus aspiraciones lo que probablemente lo aleje un buen rato de la vida política.

    Por otra parte, en el EDOMEX también hay que reflexionar porque el triunfo acompaña la esperanza de muchos militantes leales de MORENA y especialmente del lópezobradorismo, así que la tarea será monumental. La maestra Delfina tiene todo un reto por delante y éste va más allá de hacer un buen gobierno, el primero y más importante es dejar claro que tomará las riendas de la administración pública sin la presión e injerencia de los grupos de poder que controlan el espectro de la izquierda en el Estado.

    En fin, la hora de la verdad llegó para todos los partidos pero con mayor énfasis en los aspirantes morenistas a la presidencia, no en vano la reunión del pasado lunes de AMLO con los principales contendientes ha dado paso a la especulación de muchos y al fanatismo de otros que se desviven por hacer conjeturas o fantasear con las motivaciones del encuentro.

    Lo que sí es que quizá sea la última cena en la que coincidan todas las corcholatas con Andrés pues las definiciones y su proceso previo, sin duda van a generar un reacomodo interesante en la administración pública para garantizar un cierre de sexenio que blinde las acciones que son prioridad para Andrés Manuel. Los escenarios son amplios y comienzan a tomar forma con la renuncia de Marcelo pero, ¿Pedirá licencia Claudia Sheinbaum? ¿Renunciará Adán Augusto? Si pide licencia la jefa de gobierno, el reacomodo de fuerzas en la administración local necesariamente transita por determinar una estrategia que vigorice la fuerza electoral de MORENA en la capital dada la importancia que tiene para el país y, evidentemente por ser el principal bastión de MORENA.

    En relaciones exteriores, absolutamente nadie puede negar el trabajo de Marcelo y su capacidad para mostrar una política exterior firme, digna y sobre todo respetable para muchos países, aunque estando en la recta final de la era de AMLO, las bases de esa política exterior han quedado bien establecidas y poco efecto negativo tendrían tras la salida del canciller anunciada este martes.

    Sin embargo, un caso llama la atención por su singularidad, ¿Qué pasaría si, (cómo indican las encuestas), el crecimiento de Adán Augusto llega a tal grado que le valiera ser el candidato de MORENA a la presidencia? Su renuncia no sería un caso menor, pues el nuevo encargado de la política interior del país forzosamente debiera reunir varios aspectos: tener la confianza del presidente, contar con experiencia en política interior y, sobre todo, emular la eficiencia del actual titular de Bucareli para la solución de conflictos. En ese escenario, ojo, pudiera ser alguien de la vieja guardia que actualmente se muestre imparcial al proceso interno, sólo así garantizaría que SEGOB actuara como garante de estabilidad política frente al cierre de esta administración con todo lo que acarrea la elección de 2024.

    El caso es que parece ser que está en la figura de Adán Augusto la opción que comienza a tomar más fuerza por toda la connotación que lo acompaña y no como el aspirante preferido o más cercano a Andrés, pues la cercanía de los tres es innegable, sino como el garante de legitimidad y estabilidad que hoy requiere el proceso, tanto electivo como de continuidad de la Cuarta Transformación.

  • El futuro del EDOMEX

    El futuro del EDOMEX

    A escasos días de que acabe la era del priísmo en el Estado de México y su casi extinción en el país, comienzan a saltar una serie de dudas que deberían de preocupar a López Obrador: ¿Qué será de la entidad si el cacicazgo tiene como rehén a la Maestra Delfina Gómez?

    No se trata de una preocupación menor pues para nadie es un secreto que los dueños de MORENA en la entidad, tomarán las riendas en la conformación de lo que será el gabinete y, sobre todo, de los destinos de la entidad mexiquense que probablemente se enfrentará a una nueva era más cercana a un neo priísmo que a lo que se supone debería ser la Cuarta Transformación.

    Tampoco se trata de minimizar el carácter de la Maestra Delfina o sus capacidades y mucho menos de colocarla como apéndice de los Tlatoanis androcentristas del grupo Texcoco, sino de centrar el análisis en el problema que se avecina en MORENA y sus partidos aliados, así como las consecuencias negativas que se pueden presentar en la población. Y es que el problema del morenismo y sus seguidores es pensar que las siglas son sinónimo de buen gobierno lo que dista mucho de la realidad, baste echar un vistazo en muchos de los municipios donde gobierna ese partido para que se disipen dudas si es que alguien las tiene.

    No se puede generalizar por supuesto, hay excelentes alcaldes pero al menos en el caso del Estado de México, los emanados de MORENA se encuentran entre los peor evaluados por parte de la ciudadanía como es el caso de Ecatepec, Chimalhuacán, Chalco e Ixtapaluca. Bueno, hasta en el municipio de Texcoco la ciudadanía evalúa con menos del 50% de aprobación a la alcalde morenista y conste que de ahí es la candidata guinda. A todas luces el ejercicio de gobierno morenista en esas demarcaciones deja mucho que desear, salvo el presidente municipal de Nezahualcóyotl, pero cómo reza el clásico: “una golondrina no hace verano”Así que estamos frente a lo bueno, lo malo y lo peor, lo bueno el adiós del PRI, lo malo, la asunción de nuevos cacicazgos bajo las siglas de MORENA y lo peor, el futuro que se avecina para la entidad más poblada de la nación.

    Sin embargo, queda algo de esperanza ante ese panorama, sobre todo si la Maestra es capaz de poner un freno prudente a la tendencia manipuladora de las dos corrientes que integran la banda de los “H” (Higino y Horacio) y más aún si es capaz de construir desde ya, una nueva tendencia en la que se priorice primeramente a la ciudadanía y a la militancia. Aunado a lo anterior, Delfina Gómez está ante la posibilidad de generar nuevas alianzas con otras fuerzas, tanto políticas como de la sociedad civil organizada que pueden convertirse en un factor de equilibrio frente a la banda de los “H”.

    Eso es en el EDOMEX, en Coahuila está igual de complicado el asunto, aunque en ese caso, todo indica que se va a perder la elección gracias a la mezcla de tres factores: la impericia de Mario Delgado, la pésima candidatura de Guadiana y la ambición del ex subsecretario Ricardo Mejía a la que se suma la eterna práctica del PT de rascarle de dónde se pueda para arañar el registro aunque eso signifique traicionar el proyecto de nación que tanto pregonan y que según los identifica con Andrés Manuel.

    Por esa razón lo de Coahuila debería ser un verdadero llamado de atención para MORENA, y, quizá, una buena oportunidad para sacudirse la parasitaria presencia petista. Cabría aquí la pregunta: ¿Qué será del PT si en el 2024 no logra ir en alianza con MORENA?. Así que el petismo (ya sea el de Anaya o el de Óscar González), debería estar más que preocupado pues si nos acercamos a esa posibilidad, es muy probable que comparta la realidad que atraviesa el perredismo y que los coloca al borde de la pérdida del registro, ya ven que en términos reales, la presencia del Partido del Trabajo en casi todo el país es meramente testimonial.

    En fin, tanto el EDOMEX como Coahuila son motivo de análisis y de reflexión que forzosamente deberían acompañarse de la autocrítica, y, aunque parece ingenuo creer que puede llegar a configurarse ese ejercicio, siempre quedará abierta la esperanza para los que creemos que se puede impulsar desde abajo, desde la militancia.

  • Un millón de firmas

    Un millón de firmas

    Pues sabrá Dios de donde saca Roberto Gil Zuarth que la “candidatura” de Lilly Téllez está despuntando claramente, o se trata de una fantasía o de plano enloqueció el ex secretario particular de Felipe Calderón y protagonista de la trama de sobornos relacionados, entre otros, con el pacto por México.

    Y es que conforme nos acercamos a la elección de 2024 y por más que la oposición se lleva un palmo en las narices, un día sí y el otro también, siguen sin comprender que no existe posibilidad alguna de detener el triunfo del bloque de enfrente y menos si continúan creyendo que los seguidores en twitter se convierten en automático en electores.

    Es decir, avanza el tiempo y lejos de construir un proceso de unidad que abra paso a la conformación de un bloque con identidad más ciudadana que política, insisten en mantener la ruta de la ocurrencia por una parte y por otra la de la confrontación basada en mentiras y calumnias desde las redes sociales. Por esa misma razón comienzan a incendiar sus propios procesos electivos como si la definición de uno u otro candidato o candidata, realmente impactara en la contienda presidencial ¡Vaya ingenuidad!

    Llama la atención por ejemplo que, en su proceso interno, los gerentes de Acción Nacional ahora opten por establecer un requisito más que imposible, un millón de firmas como muestra de presencia territorial. Pues si no la tienen como partido, ¿cómo diablos habrían de conseguir tal número de firmas?, sobre todo cuando llevan casi un sexenio sin realizar una sola acción que realmente los identifique con la ciudadanía.

    Por esa misma razón les llueven las críticas de propios y extraños pues a casi un año de la elección, todavía no dimensionan que, en su caso, ya no se discute si van a perder la contienda, la discusión es en torno a cómo perder sin una caída estrepitosa. Menudo problema entonces tiene ahora el panismo con dos de sus aspirantes, pues entre el acartonado Santiago Creel y la virulenta Téllez se irá incrementando en los próximos días el tono de descalificaciones, ahí si aplica la máxima “tan poco el amor y desperdiciándolo en celos”.

    Ah, por cierto, si de descalificaciones se trata, Creel lleva las de perder. Bueno, hablando de virulencia MORENA también tiene lo suyo, pues el “compañero” de ese partido (Noroña) no se queda atrás en sus descalificaciones proferidas contra “el compañero presidente” y todo porque las encuestas lo reflejan en su realidad: no representa ni a la izquierda y mucho menos a lo que buena parte de la sociedad identifica con el movimiento de López Obrador. Bien dicen que en eso de las candidaturas “no sólo hay que quererla, también hay que creérsela” pero pues este abusa.

    Total que en ambos casos, el de Lilly Téllez y el de Noroña son una vacilada y no porque se trate de menospreciar su legítima aspiración, sino porque en los tiempos actuales y a cómo está el país, lo necesario es optar por un personaje prudente, con madurez política y solvencia moral que pueda equilibrar la ya muy desgastante polarización en la que se encuentra la vida política del país y que ha alcanzado otras esferas.

    La elección la ganará sin duda el bloque encabezado por MORENA y de ahí tendrá que salir ese personaje, lo bueno es que esta semana tanto Ebrard como Sheinbaum le fueron bajando a la estridencia, lo malo es que el club de fans de cada lado anda muy calientito.

    Quizá en eso radiquen en buena parte las claves del crecimiento de Adán Augusto: el no meterse en el terreno de la confrontación y el de equilibrar diversas posturas a través de los resultados como Secretario de Gobernación.

    En fin, más allá de las filias y odios de cada quien, incluidas las del suscrito, y más allá de las encuestas, queda claro que el papel del tabasqueño terminará siendo determinante para el proceso interno y, de mantenerse la tendencia, ¡aguas! Le puede alcanzar.

  • CORCHOLATAS: MUCHAS POSIBILIDADES Y POCA SENSATEZ

    CORCHOLATAS: MUCHAS POSIBILIDADES Y POCA SENSATEZ

    Una y otra vez hemos manifestado en este espacio que la desesperación del bloque opositor tiene tantas motivaciones cómo rostros, la principal motivación es que ni por donde se asome una posibilidad de triunfo en las elecciones futuras, salvo Coahuila, entidad que podrá mantener bajo su control el priísmo, ya sea ganando o perdiendo la elección, pues por más que el morenismo lo quiera negar, Guadiana es una pésima apuesta.

    Con todo y eso, lo cierto es que la recta final del gobierno de López Obrador atravesará por un proceso de definiciones y traiciones que están ligadas a la sucesión y que van a tambalear las estructuras internas de MORENA, situación que irá dejando muchos lastimados del proceso, aunque tratándose de militantes poco importa para los jefes tribales.

    Al fin y al cabo, los “operadores” siempre terminan acomodándose donde sea y como sea por aquello de las cuotas. Pero bueno, al menos en la visión reduccionista de muchos no está en riesgo la elección o el triunfo, aunque visto desde otro ángulo, lo que si está en riesgo es el proyecto.

    Estando así las cosas y con la guerrita de declaraciones que se traen algunos aspirantes, ha llegado la hora de establecer un pacto de unidad entre Claudia, Marcelo y Adán Augusto, en el que impere la sensatez y se logre trazar una ruta que obligue moralmente a todos a comportarse de manera digna y sobre todo a legitimar el proceso de selección interna en aras de dar continuidad a un proyecto que costó décadas construir.

    Aquí el morenismo se enfrenta a un gran problema: ¿Cómo legitimar el proceso y el resultado cuando los agravios van en aumento? Puede verse complicado y realmente lo es, quizá más de lo que se puede imaginar cualquiera, sin embargo, parece ser que entre los candidatos puede imponerse una figura que genere los equilibrios necesarios para no rebasar la prudencia que este proceso requiere.

    En ese contexto adquiere un papel más protagónico Adán Augusto López, incluso por encima de Sheinbaum y Ebrard, dado que su crecimiento constante en las mediciones deja en claro que reúne los elementos necesarios para alzarse con el triunfo, aunado a que comienza a sumar adeptos de otros sectores que se sienten lastimados o ignorados de 5 años para acá.

    Ese papel va a ser determinante para el futuro de MORENA, tal ha sido el crecimiento del tabasqueño que, de resultar ganador, contaría con la legitimidad suficiente de la militancia y con la evidente aprobación de López Obrador. Incluso, de no ser el elegido en la encuesta, terminaría siendo el elemento clave para legitimar el triunfo de cualquiera de los contendientes. Algunos colectivos sostenemos que Adán Augusto es la mejor opción dentro del morenismo para suceder a AMLO, basados en diferentes consideraciones como las siguientes: No es rehén de grupos cupulares, no se somete a intereses de la vieja práctica política y sobre todo, ampliaría la política pública que ha resultado favorable para sectores como el campesino.

    Falta poco para el momento decisivo y pronto sabremos el destino de los contendientes, pero así faltara un solo día, el llamado urgente a la sensatez y la exigencia de rectitud la mantendremos presente. Ojalá todos estén a la altura de lo que demanda una inmensa mayoría pero ya se verá.

  • El devaneo de la oposición

    El devaneo de la oposición

    ¿De qué otra manera podría definirse la actual relación de la alianza opositora sino como un devaneo? Al final de cuentas tienen completamente claro que la acción coordinada para hacer frente a la capacidad electoral de MORENA, comenzará a desdibujarse en cuanto se inicie el proceso de discusión sobre las candidaturas principales que estarán en juego para el año 2024. Recordemos que no sólo está en juego la presidencia de la república, sino también varias gubernaturas entre las que destaca la CDMX, así como las cámaras de diputados y senadores. 

    Ese proceso de discusión por parte de la oposición está a la vuelta de la esquina y no será para nada un ejercicio fácil, todo lo contrario, irá evidenciando que el clasista y por demás decimonónico partido acción nacional, será el que vaya imponiendo condiciones, tanto al PRI como a lo que queda del PRD y, al final de cuentas, ambas fuerzas tendrán sólo un par de alternativas: o someterse a la voluntad del panismo aceptando las migajas que les quieran ofrecer o tensar la liga a lo máximo amagando con romper la alianza y optar por ir completamente solos. Sea una u otra la decisión de estos partidos, en cualquiera de los escenarios quedarán en una posición por demás peligrosa pues se acercan a la extinción. 

    Por esa razón, queda claro que el envalentonado panismo tendrá la última palabra a la hora de definir al candidato presidencial aunque la apuesta fundamental será garantizar a sus principales cuadros espacios en la cámara de diputados para encabezar la alianza opositora desde el poder legislativo. Esta no sería una mala estrategia, saben perdida la elección presidencial y nuestro sistema de representación permitirá que obtengan representación nutrida, pero existe un factor clave en el que no han reparado: ni el PRI contará con las mismas condiciones para activar la estructura de mapaches, ni el PAN cuenta con suficientes liderazgos que sean capaces de ganar elecciones en el territorio. Por cierto, aun así, existen personajes en ambos partidos que creen que las redes sociales ayudan a ganar elecciones. ¡Hágame el favor!

    Estando así las cosas, para estos tiempos lo importante ya no radica en la inmundicia que acompaña el actuar de la oposición, tampoco en la sumisión y complicidad de la corte o en la campaña de desinformación de los medios de comunicación como Proceso, Reforma, LatinUs y un largo etc. Lo importante está en que las fuerzas políticas realmente identificadas con la izquierda, comiencen a jugar un papel más protagónico en el proceso de continuidad. Eso incluye más a los aspirantes de MORENA que al propio partido, y no porque se pretenda descalificar a la dirigencia de MORENA, sino porque existen muchos personajes de la Cuarta Transformación que siguen sin comprender (ya sea por interés o por ignorancia) que lo que está en juego no son los cargos sino la posibilidad de llevar al país por un rumbo mejor al que heredó el PRI y el PAN.

    Por supuesto que restan tan sólo un par de meses para que eventualmente se defina al candidato de MORENA y no será nada fácil, las acusaciones de unos hacia otros van aumentando para beneplácito de los de enfrente que le apuestan a la catástrofe interna; sin embargo, con todo y eso, (que por cierto es parte del juego político), ni Sheinbaum, Ebrard o Adán Augusto, van a poner en riesgo el proyecto de Andrés Manuel, en algún momento imperará la cordura y parece ser que en ese aspecto, el Secretario de Gobernación nuevamente jugará un papel clave como garante de unidad.

  • El crecimiento de Adán Augusto

    El crecimiento de Adán Augusto

    Enfermó Andrés Manuel y como en otras ocasiones, más tardó en saberse de lo que tardó la oposición en zopilotear en las redes sociales especulando con la salud del presidente. ¡Caray! La distorsión de la información, así como el odio de muchos políticos y comunicadores hacia AMLO ya alcanzó los niveles que fuimos pronosticando desde hace poco más de un año.

    Pero pese a las mentiras que se fueron generando desde las redes sociales, reapareció Andrés, primero en un video y posteriormente en su conferencia matutina para mofarse de aquellos que sostenían que había tenido hasta un evento cardiovascular. Fiel a su estilo, agradeció las muestras de apoyo durante su ausencia, a la vez que aprovechó para burlarse del dichoso “vaguido” que sufrió en Yucatán durante una gira de trabajo. Lo cierto es que, a pesar del semblante cansado que nadie podría negar, reapareció y retomó sus actividades para frustración de sus detractores que una vez más dieron cuenta que existe AMLO para rato.

    Sin embargo, hay varias cosas que analizar respecto a las actividades que le restan a López Obrador en este sexenio y que no son un tema menor, especialmente porque el ejercicio de gobierno entra a la recta final que habrá de estar acompañada de la carrera por la sucesión y, en la que, sin duda, el presidente habrá de jugar un papel preponderante. No en razón de erigirse como el principal encuestado del proceso interno, sino porque sabe de sobra que los avances en el gobierno se encuentran en una fase incipiente que requiere de consolidarse y sólo podría garantizarse si el sucesor cuenta con la suficiente legitimidad para encausarlos. Así que menudo trabajo tendrá AMLO en esta etapa y no por nada se reunió con los principales contendientes a sucederlo, aunque Monreal sea de chocolate.

    El tema de fondo y que realmente preocupa es la pugna que viene acrecentándose entre Sheinbaum y Ebrard cuyos equipos andan que se les cuecen las habas por acelerar la guerra de descalificaciones, sin embargo, parece ser que nadie les ha alertado sobre la posibilidad de que Andrés dé un manotazo en la mesa con tal de poner orden. Y no, no se trata de que busque en particular beneficiar a algún favorito (que sin duda lo tiene) sino de advertir una vez más que lo se busca, es mantener la presidencia en aras del proyecto de la Cuarta Transformación, misma que pudiera enfrentarse a un inminente peligro si se permite que la ruptura o la división se imponga tras los resultados de la encuesta cada vez más próxima. En este sentido, es claro que la apuesta de Monreal terminará por aferrarlo a la jefatura de gobierno de la CDMX donde por cierto, no aparece un solo candidato natural por ningún lado, pero ese escenario se encuentra lejísimos porque las tribus morenistas capitalinas, es más fácil que cierren filas a que dejen pasar al zacatecano. Y Dios nos libre de tener al aliado número uno de Sandra Cuevas como Jefe de Gobierno. Por otro lado, el propio Andrés sabe perfectamente qué representa tanto la jefa de gobierno como el canciller, ambos se conducen con lealtad al presidente y, como quiera que sea, ya sea por interés o por simpatía, gozan de respaldo de una buena parte del morenismo y de la ciudadanía. No obstante, eso no pareciera ser suficiente como para mantener el rumbo marcado por Andrés Manuel.

    El otro caso y que resulta bastante interesante es el de Adán Augusto López Hernández, no sólo por la actuación como secretario de gobernación, sino porque el crecimiento que ha tenido en las encuestas es inmejorable. No parece ser producto de la casualidad, si se analiza desde un punto de vista objetivo, el tabasqueño ha construido una red de simpatizantes que ven con buenos ojos su posible candidatura. La clave de tal ascenso pareciera estar en que, a diferencia de Claudia o Marcelo, no tiene precisamente un grupo al interior de MORENA de los que suelen mantener secuestrado el partido, lo que le otorga una ventaja dado que, por más que lo nieguen en MORENA, la auténtica militancia (que no se siente representada por los viejos liderazgos), pudiera encontrar voz en el proyecto de Adán. Como quiera que sea, el tiempo se va acabando y Adán Augusto acorta la distancia respecto a los punteros. 

    En lo personal sigo creyendo que, con todo y los errores, se avanza en un proceso de transformación en este gobierno, para muestra el comportamiento de los poderes fácticos y de la oposición, pero mantener el rumbo requiere de un liderazgo capaz de mediar entre todas las fuerzas, pero este liderazgo no sólo ocupa de la lealtad sino de la capacidad y sobre todo de firmeza para defender el multicitado proyecto. Hoy Adán es una muestra clara de esas cualidades, la pregunta es: ¿le alcanzará el tiempo? Cada vez somos más los que pensamos que sí.