Desde 1973, el Centro de Estudios Lingüísticos y literarios del Colegio de México, ha realizado una serie de investigaciones respecto al vocabulario utilizado en la República Mexicana cuyo fruto es el Diccionario del español en México. Esta obra es de suma importancia dada la originalidad y los criterios lingüísticos que enmarcan en gran medida los modismos y expresiones tan características de nuestra singular forma de hablar.
Tras el desafortunado señalamiento de la reportera independiente Reyna Haydee Ramírez hacia Hans Salazar acusándolo de “palero” durante su larga intervención en la conferencia matutina de López Obrador, me pareció oportuno revisar a fondo, tanto la definición como las causas de la reportera para dirigirse de esa manera al compañero de “Los Reporteros Mx”.
Tomaré en primer instancia como referencia las 3 definiciones de “palero” del citado Diccionario del español en México:
Palero*
- 1 Persona que ayuda a estafar o a engañar a otras, especialmente en un espectáculo teatral o de magia o, en los juegos de azar, que aparenta ganar con facilidad para atraer a las víctimas: “Resultó que otros dos que estaban animando a apostar a la gente eran sus paleros”
- 2 Persona que acompaña a otra para festejar sus actos y aparentar que aquélla cuenta con mucho apoyo: “Esos partiditos son puros paleros del PRI”
- 3 Persona que trabaja con la pala
*https://dem.colmex.mx/ver/palero
Queda claro que ninguna de las definiciones anteriores pueden considerarse como características de Hans Salazar, no estafa o engaña a nadie en su oficio, para nada suele aparentar algo que no es y jamás, al menos en 25 años de conocerlo, lo he visto trabajar con una pala. Lo que me consta es que es un chico listo, militante de izquierda, por demás noble, dotado de una inteligencia envidiable y sobre todo un extremado devorador de libros con una biblioteca impresionante. No miro por ningún lado el desmedido señalamiento de la reportera. Aunque en el fondo creo que se trata de una mujer comprometida con su labor y, al menos hasta hoy, no me parece que se trate de un personaje ligado a los voceros de la infocracia que tanto desprestigia en la actualidad el oficio periodístico.
No pretendo en estas líneas denostar la forma en que se expresó la reportera aunque no la comparto, mucho menos denostaré el contenido de su dicho, dado que se tratan de temas de gran interés para aquellos a los que pretendió dar voz como lo hemos hecho otros, Hans por ejemplo. Lo que rechazo categóricamente es que la reportera no comprenda que la acusación sea por demás falsa y sumamente injusta hacia un compañero de oficio, que tan sólo por exponer temas relevantes como la evasión de impuestos de Ricardo Salinas Pliego, el asesinato de líderes pescadores de San Quintín o el trato inhumano hacia Julian Assange, le ha valido ser blanco de los poderosos dueños de los medios de comunicación que ven en este comunicador a todo un enemigo.
La compañera Reyna se equivocó, quizá por la frustración y hasta pudiera comprenderla; sin embargo, tal vez sin quererlo (ojalá así fuera), se convirtió en un estupendo garlito para los desprestigiados medios de comunicación necesitados de atacar a uno de los frentes que posee el lópezobradorismo, es decir, los medios de comunicación alternativos que transmiten las acciones de gobierno al mismo tiempo que dan voz a miles de personas. Por supuesto que la mayoría de estos medios alternativos o quienes colaboramos en ellos tenemos una identidad clara con Andrés Manuel, y por supuesto que no estamos exentos de perder en algún momento la objetividad, sin embargo poseemos una gran diferencia ante los medios tradicionales: no inventamos notas, no hacemos montajes, y no, no percibimos un solo apoyo de gobierno; realizamos nuestra labor por nuestros propios medios, por lo tanto, lejísimos estamos de ser chayoteros.
Eso al final es lo que le encabrona a la oposición a los medios y sus dueños, véase al vulgar de Salinas Pliego y sus ataques recurrentes a Hans Salazar. Por eso tiene razón Andrés Manuel, vivimos en mundo al revés, un tiempo de híbridos, pues efectivamente: “Los más corruptos que siempre han estado sometidos al poder, ahora le llaman paleros a los que defienden el proceso de transformación”. Ojalá que la reportera reflexione en que el pleito no es entre nosotros, es contra aquellos que agotaron sus posibilidades de hacer frente a la transformación, los mismos a los que hoy (insisto: quizá sin quererlo) paradójicamente les sirvió de palero.
Para acabarla de amolar
La comisión nacional de elecciones de MORENA dio a conocer hace pocos días el listado de los registros aprobados de los postulantes a congresistas nacionales. No resulta sorprendente que algunos personajes de “renombre” aparecieran y desaparecieran de la lista, hay muchos intereses de por medio y absolutamente nadie puede negar que son muchos los infiltrados que buscarán, desde dentro, desestabilizar el proceso. Hay tiempo suficiente para que MORENA no se “perredice” aunque en el ADN, muchos traigan consigo la enorme tentación de cooptar las estructuras burocráticas del partido. Casualmente los que acusan a la actual dirigencia, son los mismos que le restan legitimidad al partido. Sin embargo, estoy convencido que algunas posiciones al interior y leales al proyecto de la Cuarta Transformación, lograrán de manera legal y legítima encausar el proceso.
Hacemos comunicación al servicio de la Nación y si así no lo hiciéramos, que el chat nos lo demande.