Jorge Romero no descarta al empresario con deudas fiscales como candidato. Críticos ven un relanzamiento fallido que aleja al partido de la gente.
Jorge Romero, líder panista, abre la puerta a Ricardo Salinas Pliego para 2030. Él dice que si el magnate crece en popularidad, el partido lo considera. Esta idea genera dudas entre votantes cotidianos.
Además, Romero celebra el relanzamiento del PAN como un éxito. Él presume métricas altas y atención nacional. La gente de a pie ve solo un cambio de logo sin fondo real.
Por otro lado, críticos atacan este esfuerzo como superficial. Ellos dicen que el PAN se volvió un club cerrado para pocos. Familias mexicanas sienten que el partido ignora sus problemas diarios.
Ahora, voces opositoras llaman al PAN ultraderecha en nicho extremo. Ellos critican el giro ideológico que aleja a moderados. Jóvenes en las calles piden líderes que escuchen sus voces reales.
Romero admite errores pasados del partido. Él habla de decisiones en manos de elites. Ciudadanos humildes recuerdan cómo esto dejó sus necesidades sin respuesta.
En entrevistas, Romero cierra coaliciones para 2027. Él prefiere alianzas personales en estados. Opositores ven esto como división que fortalece al oficialismo.
Críticos como Ciro Gómez Leyva destrozan el relanzamiento. Ellos lo llaman sin concepto y basado en perdedores. Gente común busca esperanza, no más promesas vacías.
Al final, Luisa Alcalde de Morena ataca a figuras del PAN. La líder morenista resalta fallas en su nueva estrategia.

