En un mensaje dirigido a los estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que están siendo “engañados” respecto a la reforma al Poder Judicial que su gobierno impulsa en el Congreso.
El mandatario emitió estas declaraciones luego de que miles de estudiantes de la Facultad de Derecho de la UNAM se manifestaran en contra de la reforma, marchando desde su facultad hasta el edificio del Consejo de la Judicatura Federal (CJF), ubicado al sur de la Ciudad de México.
Según López Obrador, los estudiantes están recibiendo información sesgada por parte de algunos de sus maestros, quienes les aseguran que la reforma es “injusta, ilegal y antidemocrática”.
“¿Qué es lo que significa la reforma? Es limpiar esa corrupción, que nunca más vuelvan a darse esos abusos y ya acabar con la hipocresía, porque resulta que estos señores se presentan como blancas palomas y quieren darnos clase de legalidad, Estado de derecho, ¿cuál Estado de derecho? Si ellos encarnan el estado de chueco, de cohecho”, enfatizó.
López Obrador también lamentó el impacto negativo que tuvo el periodo neoliberal en la UNAM, institución que describió como su “alma mater”.
El presidente fue especialmente crítico con ciertos abogados que han pasado por la Facultad de Derecho y el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, argumentando que la reforma judicial es necesaria para eliminar la corrupción y evitar futuros abusos contra el pueblo mexicano.
La ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Lenia Batres Guadarrama, aseguró que la reforma judicial no resolverá todos los problemas de la administración de la justicia, pero sin ella no será posible avanzar en el desarrollo y la democratización del país. Estas declaraciones fueron realizadas durante un foro informativo celebrado en el auditorio “Enrique Bátiz” de Cuautitlán Izcalli, Estado de México, al que asistieron más de mil quinientos vecinos interesados en conocer los detalles de esta trascendental transformación.
Batres Guadarrama enfatizó que “si no se democratiza el Poder Judicial no va a avanzar absolutamente ninguna transformación en favor de la justicia; es una condición indispensable”. La ministra subrayó que el Poder Judicial no es propiedad de jueces, magistrados o ministros, ni siquiera de los trabajadores, sino del pueblo mexicano, quien tiene el derecho inalienable de reformar sus instituciones en todo momento.
Agradezco la invitación a este magnífico evento a @daniel_ser, presidente municipal electo de Cuautitlán Izcalli. Maravilloso, el clamor popular por la reforma judicial. pic.twitter.com/n7rgskG7Ii
El evento fue organizado por el presidente municipal electo de Cuautitlán Izcalli, Daniel Serrano Palacios, quien expresó su agradecimiento hacia Lenia Batres por su valentía al enfrentar persecuciones y hostigamientos por simplemente llevar información al pueblo. Serrano también destacó la relevancia de que una representante del pueblo ocupe un lugar tan importante en la SCJN, señalando que “es la primera vez que una de nosotras, de nosotros, del pueblo, se encuentra en esta instancia”.
Muchas gracias por tu amor a nuestro pueblo, por tu valentía y compromiso @LeniaBatres Cuautitlán Izcalli siempre será tu casa! Te abrazamos. https://t.co/W7VUe20kGn
Este jueves, la ministra Batres, conocida por algunos como “la ministra del pueblo”, participará en una mesa de análisis titulada “Sobrerrepresentación y reformas estructurales”, organizada por el Centro de Análisis de Coyuntura Económica Política y Social (CACEPS) de la Facultad de Economía de la UNAM. El objetivo es examinar críticamente dos temas de relevancia en la agenda nacional actual.
En su conferencia matutina de hoy, el presidente Andrés Manuel López Obrador reaccionó a las recientes declaraciones del embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, quien afirmó que “la elección directa de jueces representa un riesgo para el funcionamiento de la democracia de México”. En respuesta, López Obrador defendió la propuesta de reforma judicial que permitiría la elección directa de jueces y ministros de la Corte por parte del pueblo mexicano.
El presidente proyectó un fragmento de las declaraciones del embajador Salazar y subrayó que, según la Constitución mexicana, la democracia permite al pueblo soberano cambiar la forma de su gobierno en cualquier momento. López Obrador enfatizó que la esencia de la democracia radica en la participación popular, cuestionando: “¿Cómo se elige a los presidentes municipales, a los diputados locales, a los diputados federales, a los senadores y a los gobernadores, y no se van a poder elegir a los ministros de la Corte, ni a los jueces?”
Además, López Obrador manifestó su desacuerdo con la postura del embajador estadounidense, calificando sus comentarios como una intromisión en la soberanía de México. A pesar de esto, aseguró que la relación con los gobiernos de Estados Unidos y Canadá continúa, aunque expresó que es inaceptable la interferencia de estos embajadores en asuntos internos de México.
El mandatario cuestionó directamente la afirmación de Salazar sobre los riesgos para la democracia, preguntando: “¿Cómo es que se afectará o se pondrá en riesgo la democracia?” Con esto, reiteró su postura de que la reforma judicial busca ampliar la participación ciudadana y fortalecer la democracia en el país.
La Embajada de los Estados Unidos en México emitió un comunicado oficial en respuesta a la reciente controversia generada por los comentarios del embajador estadounidense, Ken Salazar. En el documento, la embajada subrayó su respaldo a la Reforma Judicial propuesta por el Gobierno de México, destacando que Estados Unidos “sigue apoyando el compromiso mexicano de fortalecer el Estado de Derecho a través de la Reforma Judicial”. Además, reiteró su máximo respeto por la soberanía del país vecino.
Estas declaraciones surgen tras los polémicos comentarios realizados por Ken Salazar, quien ha sugerido varias veces que la relación de ambos países peligra. Esta comparación fue percibida como una amenaza hacia el Gobierno mexicano, sugiriendo que la Reforma Judicial podría tener implicaciones negativas en la relación comercial entre México y Estados Unidos, en el marco del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Sin embargo, en el comunicado, la embajada estadounidense matizó la postura de Salazar, aclarando que Estados Unidos apoya el concepto de la Reforma Judicial en México, pero expresando su preocupación por la propuesta de elección popular de jueces. Según el comunicado, esta medida podría no abordar adecuadamente la corrupción judicial ni fortalecer el poder judicial del Gobierno mexicano.
Asimismo, la embajada destacó la importancia de trabajar conjuntamente como socios para lograr la integración económica de América del Norte y enfrentar los desafíos de seguridad compartidos. En este sentido, Estados Unidos reafirmó su compromiso de continuar colaborando estrechamente con México en un espíritu de igualdad y respeto mutuo, buscando alcanzar objetivos comunes sin interferir en los asuntos internos del país.
Finalmente, la embajada aprovechó la ocasión para reiterar a la Secretaría de Relaciones Exteriores de México las seguridades de su más alta consideración, subrayando la amistad y los lazos históricos que unen a ambas naciones.
En una reciente entrevista con el medio Milenio, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, hizo una alarmante comparación entre los sistemas judiciales de Irak, Afganistán y México, generando controversia tanto en el ámbito político como en la opinión pública. Según Salazar, la elección directa de jueces, una propuesta incluida en la reforma judicial mexicana, representa un riesgo significativo para la democracia en México, al tiempo que podría afectar de manera negativa la relación comercial entre ambos países.
En entrevista, el injerencista embajador olvidó, convenientemente, recordar que Estados Unidos destruyó las democracias de las mencionadas naciones… pic.twitter.com/76VKOQtGjE
Durante la entrevista, el embajador señaló que en Irak y Afganistán “la democracia no existe” debido a que supuestamente intentaron “fortalecer” sus sistemas judiciales, aunque, en realidad, condujeron a la destrucción de cualquier estructura democrática en esos países. Estas declaraciones han sido interpretadas por muchos como un intento de justificar el imperialismo estadounidense, ya que no mencionó el importante papael de las invasiones estadounidenses en la devastación de las democracias de estas naciones de Medio Oriente mediante constantes intervenciones armadas.
Ken Salazar, al comparar la reforma judicial mexicana con las situaciones en Irak y Afganistán, parece estar prediciendo una invasión a la soberanía mexicana. Utilizar este trágico ejemplo para intervenir en la reforma crucial de México, refleja una falta de autocrítica y su evidente injerencia en asuntos soberanos.
A pesar de estas declaraciones, el embajador no hizo mención alguna de las políticas migratorias que su país aplica, y que han sido motivo de críticas por su dureza y falta de humanidad para con las mismas regiones que Estados Unidos contribuyó a desestabilizar.
La mañana de este martes, el Presidente López Obrador, anunció durante la mañanera una pausa en la relación con el embajador de Estados Unidos, Ken Salazar y con la embajada de Candá, esto luego de sus desafortunados e imprudentes comentarios en contra de la Reforma al Poder Judicial, que se suman a sus constantes intentos de interferir en las políticas internas de México.
Esta firme medida que de inmediato ha sido respaldada en redes sociales, también ha dejado ver el servilismo de algunos personajes de la derecha mexicana que de inmediato han mostrado sin pena su sumisión a los Estados Unidos, como es el caso del espurio Felipe Calderón, que desde España se ha puesto de lado de la nación americana, misma que arrestó a ex secretario de seguridad.
Desde su cuenta de X, y con los comentarios restringidos, el apodado “comandante Borolas” demostró su ignorancia sobre la realidad política del bloque norteamericano, advirtiendo que podría crearse una alianza comercial solo entre Estados Unidos y Canadá, lo que sería “una ruina” para México, “un suicidio económico” a raíz de la defensa de la soberanía mexicana, que para él, se trata solo de un “capricho”.
Ojalá no le tomen la palabra. Podrían decir que con gusto paran la relación y tener un Tratado de Libre Comercio sólo entre Canadá y EUA, que muchos de sus políticos lo han querido. Sería la ruina absoluta de México. Una auténtica locura. Un suicidio económico a cuenta de un… https://t.co/I13LCwRG3U
De inmediato han reaccionado a sus comentarios y han llamado al panista “cobarde y agachón”, para de inmediato recordarle que la nación americana nos necesita tanto como nosotros a ellos, dejando ver la poca comprensión que el esposo de Margarita Zavala tiene respecto a las relaciones comerciales del bloque.
Por eso tu gobierno fue de los peores que Mexico ha tenido por qué eres un cobarde y agachón, los EEUU nos necesitan tanto como nosotros a ellos y tarde o temprano nos darán una patada en el trasero como lo hace con todos sus socios comerciales cuando a ellos ya no les conviene. https://t.co/M8zCpRShJMpic.twitter.com/c70nPX4lxa
Igualmente le han recordado al conservador que en realidad Estados Unidos no tenía interés en incluir a Canadá en el nuevo T-MEC, deseando solo un acuerdo comercial con México, sin embargo fue AMLO quien insistió en incluir a la nación del extremo norte, por lo que deberían estár agradecidos.
Un tratado EUA-Canadá no tiene ningún sentido económico en lo absoluto. Trump incluso quería que el tratado comercial fuera solo entre EU y México, pero AMLO lo convenció deincluir a Canadá. Así que aunque te choque, los canadienses tienen que AGRADECER al presidente que los… https://t.co/HDw0DesAX9
— Nacho Rodriguez (El Chapucero) (@NachoRgz) August 27, 2024
De igual manera se menciona que México es la nación de la que más dependen los otros dos países de Norteamérica , sumado a que hay otros bloques económicos a los que se podría sumar nuestro país en el extremo e irreal caso de una cancelación del T-MEC.
El petate del muerto. EEUU y Canadá rogarán para que México siga en el TMEC. El día en que corten el tratado México se une al BRICS, habrá lagrimas fachas, gringas y canadienses. ¿Cuándo vienes a México? https://t.co/JjO80BE3cT
En un hecho inusual dentro de los pasillos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), un grupo de trabajadores organizó una protesta silenciosa en rechazo a la reforma judicial impulsada recientemente. A las 10:30 horas, los manifestantes comenzaron a congregarse en la zona de elevadores del segundo piso y en los pasillos del tercer piso, donde se encuentran las oficinas de los ministros. La consigna principal que los manifestantes presentaron fue clara: “la Corte rechaza la reforma judicial”.
A pesar del derecho de los trabajadores a expresar sus opiniones, la protesta carece de fundamento sólido y parece estar motivada más por intereses individuales que por el bienestar colectivo. El Colegio de Jóvenes Estudiantes y Nuevos Profesionistas de la SCJN, que convocó la manifestación, insiste en que la Corte no son solo los once ministros, sino también todos los empleados que allí laboran. Sin embargo, esta postura parece ignorar el hecho de que la reforma judicial busca precisamente fortalecer la independencia y eficiencia del máximo tribunal del país, asegurando que sus decisiones sean tomadas con transparencia y en favor de la ciudadanía.
Entre los ministros, Lenia Batres ha demostrado ser una firme defensora de la reforma judicial, cumpliendo en todo momento con sus deberes y velando por la justicia. Batres ha sido objeto de cuestionamientos por parte de los manifestantes, quienes no han querido renunciar a los sueldos elevados que perciben durante sus protestas, .
La manifestación fue cuidadosamente planeada para evitar confrontaciones directas, no obstante, los manifestantes pegaron un señalamiento agresivo afuera de la oficina de Lenia Batres en el que la asucaban inujstamente de no servir al pueblo. Esto contrasta con la esencia de la protesta, que parece estar enmarcada más en la defensa de intereses personales que en una preocupación genuina por el futuro de la justicia en México.
Lenia Batres, como ministra de la SCJN, ha sostenido en reiteradas ocasiones que la reforma judicial es crucial para la independencia y modernización del Poder Judicial. Su postura se ha basado en la necesidad de garantizar que la Corte funcione de manera óptima y que sus decisiones reflejen un compromiso con el pueblo, no con intereses individuales o partidistas.
Mientras los trabajadores insisten en su rechazo a la reforma, es necesario recordar que la verdadera función de la Suprema Corte es servir al pueblo mexicano. La resistencia al cambio por parte de ciertos sectores solo refleja un temor a perder privilegios adquiridos, más que una preocupación legítima por el impacto de la reforma en el funcionamiento de la justicia.
En momentos críticos como este, es esencial que se respalde a líderes como Lenia Batres, quienes, con valentía y determinación, buscan hacer lo correcto por el país, aun cuando esto implique enfrentarse a la resistencia interna. La SCJN debe continuar siendo un baluarte de justicia y equidad, y la reforma judicial es un paso necesario para asegurar que siga cumpliendo con esa misión.
En una sesión maratónica de 11 horas, la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados aprobó el dictamen de la reforma al Poder Judicial de la Federación (PJF), un proyecto que busca transformar profundamente la estructura judicial de México. La propuesta, impulsada por la bancada de Morena y respaldada explícitamente por el presidente Andrés Manuel López Obrador, introduce un cambio radical: la elección popular de ministros, magistrados y jueces a partir de 2025, con el objetivo de desmantelar lo que han llamado “la aristocracia judicial”.
Elección Popular para Democratizar el Poder Judicial
El dictamen aprobado prevé un proceso extraordinario de selección en el cual los ciudadanos podrán elegir directamente a nueve ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), 15 magistrados de salas regionales, 448 magistrados de distrito, 378 jueces de distrito, y a los nuevos integrantes del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y del nuevo tribunal de disciplina. Este último órgano sustituirá al Consejo de la Judicatura Federal, que será eliminado bajo la nueva reforma.
Este modelo de elección popular promoverá una justicia más transparente y democrática, permitiendo que los jueces y magistrados sean seleccionados por el pueblo y no por intereses políticos o económicos, una práctica que ha predominado en el pasado.
Protección y Seguridad de Jueces en Casos de Alto Impacto
Uno de los puntos más destacados de la reforma es la inclusión de una figura similar a los “jueces sin rostro”, destinados a resolver casos de alta peligrosidad como delincuencia organizada, terrorismo y narcotráfico. Este mecanismo busca proteger la identidad de los jueces y garantizar su seguridad, estableciendo que, en casos de alto impacto, el órgano de administración judicial podrá tomar medidas especiales para salvaguardar la integridad de los jueces.
Morena defendió esta medida como un paso necesario para romper con los viejos esquemas de privilegios y asegurar que la justicia esté al servicio de la ciudadanía.
Controversias y Oposición de Grupos Conservadores
Las críticas a la reforma han surgido principalmente de grupos conservadores que han sido señalados por perpetuar la corrupción dentro del Poder Judicial. Estos grupos han establecido relaciones estratégicas y corruptas con los órganos judiciales para beneficiar intereses particulares. Un ejemplo reciente de estas acciones es el recurso legal admitido por la ministra Norma Piña del PAN, que ha sido visto como un intento de contraponerse al voto popular y mantener la influencia de estos grupos en la justicia mexicana.
El PRI, PAN y PRD, que todavía no entienden que la 4T gobierna para el pueblo y no para ellos, han calificado el proyecto como una “vendetta” política y han advertido sobre las complicaciones logísticas y de seguridad que implica una elección tan extensa. Argumentan que este tipo de votación masiva podría convertir la elección de jueces y magistrados en un concurso de popularidad, en lugar de centrarse en la experiencia y capacidad judicial, a pesar de que hoy en día es extremadamente difícil que más personas puedan aspirar a estos puestos sin ser cercano a alguien en el poder, debido al fuerte neportismo que se vive.
Hacia un Poder Judicial más Transparente y Democrático
La 4T argumenta que es preferible un sistema judicial dirigido por la voluntad popular que por una élite privilegiada que ha dominado históricamente la justicia en México. Para Medina y otros partidarios de la reforma, democratizar el Poder Judicial es esencial para asegurar que la justicia sea equitativa y accesible para todos los mexicanos.
En conclusión, la aprobación de esta reforma representa un paso significativo hacia la democratización del sistema judicial en México. A medida que se avecina el debate en el pleno de la Cámara de Diputados, la propuesta seguirá siendo un tema central en la agenda política del país, marcando el inicio de una posible transformación profunda en la administración de justicia.
Este martes el Presidente López Obrador dio a conocer que se pausaron las relaciones con el embajador de los Estados Unidos en México, Ken Salazar, al igual que con la representación diplomática de Canadá en nuestro país, esto luego de las declaraciones emitidas en torno a la Reforma del Poder Judicial y que solo compete a los mexicanos.
“¿Cómo le vamos a permitir al embajador, con todo respeto, cómo le vamos a permitir que él opine que está mal lo que estamos haciendo? Ahora si que no vamos a decirle: ‘abandona el país’ Eso no, pero sí le tenemos que leer la Constitución, que es como leerle la cartilla”.
AMLO agregó que la relación con los Estados Unidos sigue siendo buena, pero que es necesaria la pausa, misma que aplicará también con el departamento de Estado de la nación americana.
En el mismo sentido, el tabasqueño aclaró que las mismas medidas serán tomadas con la misión diplomática de Canadá en territorio mexicano, calificando como de “pena ajena” las declaraciones que emitieron en un claro intento de interferir en la soberanía del pueblo mexicano.
“Que casualidad que al mismo tiempo que se pronuncian en México a través de la embajada, lo hacen los canadienses que también es de pena ajena con todo respeto al gobierno de Canadá, o sea, parece estado asociado”.
Este lunes 26 de agosto, a las 11:30 horas, comenzó la dictaminación de la Reforma al Poder Judicial en la Cámara de Diputados, una propuesta histórica impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador. La reforma, presentada el pasado 5 de febrero, busca transformar profundamente el sistema judicial en México, democratizando los procesos de elección de jueces, magistrados y ministros, y recortando los exorbitantes presupuestos que actualmente manejan los órganos del Poder Judicial, los cuales han sido objeto de críticas por presuntos desvíos y caprichos.
Con un quórum de 33 legisladoras y legisladores, la Comisión de Puntos Constitucionales inició la sesión semipresencial para debatir esta trascendental reforma. La propuesta plantea modificar el artículo 95 de la Constitución para que los jueces, magistrados y ministros sean elegidos por voto popular, lo que representa un cambio significativo hacia la democratización del Poder Judicial. Esta medida responde a la necesidad de devolverle al pueblo el control sobre una institución que, según ha señalado el presidente López Obrador, ha fallado al liberar criminales y actuar en favor de intereses ajenos al bienestar de la ciudadanía.
📹 #Vídeo | Hace algunos minutos la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados dio inicio a la reunión ordinaria para discutir el proyecto de dictamen de la #ReformaAlPoderJudicial presentada por #AMLO el pasado mes de febrero. pic.twitter.com/16YLNTddTB
La reforma también propone reducir el periodo de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de 15 a 12 años y establecer elecciones populares para aproximadamente 800 cargos en 2025 y 2027. Los ministros electos permanecerán en sus cargos por periodos de ocho, 11, o 14 años, según los resultados de la votación, lo que busca asegurar una representación más cercana y responsable ante el pueblo mexicano.
Además de estos cambios, la reforma prevé la reducción de 11 a nueve ministros en la SCJN y la eliminación de las dos salas que actualmente existen en el máximo tribunal, centralizando las sesiones en un pleno que deberá ser público y transparente. También se establece la extinción de la sala regional especializada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) antes del 1 de septiembre de 2025, asegurando que sus magistraturas no se renovarán en la próxima elección extraordinaria.
A pesar de las críticas y el paro indefinido de labores iniciado por algunos trabajadores del Poder Judicial desde el 19 de agosto, la reforma avanza con el objetivo de corregir las fallas del sistema judicial actual. Al cambiar el reparto de presupuesto no solo se busca erradicar los excesos y desvíos de recursos, sino también garantizar que la justicia en México se imparta con mayor transparencia y al servicio de la ciudadanía, no de intereses particulares.
Esta reforma marca un paso crucial hacia un sistema judicial más justo, democrático y comprometido con el pueblo mexicano, alineado con los principios de austeridad y eficiencia que han caracterizado la administración del presidente López Obrador. La transformación del Poder Judicial es un imperativo para devolver la confianza en una institución que, hasta ahora, ha estado demasiado lejos de las necesidades reales de la población.