Edson Andrade, el joven que impulsó las marchas juveniles como voz independiente, firmó en febrero de 2025 un contrato con Acción Nacional por 2.1 millones de pesos. Cobra 175 mil pesos mensuales desde entonces.
Edson Andrade de 24 años se presentó siempre como apartidista.
En redes y entrevistas repetía: “No militamos en ningún partido, solo defendemos a México”.
Miles de jóvenes le creyeron y salieron a marchar con él.
La líder nacional de Morena, Luisa Alcalde, reveló el contrato del joven ‘apartidista’, en el que se pueden ver a detalle el tipo de servicios y la modalidad de pagos.
En febrero de este año, el PAN lo contrató formalmente.
El contrato, dividido en 12 pagos de 175 577.50 pesos, sigue vigente.
Cada mes, el partido transfiere esa cantidad a la cuenta del mismo joven que decía no recibir órdenes de nadie.
El dato salió a la luz pocos días después de que Jorge Romero Herrera, coordinador de los diputados del PAN, declarara que “a la oposición solo le falta la violencia para completar el cuadro”.
Edson no ha borrado sus publicaciones donde niega vínculos partidistas.
Sus seguidores más cercanos expresan desconcierto: algunos se sienten engañados; otros prefieren esperar a que él hable.
Acción Nacional tampoco ha dado declaraciones oficiales hasta el momento.
El silencio de ambos lados alimenta las preguntas: ¿quién financia realmente las marchas de la Generación Z? ¿Sigue Edson creyendo en lo que dice, o solo cumple un trabajo bien pagado?
Por ahora, los recibos mensuales llegan puntuales. Y las dudas también.
Damián Zepeda, senador y exdirigente del PAN, prepara su regreso para buscar nuevamente la presidencia del partido, pese a venir del mismo grupo que provocó fracturas internas durante la era de Ricardo Anaya.
Damián Zepeda Vidales, nacido en Hermosillo Sonora en 1978, es uno de esos políticos hechos para el PAN: familia acomodada, escuelas privadas, maestrías en Estados Unidos y una carrera política que avanzó siempre por las puertas correctas. Muy “meritocrático” en el discurso, pero en la práctica un claro beneficiario del sistema de privilegios del PAN.
Preparación de Damián Zepeda:
Licenciatura en Derecho por la Universidad de Sonora (mención honorífica)
Diplomado en Marketing Político por la Universidad del Noroeste (2002)
Diplomado en Políticas Públicas por la Universidad de Harvard (2005)
Maestría en Administración de Negocios (MBA) por la Universidad Thunderbird de Arizona y el Tecnológico de Monterrey (2006)
Cargos Públicos:
Secretario Técnico de la Comisión de Hacienda y Obra Pública del Ayuntamiento de Hermosillo (2001–2003)
Jefe de Departamento en la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (2003–2004)
Director de la Unidad de Administración Interna y Vinculación de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (2004–2006)
Visitador Regional de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca en Mazatlán (2006–2007)
Coordinador de Seguimiento de Programas Estratégicos de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (2007–2009)
Diputado Local en la LIX Legislatura del Congreso de Sonora (2009–2012)
Diputado Federal en la LXII Legislatura (2012–2015)
Candidato a la Presidencia Municipal de Hermosillo (2015)
Secretario General del Partido Acción Nacional (2015–2017)
Presidente Nacional del PAN (2017–2018)
Senador de la República (2018–actualidad)
Aunque presume haber empezado desde abajo, la realidad es que su trayectoria fue construida desde el círculo de confianza del panismo tradicional, desde sus primeros cargos como secretario técnico en Hermosillo hasta su paso por la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca durante los gobiernos de Fox y Calderón. Su historia está marcada por la misma estructura de favores, apadrinamientos y conexiones que él evita mencionar.
Lo que sí es imposible ocultar es que Zepeda formó parte del grupo más polémico del PAN: el círculo de Ricardo Anaya. No solo fue su aliado, fue su brazo derecho ambos fueron responsables del periodo en el que el PAN se convirtió en un partido dominado por una sola corriente que expulsó, marginó o silenció a liderazgos consolidados. Sus decisiones internas provocaron rupturas fuertes, acusaciones de imposiciones y denuncias de que el partido se había convertido en “una franquicia personal”.
Un episodio oscuro: el financiamiento raro en la campaña de Anaya
Aunque Zepeda no fue señalado directamente, su cercanía absoluta con Anaya lo dejó manchado por el escándalo del presunto lavado de dinero que golpeó la campaña presidencial del aspirante presidencial en 2018. En ese momento, varios panistas y analistas criticaron que Zepeda defendiera ciegamente a Anaya, incluso cuando la Fiscalía investigaba el caso de las triangulaciones con la famosa nave industrial vendida en Querétaro.
Para muchos dentro del partido, ese fue el punto de quiebre: Zepeda aparecía no como un dirigente imparcial, sino como un escudero político al servicio de un proyecto en caída libre.
El dirigente que dice querer “cambiar al PAN”, pero formó parte del problema
Hoy, desde el Senado, Zepeda exige que el PAN “recupere el rumbo”, aunque él mismo estuvo en el grupo que, según muchos panistas, lo descarriló. Habla de un partido sin identidad, pero durante su periodo como dirigente tampoco logró conectar con la gente común ni construir un proyecto incluyente.
De hecho, su paso por el CEN fue tan corto que para muchos solo fue un movimiento estratégico para mantener el control interno mientras Anaya se dedicaba a su campaña presidencial. Nada nuevo, nada fresco, puro reciclaje político.
Ahora quiere regresar… para arreglar lo que él mismo ayudó a destruir
Su anuncio reciente de que buscará nuevamente la presidencia del PAN parece más un intento por recuperar espacio que un verdadero proyecto de renovación. La disputa interna que viene entre él y Jorge Romero, operador de Marko Cortés, no es una batalla por principios, sino entre dos grupos que llevan años turnándose el poder dentro del partido.
Zepeda se presenta como el salvador que dará “una sacudida” al PAN, pero su discurso suena a copia de lo que ha dicho cada dirigente panista desde hace una década. Es difícil vender cambio cuando llevas 20 años viviendo de lo mismo.
Los Reporteros MX.- Damián Zepeda ha navegado con la bandera de ser una voz crítica dentro del PAN, llamando a la renovación del partido desde hace años, frente a las derrotas electorales que sufrieron sus filas entre 2018 y 2024.
Pero lejos de esa imagen de hombre sensato que “sabe lo que quiere el partido”, se encuentra un político que prefiere ocultar sus ingresos, faltando a la ley y al compromiso que asumió como servidor público. Y por si fuera poco, ganando casi tanto como la presidenta de la República ¡Como asesor del Senado!
Según una investigación realizada por Los Reporteros MX, Zepeda ocultó varias empresas de su declaración patrimonial: tanto una que está a su nombre como las de su pareja, Ivonne Robinson Bours González, que dicho sea de paso pertenece a una de las familias más acaudaladas de Sonora.
En su declaración patrimonial 2025, Damián Zepeda asegura no tener ninguna relación con empresas o participaciones en instituciones más allá de Acción Nacional. Esto sigue el patrón de opacidad de otros dos cabecillas del PAN: Ricardo Anaya y Marko Cortés, que ocultaron sus negocios desarrollados en sus estados de origen, Querétaro y Michoacán, como así lo reveló Los Reporteros MX en investigaciones anteriores.
En el caso de Zepeda, tiene acciones en la empresa TGI GRUPO DE INVERSION, S.A. DE C.V., con sede en Hermosillo, Sonora. Este negocio data de 2014 y según su página de internet, la organización es de carácter financiero:
“Consolidarse, crecer y posicionarse como organización líder y ser uno de los mejores grupos inversionistas en México en el rubro empresarial, a través de un crecimiento constante, sostenible y una gestión eficiente que garantice nuestra rentabilidad y la satisfacción de nuestros miembros”.
Esta empresa sigue teniendo actividades y movimientos legales hasta 2025. En uno de los documentos disponibles en el Registro Público de Comercio, aparece el nombre de Zepeda, lo que confirma su participación activa en el negocio.
Este documento revela que la empresa recibe ganancias millonarias, las cuales, por supuesto, no están en la declaración patrimonial del panista. Esta empresa tiene aportaciones que están valuadas en 5 millones 249 mil pesos y aportaciones pendientes por un millón 730 mil pesos.
Según otro documento de asamblea, Zepeda Vidales tiene una participación accionaria de 28 mil pesos de capital fijo y 428 mil 500 pesos de capital variable, es decir, 456 mil 500 pesos que no están siendo declarados (como mínimo).
Pese a esto, el legislador sólo declaró el pago por honorarios recibido como asesor del Senado de la República por 2 millones 182 mil 398 pesos al año, es decir, 181,866.5 pesos al mes. Por sólo dar un ejemplo, la presidenta Claudia Sheinbaum gana 191 mil pesos mensuales.
En cuanto a los bienes de su esposa, también ha guardado silencio. Ivonne Robinson Bours González es dueña de dos empresas en Sonora, Navojoa:
🔴 Agrícola RBG S.A. de C.V. 🔴 Avícola El Ciclón S.A. de C.V.
Agrícola RBG tiene como accionistas activos tanto a Ivonne Robinson Bours como a varios miembros de su familia. Esta empresa tiene un capital variable de 6 millones 128 mil pesos, según un documento mercantil. Su última actividad legal fue registrada en el año 2012.
Por su parte Avícola El Ciclón fue fundada en 1993 y su último rastro legal apareció en 2016.
Los Reporteros buscó al área de Comunicación de la bancada panista del Senado para hablar de los señalamientos de este reportaje, sin hasta ahora obtener respuesta.
Más allá de la falta de transparencia, Damián Zepeda continúa con sus actividades políticas, formando parte del relanzamiento del PAN, junto con rostros como el de Anaya, Cortés y Kenia López Rabadán, que de nuevos no tienen nada. Pese a compartir la opacidad con varios de sus compañeros de partido, el mayo de este año Zepeda afirmó que “por el bien del país, nos merecemos transparencia”, lanzando una crítica al gobierno oficialista. ¿Habrá olvidado que primero se tiene que empezar por los problemas de casa? Parece que no. Un miembro más de la oposición con la incongruencia como bandera partidista.
La última marcha en el Zócalo evidenció cómo la derecha convierte la protesta en agresión directa, mostrando que su estrategia política recurre al miedo, la intimidación y la violencia física.
La marcha de la derecha en el Zócalo no fue un simple despliegue de inconformidad política: fue una demostración de violencia organizada. Lo que inició con banderines blancos y símbolos religiosos terminó en ataques a las vallas de Palacio Nacional, lanzamiento de adoquines, petardos y bombas de humo, y acoso a la Catedral Metropolitana. La “pacificación” quedó solo en el discurso; la práctica de la derecha es confrontación y agresión.
Históricamente, la derecha mexicana ha normalizado la violencia como herramienta política. Desde Felipe Calderón y la llamada “Guerra contra el Narco”, que sirvió para consolidar alianzas oscuras con actores del crimen organizado, hasta declaraciones recientes de líderes como Jorge Romero, que afirman que lo que le falta a la oposición es violencia, se observa un patrón constante: usar la fuerza y la intimidación para imponerse.
La Derecha Mexicana en su mejor expresión: hipócrita y violeta.
Felipe Calderon, fiel representante de la Derecha Mexicana, desató la “Guerra contra el Narco” para disfrazar su alianza con el narco por medio de García Luna.
En el Zócalo, los adultos mayores guiaron a la generación Z, que quedó rebasada en número y estrategia, demostrando que la violencia no es casual ni juvenil, sino instruida y tolerada por los mayores dirigentes de la oposición. Los ataques a las vallas, la burla hacia la Presidenta y la celebración de enfrentamientos directos con la policía evidencian que la derecha no busca el diálogo, sino la coerción y el miedo como método político.
Incluso los símbolos y consignas usados —banderas nacionales, imágenes religiosas y referencias históricas— se combinaron con actos de agresión, mostrando que el odio y la intimidación son parte de su identidad. Esta marcha confirma que, en México, cuando la derecha se moviliza, la violencia deja de ser un incidente aislado y se convierte en la estrategia principal para disputar el poder.
Encapuchados del bloque negro protagonizan enfrentamiento con granaderos y reciben apoyo simbólico de manifestantes afines al PRI; la Generación Z queda opacada por la violencia.
La supuesta marcha de la Generación Z se tornó violenta cuando encapuchados del bloque negro derribaron las vallas metálicas que protegen Palacio Nacional, generando un enfrentamiento directo con policías que usaron extintores y escudos para contenerlos.
Los manifestantes llegaron a la Plaza de la Constitución alrededor del mediodía, y desde su arribo se les vio golpeando y escalando las vallas. Para las 13:15 horas, el bloque negro logró abrir un hueco en el cerco, provocando un choque intenso con la policía.
#ÚltimaHora | El bloque negro tumba las vallas que protegían Palacio Nacional y la policía resguarda el inmueble, a pesar de que son agredidos con piedras. pic.twitter.com/uLFZMzf8OE
En un giro nada sopreviso, manifestantes de la derecha fueron vistos bendiciendo a integrantes del bloque negro, un acto que dejó en evidencia la coordinación y el respaldo simbólico que algunos sectores políticos otorgaron a los encapuchados. Esta escena demuestra que la violencia estuvo organizada y que el bloque negro se convirtió en el núcleo más activo de la protesta.
CHULADA: La "Generación Z" protesta por la paz y porque se acabe la violencia al mismo tiempo que las Señoras de las Lomas rocían con agua bendita a los porros y violentadores del Bloque Negro. pic.twitter.com/3Qlv4KGHlj
Usuarios en redes sociales coinciden en que, pese a la narrativa de protesta ciudadana, la acción del bloque negro muestra una intención política agresiva, respaldada indirectamente por simpatizantes del PRIAN, quienes buscan legitimar la acción directa de los radicales.
Tras varios minutos de enfrentamiento, los policías lograron dispersar al grupo, pero las imágenes del momento se viralizaron rápidamente en redes sociales, mostrando la magnitud de la violencia y la coordinación detrás de la marcha.
La diputada por el PAN Margarita Zavala se vuelve tendencia tras cuestionar cómo votar en una discusión sobre presupuesto, lo que ha generado críticas en redes sociales.
Margarita Zavala, diputada por el PAN, fue grabada en un video donde confunde cómo votar durante una discusión sobre el presupuesto y la deuda pública. Este episodio reveló, una vez más, su desconexión con su labor legislativa.
En el video, Zavala se escucha titubeante mientras pregunta a sus compañeros cómo debe votar. Finalmente, confirma que su voto es en contra, pero su confusión generó críticas entre los internautas. Muchos la han comparado con el comediante Cantinflas, utilizando la etiqueta #margarinflas.
La diputada morenista Vianey García,también criticó a Zavala, pues recordó que muchos de los problemas de violencia actuales iniciaron en 2011 durante el gobierno de su esposo, Felipe Calderón. García acusó al PAN de ser cínico por señalar la violencia que ellos mismos contribuyeron a generar.
Este incidente ha vuelto a encender el debate sobre la necesidad de reformar el sistema político y eliminar cargos plurinominales en México. Los ciudadanos exigen legisladores comprometidos y bien informados que realmente representen sus intereses.
Gabriel y Rodolfo Padilla, hijos del exalcalde priísta de León, Guanajuato, Rodolfo Padilla, son dos de los socios mayoritarios de Grupo Vizion, consorcio propietario de Waldo’s México.
El 1 de noviembre, en una de estas tiendas, ubicada en el Centro de Hermosillo, Sonora, murieron 24 personas y, ahora mismo, tres más continúan hospitalizadas debido a una fuerte explosión y posterior incendio que conmocionó y enlutó al país entero.
¿Pero quiénes son los hermanos Padilla? Gabriel y Rodolfo Padilla Cordero tienen linaje priísta y, de hecho, son hijos del fallecido exalcalde priísta de León, Rodolfo “Fito” Padilla Padilla.
Pero los Padilla Cordero, tras la muerte de su padre, no se contentaron con provenir de una estirpe de políticos emanados del PRI.
Gabriel Padilla Cordero, por ejemplo, es un próspero y polémico empresario que ha incursionado en diferentes rubros como la construcción y los bienes raíces y, quizá por lo mismo, ha sabido vincularse estrechamente a distintos políticos emanados de las filas del PRI, pero también del PAN.
De hecho, uno de los personajes más cercanos a Gabriel Padilla es el panista Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, exgobernador de Guanajuato.
La relación con el exmandatario blanquiazul y el hijo del priísta “Fito” Padilla fue fructífera y polémica.
Pero, lamentablemente, los intereses económicos y la ambición, casi siempre, vienen tomados de la mano.
Y, en 2017, esa lucrativa relación se vio ensombrecida debido a un escándalo de despojo: Gabriel Padilla fue acusado de apropiarse ilegalmente, con ayuda de la administración de Sinhue Rodríguez, de un terreno de 2 mil 520 metros cuadrados que pertenecía al patio de juegos del jardín de niños Juan Aldama, para construir una alberca privada.
Años después y tras exposición periodística, el empresario se vio obligado a regresar el predio al municipio, aunque las responsabilidades penales de los funcionarios involucrados, hasta el día de hoy, no han sido esclarecidas.
Ahora se sabe que Gabriel Padilla y su hermano, Rodolfo Padilla, son dos de los socios mayoritarios de Grupo Vizion, propietarios de Waldo’s México.
La historia de Waldo’s Dollar Mart en México está marcada por la opacidad legal y el tráfico de influencias.
En 2005, una serie de denuncias periodísticas relacionaron a la cadena con la familia del expresidente panista Vicente Fox y su esposa, Martha Sahagún.
Diferentes fuentes y testimonios señalaron a Manuel Bribiesca Sahagún, hijo de Martha Sahagún, como el presunto dueño real de Waldo’s.
Y no solo eso.
Bribiesca habría utilizado su influencia durante el sexenio de Fox para obtener permisos de importación y licencias. Tras el escándalo, una carta firmada por Mark Davis, Rafael Garza, Robin French y los hermanos Rodolfo y Gabriel Padilla, buscó desvincular a la familia presidencial de la propiedad.
Infelizmente, los Padilla saben que los nexos políticos no solo facilitan negocios (como el tráfico de influencias por permisos o la apropiación de bienes públicos), sino que también permiten la operación en la ilegalidad con un bajo riesgo de sanción.
Lamentablemente, la tragedia ocurrida en el Waldo’s de Hermosillo no es la primera. Ni la única. Entre 2007 y 2025, la cadena Waldo’s ha registrado al menos 12 incendios. El más reciente y devastador incidente ocurrió en la sucursal que, de acuerdo con la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJES), carecía de autorización de Protección Civil desde 2021, no contaba con un plan interno ni cumplía con revisiones de mantenimiento eléctrico y sistemas de prevención contra incendios.
Los testimonios de exempleados sobre advertencias internas de riesgo de incendio y la subsiguiente inspección que reveló deficiencias de seguridad en otras 68 sucursales de Sonora, revelan que la tragedia fue una consecuencia previsible de la negligencia corporativa.
Alfonso Durazo, gobernador de Sonora, solicitó ayer al rector de la UNAM, a los directores del Instituto Politécnico Nacional y al Colegio Mexicano de Profesionales en Gestión de Riesgos y Protección Civil A.C., “su colaboración para que equipos multidisciplinarios coadyuven en la realización de los peritajes”.
El exlíder del PAN y actual senador de la República, Marko Cortés, fue exhibido por una investigación compartida por el sitio FrojiMX en la que se menciona una compra de un departamento por 565 mil euros, cuestionando sus ingresos proyectados.
El exdirigente del Partido Acción Nacional (PAN), Marko Cortés, ha aumentado notablemente su patrimonio en los últimos años. Recientemente, adquirió un departamento en Europa valorado en 565 mil euros, equivalente a más de 12 millones de pesos. Esta compra se realizó en efectivo, lo que plantea interrogantes sobre sus recursos financieros.
Cortés presidió el PAN durante seis años, periodo en el que el partido sufrió varias derrotas electorales. A pesar de estos resultados negativos, su patrimonio pasó de 8.3 millones de pesos a 19.1 millones, más del doble en solo unos años. En su declaración patrimonial como líder del PAN, ya había declarado poseer nueve propiedades.
La compra del departamento europeo ocurrió poco después de asumir nuevamente el cargo de senador en 2025. Este nuevo inmueble se convierte en el más caro en su inventario. En su trayectoria política, Cortés también ha realizado varias adquisiciones en tiempos cortos. Entre octubre y noviembre de 2025, compró un terreno y dos departamentos que suman más de un millón de pesos.
Las recientes adquisiciones generan preocupaciones sobre la coherencia entre sus ingresos y patrimonio. Según sus declaraciones, su salario como líder del PAN estuvo entre 107 mil y 109 mil pesos mensuales. Como senador, su sueldo mensual actual es de 131 mil 874 pesos.
Mientras dirige el PAN, Cortés no hizo públicos sus ingresos privados ni su declaración patrimonial. Más aún, en su actual declaración como senador, no reportó sus ingresos privados ni su participación en al menos cinco empresas que se sospecha son de su propiedad.
El contraste entre su aumento patrimonial y sus sueldos genera dudas sobre la procedencia de sus recursos. La política y la transparencia financiera se enfrentan nuevamente a las críticas en este caso. Marko Cortés sigue siendo un personaje controvertido en el panorama político mexicano, y la atención sobre sus finanzas está lejos de desaparecer.
La Presidenta alerta sobre convocatorias en redes sociales que podrían no ser auténticas y llama a verificar la información antes de difundirla.
La presidenta Claudia Sheinbaum señaló este miércoles que la convocatoria a la marcha del próximo 15 de noviembre hacia el Zócalo de la Ciudad de México está promovida principalmente por cuentas de Inteligencia Artificial, especialmente en plataformas como TikTok, y que muchas carecen de identidad real.
Durante la conferencia matutina, Sheinbaum afirmó: “Llama la atención que esta movilización que aparece en las redes está llena de Inteligencia Artificial por cuentas que no tienen identidad”. Además, destacó la participación de militantes del PRI, de otros partidos y de cuentas extranjeras en la difusión de la marcha.
La mandataria hizo un llamado a los usuarios de redes sociales a cuestionar la procedencia de las imágenes y la veracidad de las convocatorias digitales: “Es muy importante el derecho a la información y por eso hay que indagar al ver una imagen”, indicó.
La polémica surge tras un video de convocatoria realizado con IA, donde aparece la bandera de los Sombreros de Paja, del anime One Piece, símbolo adoptado por jóvenes de la Generación Z en protestas internacionales en Indonesia, Nepal, Francia y Filipinas, en demandas contra corrupción y abuso de poder.
Sheinbaum subrayó que, aunque respeta el derecho a manifestarse, es fundamental verificar la autenticidad de las movilizaciones y no dejarse guiar por contenidos creados artificialmente que pueden manipular la percepción pública.
Jorge Romero y su clan mantienen el control del padrón panista mientras las alianzas y traiciones marcan la historia del partido blanquiazul.
El Partido Acción Nacional (PAN) hoy parece más un club de negocios y traiciones que un partido político. Al frente, Jorge Romero, líder de las juventudes panistas en la Ciudad de México entre 2001 y 2003, ha consolidado el control del partido junto a su camarilla, conocida como Los Padroneros, por manejar los padrones en las 32 entidades del país.
Romero y su grupo —integrado por figuras como Mariana Gómez del Campo, Ricardo Anaya, Christian Von Roehrich y Santiago Taboada— comenzaron su ascenso bajo el sobrenombre Los Ocean, inspirado en sus reuniones en la cantina del mismo nombre en San Ángel. Desde ahí, tejieron alianzas políticas y económicas, sumando influencia hasta ocupar la dirigencia nacional del PAN.
El legado panista de acuerdos oscuros se remonta a Gustavo Madero, exdirigente, cuando los negocios internos se potenciaron, dando paso a traiciones, desplazamientos y control absoluto sobre candidaturas y nóminas locales. Incluso exmandatarios como Felipe Calderón han denunciado la colusión de líderes panistas con intereses privados y alianzas cuestionables con el PRI, dejando al partido en un constante ciclo de malos resultados electorales.
El caso más sonado de corrupción interna fue el llamado Cártel Inmobiliario, donde se destaparon sobornos y empresas fantasma en la alcaldía Benito Juárez, involucrando a funcionarios y exfuncionarios como Christian Von Roehrich. A pesar de los escándalos, Romero ha mantenido su posición y planea un relanzamiento del partido, prometiendo cambio, aunque muchos líderes ven las prácticas de siempre: acuerdos económicos, tráfico de influencias y lealtades dudosas.
Hoy, mientras el PAN presume “renovación”, su historia reciente recuerda que la política blanquiazul es un tablero de negocios y traiciones, y que los padroneros siguen siendo los amos del juego, burlándose de cualquier intento de reforma real.
Con información de Elia Castillo Jiménez para El País