El enfrentamiento entre policías y el Comando Vermelho dejó 56 civiles y 4 agentes muertos, en la operación más letal registrada en la historia de Río de Janeiro.
Una operación antidrogas en las favelas de Río de Janeiro terminó en tragedia. Al menos 60 personas murieron y 81 resultaron heridas durante un despliegue masivo de 2 mil 500 policías contra el Comando Vermelho (CV), una de las organizaciones criminales más poderosas de Brasil.
De acuerdo con la Policía Civil, el operativo comenzó la madrugada de este martes en los complejos de Penha y Alemão, zonas controladas por el narcotráfico. Los enfrentamientos se prolongaron por horas, lo que convirtió a la jornada en una de las más sangrientas de la historia reciente del país.
Según el reporte oficial, 56 de las víctimas son civiles y 4 policías, cifra que marca la operación más letal jamás registrada en Río de Janeiro. En tanto, 81 personas fueron detenidas e incautaron 50 armas de fuego, entre ellas 42 fusiles de asalto utilizados por los delincuentes.
El gobernador del estado de Río, Cláudio Castro, calificó el operativo como “la mayor acción contra el Comando Vermelho”, grupo que junto con el Primer Comando de la Capital (PCC) domina gran parte del tráfico de drogas y armas en Brasil.
Castro informó que la operación aún continúa, por lo que el número de víctimas podría seguir aumentando. Además, aseguró que los criminales utilizaron drones artillados para atacar a los policías, lo que evidencia el poder de fuego del grupo criminal.
La magnitud del enfrentamiento ha reavivado el debate sobre el uso excesivo de la fuerza policial en las favelas y la falta de estrategias de seguridad integrales en Brasil, donde los operativos de alto impacto suelen dejar un saldo devastador entre la población civil.
Es el undécimo operativo de la administración Trump contra embarcaciones presuntamente vinculadas al narcotráfico, con un saldo cercano a 60 muertos.
El Ejército de Estados Unidos reportó este martes que 14 personas murieron tras ataques a cuatro embarcaciones que vinculó con el narcotráfico en aguas internacionales del Pacífico Oriental, frente a Colombia. Los ataques fueron ordenados por el presidente Donald Trump, confirmó el secretario de Guerra, Pete Hegseth.
Hegseth detalló que ocho personas murieron en la primera embarcación, cuatro en la segunda y tres en la tercera, mientras que un único sobreviviente fue rescatado con apoyo de autoridades mexicanas de búsqueda y rescate. El funcionario aseguró que ningún soldado estadounidense resultó herido.
Yesterday, at the direction of President Trump, the Department of War carried out three lethal kinetic strikes on four vessels operated by Designated Terrorist Organizations (DTO) trafficking narcotics in the Eastern Pacific.
De acuerdo al Pentágono, las embarcaciones eran operadas por “organizaciones terroristas designadas” dedicadas al tráfico de drogas, que “han matado a más estadounidenses que Al-Qaeda”, y por ello fueron tratadas con operaciones letales. Los ataques se realizaron con plena intención de minimizar riesgos para las fuerzas estadounidenses.
Este episodio marca el undécimo operativo contra embarcaciones ligadas al narcotráfico desde que comenzó la administración Trump, primero en el Caribe y ahora en el Pacífico, con un saldo acumulado cercano a 60 personas fallecidas. La operación refleja la creciente presencia militar estadounidense en la región, que incluye portaaviones, destructores, submarinos y aviones de combate.
El ataque aumenta la tensión con Colombia y Venezuela, cuyos gobiernos han sido señalados por Trump de permitir el narcotráfico. El Pentágono afirma que sus fuerzas cuentan con inteligencia precisa sobre las rutas de tránsito de drogas, y que todas las operaciones se realizan en aguas internacionales para evitar conflictos directos con países vecinos.
El fin de semana pasado, las Fuerzas Armadas de México llevaron a cabo operativos coordinados en diferentes estados. Los esfuerzos resultaron en detenciones, aseguramientos de drogas y armas, y la desarticulación de peligrosas redes criminales. La estrategia busca proteger a las comunidades y fortalecer la seguridad en todo México.
En un esfuerzo conjunto, las Fuerzas Armadas mexicanas lograron importantes avances en la lucha contra la delincuencia en varias regiones del país durante los días 24, 25 y 26 de octubre. Los operativos demostraron la coordinación y compromiso del Estado para mantener la paz y la seguridad de la población.
En Chiapas, en Amatenango de la Frontera, la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano arrestaron a cinco personas, incluyendo a cuatro extranjeros. Durante la acción, aseguraron armas largas, una arma corta, varios cargadores y chalecos tácticos. La operación buscaba desmantelar grupos armados y prevenir la violencia en la zona.
En Chihuahua, en Ciudad Juárez, las fuerzas combinadas detuvieron a una mujer que llevaba 6.6 kilos de fentanilo y 5.27 kilos de metanfetamina. La droga, valuada en más de 50 millones de pesos, representa una amenaza significativa para la salud y seguridad de la comunidad.
En el Estado de México, en Tepotzotlán, la Marina, la Guardia Nacional y otras instituciones capturaron a un hombre con orden de extradición a Estados Unidos. La operación también incluyó el aseguramiento de 322 vehículos, 51 pozos y varias tomas clandestinas de agua, con el fin de frenar actividades ilícitas y delitos relacionados con recursos.
Jalisco vivió una jornada intensa en Ojuelos y Lagos de Moreno. En estos municipios, las fuerzas de seguridad incautaron armas largas, cargadores, municiones, y vehículos robados. Además, en Lagos de Moreno, cinco personas fueron arrestadas en una operación que también dejó prendas tácticas y drogas decomisadas.
En Michoacán, en Buenavista, Tangamandapio y Puruándiro, la policía logró la captura de varias personas que portaban armas largas, cargadores, municiones, chalecos y vehículos con reporte de robo. La operación en Puruándiro resultó en la incautación de casi dos kilos de metanfetamina, valorada en más de medio millón de pesos.
Nayarit, en Huajicori, participó en la lucha contra el tráfico de armas y drogas, al detener a cuatro personas que portaban armas largas, cargadores y equipo táctico. La acción buscaba reducir la violencia y el poder de las organizaciones criminales en la región.
En Sinaloa, en Culiacán y sus alrededores, las fuerzas lograron detener a varias personas y confiscar armamento pesado, incluyendo ametralladoras, lanzagranadas y vehículos con reporte de robo. Además, en la sindicatura Jesús María, una persona fue liberada tras un operativo que involucró a diferentes instituciones. En Loma Grande y Escuinapa, también se aseguraron armas y municiones, además de localizar armas ocultas y vehículos robados.
En Sonora, en San Luis Río Colorado, una inspección a un tráiler permitió decomisar más de 1,1 toneladas de metanfetamina, además de fentanilo y heroína. La droga, valorada en más de 340 millones de pesos, representa uno de los golpes más fuertes contra las organizaciones que trafican drogas en la región.
Por último, en Tabasco y Tamaulipas, las fuerzas arrestaron a varias personas vinculadas con delitos de tráfico de armas, drogas y lavado de dinero. En Villahermosa, se aseguraron 300 kilos de marihuana, mientras que en Matamoros, se confiscaron armas y dinero en efectivo durante una operación contra el crimen organizado.
Estos operativos reflejan el compromiso del Gobierno mexicano para proteger a la ciudadanía. La estrategia continúa enfocada en desmantelar redes criminales, mantener la paz y fortalecer la confianza en las instituciones de seguridad. La lucha contra el delito sigue siendo una prioridad para garantizar un México más seguro para todos.
Investigaciones de México y EUA detectaron firmas que facilitan precursores para drogas sintéticas usando negocios legales como fachada.
Autoridades de alto nivel de México y Estados Unidos han identificado a varias empresas del sector químico y agroindustrial en territorio mexicano como sospechosas de tener vínculos con grupos del crimen organizado para adquirir, importar y distribuir precursores químicos empleados en la fabricación de drogas sintéticas.
Fuentes de seguridad, bajo anonimato, señalaron que cárteles como Sinaloa y Jalisco Nueva Generación han establecido relaciones con estas compañías para obtener los componentes necesarios, camuflando las operaciones ilegales dentro de actividades agroindustriales legítimas.
Hasta ahora se han localizado al menos cuatro firmas involucradas: Agrícola Santa Fernanda S de RL de CV, Agropecuaria Alfa y Omega S de RL de CV, Grupo Pochteca SAB de CV y Globe Chemicals SA de CV. De ellas, Grupo Pochteca ya es investigado por posibles vínculos directos con el crimen organizado; las demás están bajo revisión para determinar si ameritan investigación formal.
Las investigaciones revelan que estas empresas facilitan la adquisición, transporte, almacenamiento y desvío de químicos que, aunque inocuos en la industria de perfumería, alimentos o farmacéutica, son reutilizados para producir drogas sintéticas. El modelo operativo permite a los cárteles ocultar actividades ilícitas dentro del comercio legal.
Como parte de los acuerdos de seguridad entre Palacio Nacional y la Casa Blanca, éstas buscan no solo desarticular a los cárteles, sino sancionar a las empresas que colaboran con ellos. El Departamento del Tesoro de EUA ya aplicó sanciones a propietarios y directivos de compañías señaladas por mantener estas alianzas.
Grupo Pochteca, con 56 sucursales, tiene presencia en México, EUA, Centro y Sudamérica; Agrícola Santa Fernanda, radicada en Sinaloa, aparece como intermediaria de fertilizantes y pesticidas; Agropecuaria Alfa y Omega opera en Michoacán y Venezuela; mientras Globe Chemicals tiene filiales en Europa, Asia y América, consolidando un esquema de alcance internacional.
Con información de Emir Olivares y Gustavo Castillo para La Jornada
Estados Unidos envió el portaaviones USS Gerald Ford frente a Sudamérica para reforzar operaciones contra el narcotráfico y las organizaciones criminales transnacionales en la región.
Este viernes, Estados Unidos anunció una escalada militar en la región de Sudamérica. El Pentágono desplegó el portaaviones USS Gerald Ford, el más grande y avanzado de su flota. Acompañado de tres destructores, el buque navega en aguas frente a Sudamérica, en una operación que busca fortalecer la lucha contra el narcotráfico y las organizaciones criminales transnacionales.
El secretario de Guerra, Pete Hegseth, explicó que la misión responde a la orden del presidente de desmantelar las redes criminales y el narcoterrorismo. El objetivo principal es aumentar la capacidad de monitoreo y acción en el área del Comando Sur de Estados Unidos, conocido como USSOUTHCOM. La presencia militar busca detectar, reducir y desmantelar a los actores que amenazan la seguridad tanto regional como estadounidense.
Este despliegue, que implica un movimiento de gran envergadura, llega en un momento de tensión creciente en la región. Washington ha intensificado sus operaciones militares en el Caribe y ha aumentado la presión sobre Venezuela, gobernada por Nicolás Maduro. En los últimos días, el ejército estadounidense realizó su décimo ataque contra barcos sospechosos de transportar drogas en aguas internacionales del Caribe. Se atribuye a la pandilla venezolana Tren de Aragua, responsable de dejar seis muertos en un barco que supuestamente transportaba drogas.
Hegseth también informó que los ataques contra estas embarcaciones se han multiplicado en las últimas semanas. Desde septiembre, se han registrado al menos 43 víctimas, con al menos tres ataques en el Océano Pacífico oriental. Washington busca ampliar su control en las rutas donde se trafica cocaína, que proviene de los principales productores mundiales.
La decisión de enviar el portaaviones refleja la gravedad de la situación. Estados Unidos busca fortalecer su presencia en una región clave para el comercio y la seguridad hemisférica. La escalada militar revela una estrategia para frenar el avance de las organizaciones criminales y proteger sus intereses en un contexto cada vez más complejo.
Fuerzas federales aseguran armas, químicos y equipo táctico; la operación impacta en 281 millones de pesos a la delincuencia organizada.
Autoridades mexicanas realizaron tres operativos en Sinaloa, donde detuvieron a 18 personas y aseguraron armas, equipo táctico y sustancias químicas utilizadas en la producción de drogas sintéticas, informó la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
En Culiacán, agentes que patrullaban la zona fueron atacados con disparos de arma de fuego; tras repeler la agresión, detuvieron a siete personas y decomisaron cinco armas largas, 818 cartuchos, 33 cargadores, 11 chalecos, 22 placas balísticas y un vehículo. Además, localizaron un área de concentración de químicos, asegurando 13 mil 850 litros, con un valor estimado en 281 millones de pesos para la delincuencia.
— Gabinete de Seguridad de México (@GabSeguridadMX) October 24, 2025
En Navolato, las fuerzas de seguridad capturaron a 11 individuos a bordo de dos vehículos, uno con blindaje artesanal, incautando dos ametralladoras, siete armas largas, tres armas cortas, 21 cargadores, 868 cartuchos y equipo táctico.
En las operaciones participaron elementos de la Sedena, Semar, SSPC, FGR y Guardia Nacional, coordinados con autoridades estatales de Sinaloa.
La entidad es uno de los puntos donde se ha reforzado la vigilancia por el Gobierno federal, que ha desplegado 11 mil 800 elementos bajo la administración de Claudia Sheinbaum.
El secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth, difundió un video del golpe nocturno; con este ataque suman al menos 46 muertos en la campaña marítima contra el narcotráfico.
La madrugada del 24 de octubre, Estados Unidos lanzó un nuevo ataque contra una embarcación vinculada al Tren de Aragua, que dejó seis muertos, informó el Departamento de Defensa. Con esta acción, la campaña militar contra presuntas narcolanchas en el mar totaliza al menos 46 víctimas.
El secretario de Defensa, Pete Hegseth, publicó en redes sociales un video del impacto y calificó a los fallecidos como “narcoterroristas”, advirtiendo que serán tratados con la misma severidad que grupos como Al‑Qaeda. Hegseth además señaló que la operación se realizó por orden del presidente y que no hubo bajas entre las fuerzas estadounidenses.
Overnight, at the direction of President Trump, the Department of War carried out a lethal kinetic strike on a vessel operated by Tren de Aragua (TdA), a Designated Terrorist Organization (DTO), trafficking narcotics in the Caribbean Sea.
Según el Pentágono, el ataque ocurrió en aguas internacionales y fue el primero realizado de noche en este escalamiento de operaciones; la embarcación, dicen, transitaba por una ruta conocida de contrabando y transportaba drogas. Las imágenes muestran la detonación sobre la lancha y la posterior explosión.
La ofensiva estadounidense —que ya acumula múltiples golpes en el Caribe y el Pacífico— ha generado críticas y preguntas sobre su legalidad y transparencia, con gobiernos y expertos advirtiendo sobre riesgos de extraterritorialidad y daños colaterales. Organismos internacionales y prensa han pedido evidencia y rendición de cuentas.
El ciclo de ataques se ha acelerado en las últimas semanas, y el gobierno de EUA justifica la campaña en la lucha contra el fentanilo y otras drogas que ingresan al hemisferio. Mientras tanto, la comunidad internacional exige más información sobre inteligencia, objetivos y protocolos que autorizan estas acciones en alta mar.
El ciudadano chino, identificado como pieza clave en el tráfico internacional de drogas y lavado de dinero, fue detenido en Cuba tras fugarse de México; ahora enfrentará a la justicia estadounidense.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba confirmó la entrega del ciudadano chino Zhi Dong Zhang a las autoridades mexicanas, quienes posteriormente lo trasladaron a Estados Unidos, donde será juzgado por delitos contra la salud y lavado de dinero, informó el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch.
Zhang, considerado uno de los principales operadores financieros del narcotráfico internacional, fue detenido originalmente en octubre de 2024 en la Ciudad de México, gracias a la cooperación entre la SSPC, la Secretaría de Marina, la Defensa Nacional y la Interpol. El gobierno estadounidense había solicitado su extradición por su presunta relación con cárteles que operan en América, Europa y Asia.
Resultado de labores de investigación, cooperación internacional y coordinación, el 30 de octubre de 2024 autoridades mexicanas del @GabSeguridadMX detuvieron en la Ciudad de México a Zhi Dong “N”, identificado como responsable del tráfico internacional de droga, lavado de dinero… pic.twitter.com/0J3ieN3uE3
Sin embargo, el 11 de julio de 2025, el ciudadano chino se fugó tras recibir el beneficio de prisión domiciliaria por parte de un juez mexicano. Su escape encendió las alertas internacionales y derivó en un operativo de búsqueda encabezado por la Fiscalía General de la República (FGR) y apoyado por agencias de inteligencia extranjeras.
El 31 de julio de 2025, las autoridades cubanas lograron ubicar y detener a Zhi Dong Zhang junto con dos acompañantes en territorio caribeño, en respuesta a una Notificación Roja de Interpol.
Este jueves, tras casi tres meses de gestiones diplomáticas, Cuba entregó al fugitivo a México, y de inmediato fue repatriado a Estados Unidos como parte de la colaboración trilateral.
García Harfuch agradeció públicamente al gobierno de Cuba por su apoyo y destacó que el caso representa un ejemplo de cooperación internacional en la lucha contra el crimen transnacional, subrayando que México mantiene su compromiso de combatir las redes globales de narcotráfico y lavado de dinero.
La presidenta Sheinbaum expresó que México no apoya las operaciones militares de Estados Unidos contra embarcaciones sospechosas de narcotráfico. La tensión aumenta en la región.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aclaró que el país no está de acuerdo con los ataques de Estados Unidos contra lanchas sospechosas de transportar drogas. Afirmó en su conferencia matutina que México respeta las leyes internacionales y no aprueba esas acciones unilaterales.
El miércoles, EUA anunció que realizó dos ataques en el Pacífico oriental. En ambos casos, no hubo sobrevivientes y se reportaron varias muertes. Estos ataques son los primeros en el Pacífico desde que la ofensiva militar estadounidense comenzó en septiembre. Desde entonces, EUA ha llevado a cabo nueve ataques en total, siete en el Caribe y dos en el Pacífico, con al menos 37 personas muertas.
El gobierno estadounidense argumenta que estas operaciones buscan desmantelar cárteles de drogas en aguas internacionales. Sin embargo, las autoridades mexicanas y otros líderes sudamericanos cuestionan la legalidad de estos ataques. La postura de México refleja su preocupación por mantener la soberanía y evitar conflictos militares en la región.
Por su parte, el presidente Donald Trump ha justificado estas acciones, asegurando que tiene la autoridad legal para lanzar ataques contra narcotraficantes en aguas internacionales. Trump incluso mencionó que podría solicitar aprobación del Congreso para operaciones en tierra, si fuera necesario.
Gustavo Petro, presidente de Colombia, también criticó los ataques, al calificarlos como “asesinatos”. Petro ha sido abierto en su rechazo y ha criticado duramente a Trump, quien lo llamó “matón” y “tipo muy malo”. La tensión entre los líderes de la región continúa en aumento.
Sheinbaum destacó que México mantiene un diálogo abierto con Estados Unidos, pero siempre respetando su soberanía y principios de autodeterminación. La situación genera preocupación en toda la región, que busca soluciones pacíficas y respetuosas. La ciudadanía espera que estas acciones no escalen en un conflicto mayor y que prevalezca el diálogo.
El presidente Gustavo Petro denunció que las operaciones militares de Estados Unidos en el Caribe y el Pacífico violan el derecho internacional y calificó las acciones como ejecuciones extrajudiciales. La tensión crece tras ataques recientes que dejaron tres muertos y generaron fuertes declaraciones de ambos gobiernos.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, calificó como “ejecuciones extrajudiciales” los ataques de las fuerzas militares de Estados Unidos en el Caribe y en el Pacífico. Petro afirmó que estas acciones violan las leyes internacionales y que Estados Unidos no respeta la soberanía colombiana. La tensión entre ambos países se ha intensificado después de que EUA realizará dos ataques en aguas internacionales, cerca de la costa colombiana.
Petro expresó su rechazo en una conferencia de prensa en la Casa de Nariño. “Estas maniobras violentan el derecho internacional y, en realidad, son ejecuciones sumarias”, afirmó. El mandatario también criticó duramente a Donald Trump, a quien acusó de calumniar e insultar a Colombia en medio de la escalada por la lucha contra las drogas. De igual manera, recordó que Trump lo llamó “matón” y “mal tipo”, y le acusó de fabricar drogas, lo que aumentó la tensión diplomática.
El conflicto se agravó cuando el Departamento de Guerra de Estados Unidos informó que el miércoles el Comando Sur realizó un “ataque cinético letal” contra una embarcación en el Pacífico. La nave, que transportaba supuestamente drogas, fue destruida en el mar, dejando a tres tripulantes muertos. El secretario de Defensa de EUA, Pete Hegseth, afirmó que el ataque fue autorizado por Trump y que los tripulantes estaban relacionados con el narcotráfico. Por su parte, Hegseth también aseguró que estos narcotraficantes son tan peligrosos como terroristas como Al Qaeda.
Estas operaciones militares, de acuerdo a Hegseth, continuarán día tras día. Además, aseguró que las embarcaciones atacadas estaban participando en actividades ilícitas y que la justicia no escapará a quienes violen la ley. La comunidad internacional observa con preocupación cómo estas acciones afectan la estabilidad en la región.
Por ahora la polémica continúa en aumento y Colombia pide respeto por su soberanía y denuncia que las acciones de EUA violan el derecho internacional. Mientras tanto, Estados Unidos mantiene su postura de que sus operaciones buscan combatir el narcotráfico en la región. La tensión entre ambos países parece lejos de disminuir, y la comunidad internacional espera una solución pacífica a esta crisis.