Etiqueta: Ley General de Aguas

  • Gobernación celebra Ley General de Aguas: “Se asegura mayor control y orden del recurso hídrico”

    Gobernación celebra Ley General de Aguas: “Se asegura mayor control y orden del recurso hídrico”

    La nueva norma busca dar certidumbre a la gestión hídrica, apoyar al campo y evitar concentración del agua en pocas manos.

    La secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, destacó la importancia de la Ley General de Aguas aprobada recientemente por el Congreso de la Unión, durante la Mañanera del Pueblo en Palacio Nacional. Rodríguez habló en representación de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien se encuentra en Washington para el sorteo del Mundial 2026.

    “La ley es clave para dar apoyo y certidumbre a las actividades productivas, evitar el almacenamiento y la concentración del agua en unas cuantas manos, y poner orden en la gestión hídrica del país”, afirmó la funcionaria.

    Rodríguez explicó que se mantendrán mesas de trabajo para resolver dudas y garantizar que los productores agrícolas y campesinos tengan confianza para invertir y desarrollar sus actividades en el campo.

    La secretaria agradeció también la participación de sectores productivos y organismos consultivos, como el Consejo Nacional Agropecuario y la Asociación Nacional de Usuarios de Riego, que aportaron opiniones y retroalimentación durante el proceso legislativo. “Muchas voces se sumaron activamente para opinar y apoyar esta ley, incluyendo productores agrícolas de todo el país”, subrayó.

    El objetivo de la Ley General de Aguas es establecer un marco legal claro, protegiendo el derecho al agua, fomentando su uso responsable y evitando que se concentre en pocas manos, fortaleciendo así la seguridad hídrica y el desarrollo sostenible en las distintas regiones del país.

  • Senado aprueba ley de aguas

    Senado aprueba ley de aguas

    Con 85 votos a favor y 36 en contra, el Senado aprobó en lo general la minuta. Inicia la discusión de 23 reservas mientras crece la tensión entre partidos.

    Los senadores aprobaron en lo general la nueva Ley General de Aguas y la Ley de Aguas Nacionales. La votación quedó 85 a favor y 36 en contra. Ahora abren la discusión de 23 reservas.

    La sesión fue tensa y cargada de reclamos. Morena y sus aliados defendieron la iniciativa. La oposición la criticó con voz fuerte y gestos visibles.

    El coordinador del PAN, Ricardo Anaya, presentó una moción suspensiva. Dijo que la ley busca concentrar el control del agua en el gobierno. Anaya afirmó: “Podrás vender tu tierra, pero el agua regresa al gobierno”.

    Adán Augusto López Hernández respondió al momento. Leyó partes del artículo 49 y aseguró que el comprador conservará los derechos sobre la concesión. Aclaró que la autoridad expedirá un nuevo título conforme al plazo remanente.

    Otros panistas, como Mayuli Latifa Martínez y Verónica Rodríguez, insistieron en que la ley faculta a la federación para quitar o reasignar volúmenes concesionados. Las priístas Paloma Sánchez y Mely Romero dijeron que la norma limita la transmisión de concesiones entre familiares.

    La morenista Andrea Chávez pidió leer el dictamen y citó el artículo 37 bis. La petista Lizeth Sánchez explicó que la reforma protege a los pequeños productores. Añadió que distingue entre producción de subsistencia y agroindustria.

    Gonzalo Yañez habló de “agua para todo el pueblo” y dijo que buscan acabar con el hampa hídrica. Gerardo Fernández Noroña acusó a la oposición de defender a los acaparadores. Félix Salgado Macedonio recordó casos de concesiones pasadas, como la presa El Gallo.

    La senadora Claudia Anaya, del PRI, reconoció que las movilizaciones lograron algunos cambios. Aun así pidió más ajustes sobre los volúmenes de agua.

    En el salón de sesiones colgaron mantas y carteles. Unos leían “El agua es vida no mercancía”. Otros decían “Morena traiciona a los campesinos”. Varios senadores miraron las pancartas y subieron el tono en sus intervenciones.

    Morena y sus aliados acordaron aprobar la minuta en sus términos. Por eso las reservas de la oposición no avanzarán. La discusión en lo particular continuará en los próximos días.

    Productores y comunidades observan atentos. Esperan que la ley traduzca los cambios en agua disponible y seguridad para sus familias.

  • Ley de aguas pasa tras 24 horas de

    Ley de aguas pasa tras 24 horas de

    La Cámara aprobó con 324 votos el nuevo marco hídrico y envió la minuta al Senado. El debate dejó insultos, empujones y rostros agotados.

    La Cámara de Diputados aprobó en lo particular la nueva Ley General de Aguas. También avaló reformas a la Ley de Aguas Nacionales. La votación cerró con 324 a favor, 118 en contra y 2 abstenciones.

    Morena y aliados empujaron el dictamen. PRI, PAN y MC votaron en contra. La petista Patricia Galindo rompió con su bancada y rechazó el proyecto. Además, Aracely Cruz y Araceli Mendoza se abstuvieron.

    Tras la votación, la Cámara envió la minuta al Senado. El trámite comenzó hoy mismo. Afuera, grupos de productores siguieron atentos. Dentro, los asesores repartieron cafés y sueros.

    El debate se extendió 24 horas sin pausa. Hubo gritos, empujones y ofensas. En un punto, panistas corearon “putos, putos” a diputados del PT. El salón se tensó y la Mesa pidió calma.

    Cerca de la 1 de la mañana, la mayoría aprobó 18 reservas. Con eso atendió inquietudes de productores sobre permisos y concesiones. Ricardo Monreal ofreció revisar artículo por artículo.

    Por la madrugada, el cansancio pegó fuerte. Varias y varios oradores se equivocaron al leer. Muchas curules quedaron vacías por ratos. Aun así, las bancadas mantuvieron el pulso.

    Los coordinadores buscaron recortar la lista de oradores. El PAN aceptó. El PRI no cedió y Rubén Moreira estiró el debate. Sus compañeros admitieron que quería salir en los noticiarios matutinos.

    MC sí acortó su participación. Llevó la mayoría de sus discursos al diario de los debates. El resto siguió con rondas largas. Morena registró reservas y luego las retiró para sostener el micrófono.

    El clima subió de tono. Theodoros Kalionchiz llamó “bola de calientacurules” a la mayoría. Ofreció su sueldo y aguinaldo “que no los necesito” para una consulta indígena.

    Más tarde, César Alejandro Domínguez pidió a Sergio Gutiérrez Luna quitarse una chamarra con el logo de Morena. El vicepresidente dijo que lo consideraría y después se la quitó.

    La morenista Cintia Cuevas encaró a Moreira por la masacre de Allende. El priísta respondió que no era gobernador en 2011. También arremetió contra Luis Cresencio Sandoval por supuesta inacción.

    Hacia el mediodía, los coordinadores lograron un acuerdo. Pasaron de 80 a 16 oradores. El tono bajó un poco y las intervenciones se agilizaron. Varias diputadas respiraron con alivio.

    En el cierre, Monreal habló de un debate intenso. Afirmó que el acuerdo permitió encarrilar la sesión. De otro modo, dijo, se habrían ido “toda la tarde y parte de la noche”.

    Para las y los productores, la herencia de títulos y concesiones quedó a salvo, según la mayoría. La oposición exige consulta indígena y reglas claras. El Senado tendrá ahora la última palabra.

  • Aprueban en comisiones dictamen que crea nueva Ley General de Aguas

    Aprueban en comisiones dictamen que crea nueva Ley General de Aguas

    La aprobación en comisiones ocurrió bajo fuerte presión de productores que mantienen un cerco con maquinaria agrícola y exigen modificar artículos que consideran ambiguos e injustos.

    La Comisión de Recursos Hidráulicos, Agua Potable y Saneamiento de la Cámara de Diputados aprobó el dictamen que crea la nueva Ley General de Aguas y reforma la Ley de Aguas Nacionales, pese al cerco y las advertencias de productores que amenazan con un bloqueo de 48 horas al recinto legislativo. El documento fue turnado a la Mesa Directiva para su discusión inmediata en el pleno.

    El aval ocurrió en un ambiente tenso y rodeado de protestas, luego de que campesinos arribaron desde temprano con tractores para reforzar el cierre total del inmueble. En solo dos horas, el dictamen avanzó con 28 votos a favor de Morena, PT y PVEM; 10 en contra del PAN y PRI, y dos abstenciones de legisladores de Movimiento Ciudadano.

    Durante la sesión, realizada en el Patio Norte de San Lázaro, diputados priístas increparon a los legisladores de la mayoría con gritos de “¡traidor!”, elevando aún más el clima de confrontación. Entre los opositores, el panista Francisco Pelayo advirtió que la iniciativa carece de presupuesto suficiente y promueve un “centralismo absoluto”.

    Pelayo señaló la presunta incongruencia entre el artículo 49 —sobre transferencias internas de agua en distritos de riego— y el artículo 22, que establece que los derechos de uso no podrán transmitirse. Para el legislador, esta ambigüedad deja a los productores a merced de decisiones discrecionales de la autoridad.

    En respuesta, Oscar Bautista, del PVEM, afirmó que la propuesta no permite transferencias entre particulares, pero sí mantiene “el binomio agua–tierra”, lo que garantiza certeza jurídica a los agricultores.

    Mientras tanto, la sesión ordinaria programada para este miércoles sigue detenida a la espera del dictamen, y la Junta de Coordinación Política decidió posponer para la próxima semana la discusión de las reformas a la Ley General de Salud.

  • San Lázaro avanza en nueva legislación hídrica: listo el dictamen de la Ley General de Aguas

    San Lázaro avanza en nueva legislación hídrica: listo el dictamen de la Ley General de Aguas

    El proyecto incorpora cambios clave tras las exigencias de campesinos y productores, y prioriza el consumo humano sobre cualquier uso comercial o industrial.

    La Cámara de Diputados recibió, minutos antes de la medianoche del viernes, el dictamen de la nueva Ley General de Aguas, documento que también modifica la Ley de Aguas Nacionales y que coloca en el centro el derecho humano al agua, la regulación estricta de las concesiones y la tipificación de delitos hídricos. La propuesta integra ajustes derivados de las demandas de campesinos y productores agrícolas, quienes previamente manifestaron su desacuerdo con la iniciativa original presentada por la Presidenta Claudia Sheinbaum.

    El dictamen mantiene la prohibición de transferir o heredar concesiones, e incorpora una precisión en el artículo 4 para asegurar que cualquier disminución o cancelación del volumen concesionado esté siempre fundada y motivada en criterios legales. También establece el retiro de títulos que no se utilicen, para que esos volúmenes regresen a las aguas nacionales. Todo permiso o prórroga deberá priorizar el consumo humano y doméstico.

    En la exposición de motivos, la Comisión de Recursos Hidráulicos enfatiza que se protegerá a los pequeños usuarios rurales, quienes históricamente han sido excluidos por no comprobar el uso continuo del agua. El dictamen también busca frenar la impunidad fiscal, recordando que en 2023 industrias y servicios pagaron apenas 12 mil millones de los 56 mil millones adeudados.

    Morena subrayó que las exigencias del sector agrícola fueron escuchadas. El coordinador parlamentario, Ricardo Monreal, afirmó que se reunieron de última hora con campesinos para incorporar ajustes que atiendan sus preocupaciones. Adelantó que las comisiones analizarán el texto el próximo miércoles y podría turnarse al Pleno en esa misma fecha.

    Monreal reiteró que la intención de la nueva ley es clara: evitar el acaparamiento del agua, impedir su uso indebido o comercialización irregular y terminar con la impunidad en delitos hídricos. La iniciativa también da cumplimiento a la reforma constitucional de 2012, cuya reglamentación la Suprema Corte exigió al Congreso.

  • Proponen cambios a la Ley General de Agua

    Proponen cambios a la Ley General de Agua

    Diputados y expertos abogan por una reforma a la Ley General de Agua para mejorar la gestión del recurso y asegurar la participación ciudadana en las decisiones clave.

    La Cámara de Diputados lleva a cabo Audiencias Públicas sobre la Ley General de Aguas. En este espacio, varios legisladores y especialistas expusieron la urgencia de modificar la iniciativa presidencial para el uso y manejo del agua en México.

    Durante la reunión, Yamile Salomón Durán, diputada federal del Partido Verde, subrayó la crisis hídrica que enfrenta el país. Manifestó que el crecimiento demográfico, la urbanización y el cambio climático amenazan el acceso al agua. Esta situación pone en riesgo la salud, la seguridad alimentaria y la estabilidad económica de millones de mexicanos, especialmente en áreas rurales.

    Salomón propuso que se revise el proceso para solicitar prórrogas de concesiones. Actualmente, los usuarios deben hacerlo al menos seis meses antes de que estas expiren. Este plazo ha provocado que muchos pierdan sus derechos por no presentar trámites a tiempo, lo que resulta en vulnerabilidad jurídica y la exclusión de programas de apoyo.

    Los participantes también enfatizaron la importancia de incluir al sector de producción en el nuevo marco legal sobre el agua. Coinciden en que es vital que la sociedad participe en la toma de decisiones que afecten a sus comunidades.

    Las propuestas que surjan de estas audiencias pueden marcar un punto de inflexión en la legislación del agua en México. La colaboración entre el gobierno y la sociedad civil se presenta como esencial para enfrentar la crisis hídrica y garantizar un futuro sostenible para todos.

  • El decreto a Ley General de Aguas

    El decreto a Ley General de Aguas

    El decreto a la Ley General de Aguas representa una ruptura estructural con la lógica neoliberal que, desde los años ochenta, concibió el agua como una mercancía sujeta a concesiones privadas. En contraste con la política de desregulación promovida por gobiernos anteriores cuya mayor atrocidad se vivió con Enrique Peña Nieto, esta ley coloca al agua bajo la tutela del Estado y la considera como lo que es: un bien común y no un recurso comercial como lo estableció el enfoque neoliberal. Baste recordar la manera en que, bajo dicho enfoque, se redujo la gestión hídrica a un asunto de rentabilidad permitiendo la concentración del recurso en manos de políticos corruptos y corporaciones que lo explotaron con fines lucrativos (particularmente en industrias extractivas, refresqueras y agrícolas de exportación). El nuevo marco legal restituye al agua su carácter público y estratégico, prohibiendo su acaparamiento y estableciendo criterios de justicia ambiental y acceso equitativo.

    Uno de los puntos destacables es que se reconoce explícitamente al agua como un bien estratégico y de seguridad nacional, lo que implica su protección. Es de destacarse porque se integra la visión ecológica con la soberanía: el agua es indispensable para la alimentación, la energía, la salud y la vida misma y siendo un bien estratégico, se prioriza su uso doméstico y agrícola sobre los intereses industriales además de que se promueve la gestión integral de cuencas y acuíferos con participación ciudadana y se consolida la autosuficiencia hídrica.

    Por otra parte, contrario a diversas opiniones, casualmente vertidas por la oposición, este decreto representa un avance histórico para el campesinado mexicano, ya que establece el derecho preferente al uso del agua para actividades agrícolas de subsistencia y riego sustentable, lo que revierte décadas de despojo hídrico que marginaron a comunidades rurales en beneficio de grandes agroindustrias. A partir de este decreto, los campesinos se reconocen como actores fundamentales en la gestión del recurso; por si fuera poco, se impulsa la justicia hídrica y territorial, al vincular el acceso al agua con la soberanía alimentaria y la preservación de los ecosistemas. Más allá de la evidente ignorancia de la oposición en cuanto al campesinado, en la práctica, hoy los núcleos agrarios y comunidades indígenas tendrán prioridad en el manejo del agua y participación en los Consejos de Cuenca. También es de destacar la prohibición del acaparamiento del agua por empresas transnacionales y la revisión de concesiones otorgadas bajo regímenes neoliberales para romper al fin con el modelo privatizador impuesto durante el auge del neoliberalismo. Los mecanismos de transparencia y rendición de cuentas, así como las sanciones propuestas lograrán restituir el control soberano del agua a la nación y proteger los derechos de las comunidades.

    Por último, el agua es un bien estratégico y pilar de la soberanía nacional, su planeación hídrica se vincula a la seguridad alimentaria, energética y territorial, con este decreto se fortalece la capacidad del Estado y se garantiza el derecho humano al agua reconocido por la Constitución y por la ONU; además, las organizaciones sociales, pueden desempeñar un papel esencial en la implementación de esta nueva política dado que el espíritu de este decreto fortalece a los actores sociales que articulan la lucha ambiental con la justicia social y la participación comunitaria. En este sentido y en el contexto de transición hacia lo que es la verdadera cuarta transformación, el papel de las organizaciones podría garantizar que la ley se aplique desde abajo y con sentido de justicia ambiental.

    • Luis Tovar
      Secretario General de la Fundación para la Defensa del Medio Ambiente, FUDEMAH