La BMV detiene la operación de las acciones de Grupo Elektra, propiedad de Ricardo Salinas Pliego, luego de que sus accionistas aprobaran volverla privada en diciembre pasado, mientras la Bolsa mantiene avances moderados.
La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) anunció la suspensión de la cotización de las acciones de Grupo Elektra, del empresario Ricardo Salinas Pliego, tras la decisión tomada por sus accionistas a fines de 2024 de deslistar la compañía.
En diciembre pasado, los accionistas aprobaron en asamblea volver privada a la empresa, luego de mantener profundas diferencias con el regulador bancario sobre su operación en el mercado accionario local. La BMV informó que la suspensión se realiza “con fundamento en el primer párrafo y la fracción III del artículo 248 de la Ley del Mercado de Valores”, efectiva a partir del 30 de septiembre de 2025.
La noticia llega en un momento en que la BMV avanzaba por cuarta jornada consecutiva, acercándose a cerrar el tercer trimestre con ganancias acumuladas, aunque con un mercado cauteloso por la posibilidad de un cierre parcial del gobierno estadounidense.
El índice líder S&P/BMV IPC, que agrupa a las acciones más negociadas del mercado, registraba un avance de 0.20% a 62,732.98 puntos poco después de la apertura, reflejando un optimismo moderado pese a la suspensión de Elektra.
Grupo Elektra enfrenta además obligaciones fiscales millonarias, derivadas de omisiones en el Impuesto Sobre la Renta (ISR), lo que agrega presión sobre la compañía en un contexto de reformas regulatorias y escrutinio financiero.
El corporativo confirmó el desembolso de 25 millones de dólares en Nueva York para suspender la ejecución de una resolución judicial; aseguran que ya apelaron la decisión.
El riesgo era real: Ricardo Salinas Pliego pudo haber enfrentado una orden de captura en Estados Unidos. En un comunicado oficial, Grupo Salinas reconoció que pagaron una fianza millonaria para detener, de manera temporal, la ejecución de una resolución dictada por la Suprema Corte del Estado de Nueva York.
Según información compartida por Bloomberg en una nota del periodista Marcelo Rochabrun, afirma que Salinas Pliego y sus empresas fueron condenados a pagar impuestos pendientes de su negocio de telecomunicaciones, el cual vendieron a AT&T en 2014.
La empresa rechazó las versiones difundidas en medios y redes sociales, a las que calificó como “afirmaciones falsas y dolosas”. Sin embargo, aceptó que la resolución del tribunal estadounidense sí representaba un riesgo directo contra el dueño de Elektra, lo que los obligó a cubrir el monto de 25 mdd para protegerlo.
“Nos preocupa profundamente que el referido tribunal haya declarado en desacato a ciudadanos extranjeros altamente respetados —quienes no han sido parte del juicio— y, más grave aún, que lo haya hecho sin las debidas garantías procesales”, señaló la compañía.
El consorcio subrayó que el proceso legal continúa y se resolverá conforme a los tiempos judiciales correspondientes, aunque advirtió que los resultados no serán inmediatos. Al mismo tiempo, calificó como “abiertamente ilegal” la medida del tribunal de Nueva York y confirmó que ya presentaron una apelación formal. El consorcio subrayó que el proceso legal continúa y se resolverá conforme a los tiempos judiciales correspondientes, aunque advirtió que los resultados no serán inmediatos. Al mismo tiempo, calificó como “abiertamente ilegal” la medida del tribunal de Nueva York y confirmó que ya presentaron una apelación formal.
Grupo Salinas insistió en que este episodio forma parte de una campaña de desinformación en su contra, aunque admitió que el pago de la fianza era indispensable para evitar consecuencias mayores de manera inmediata.
La batalla legal se mantiene en tribunales internacionales y el corporativo confía en que la resolución definitiva de su apelación será favorable, aunque tengan que pagar más sumas millonarias.
Cabe recordar que persiste la presión de inversionistas extranjeros que reclaman más de 500 millones de dólares que TV Azteca mantiene como deuda. Estos empresarios incluso han pedido apoyo al gobierno de la Presidenta Claudia Sheinbaum para recuperar sus recursos. En México, el poder judicial ha respaldado a la televisora, lo que le ha permitido mantener congeladas de manera indefinida sus obligaciones con acreedores privados.
Salinas se enfrenta a presiones por deudas, pero el empresario recupera su libertad mediante un importante depósito.
El empresario mexicano Ricardo Salinas Pliego logró evitar su arresto en Estados Unidos al pagar una fianza de 25 millones de dólares. Esta medida se debe a una disputa con AT&T por una supuesta deuda fiscal. Salinas, reconocido por su papel como dueño de Elektra y TV Azteca, enfrenta varios desafíos financieros.
Con una fortuna estimada en 7 mil 500 millones de dólares, Salinas es uno de los hombres más ricos de México. Sin embargo, sus problemas con el gobierno son evidentes. La presidenta Claudia Sheinbaum ha señalado a Salinas y sus empresas por presuntamente no pagar impuestos que superan miles de millones.
El origen del conflicto con AT&T se remonta a la compra del negocio de telecomunicaciones de Salinas en 2014. AT&T demandó en 2020, argumentando que existían deudas por impuestos impagos relacionados con esa transacción. Aunque las empresas de Salinas impugnaron el reclamo, perdieron el caso y fueron declaradas en desacato.
Recientemente, la jueza Andrea Masley, de la Corte Suprema del estado de Nueva York, determinó que Salinas debía pagar 20 millones de dólares en un plazo de dos semanas. De lo contrario, enfrentaría el riesgo de ser encarcelado.
Para su fortuna, el magnate cumplió con el requerimiento mediante el depósito de la fianza antes del plazo. Sin embargo, Salinas y su equipo también están apelando la decisión del tribunal. “El encarcelamiento en Rikers no es agradable”, advirtió la jueza en una audiencia anterior, señalando la dura realidad de ser encarcelado en una prisión de máxima seguridad.
En México, la situación de Salinas se complica aún más. Sus empresas no solo lidian con problemas fiscales, sino también con acreedores frustrados que han adquirido deuda de TV Azteca y no han recibido ningún pago. Esta situación ha llevado a Grupo Salinas a expresar su disposición a dialogar con los acreedores para encontrar una solución viable.
Con un panorama financiero complicado y presiones constantes, el futuro de Ricardo Salinas enfrenta incertidumbre. La historia de este multimillonario resalta la delgada línea entre el éxito y la adversidad en el mundo empresarial.(Con información de Bloomberg).
Elektra lanza la preventa del iPhone 17 Pro Max con un precio que dejará a muchos en shock. ¿Quién dijo que la tecnología de lujo tenía que ser accesible?
Elektra ha decidido sorprender a sus clientes con la preventa del iPhone 17 Pro Max. Pero, cuidado, porque su precio podría dejarte temblando. Supera los 100 mil pesos en pagos semanales.
Este nuevo iPhone 17 Pro Max tiene un procesador A19, que promete eficiencia y rapidez. Es como si te dijeran que este teléfono también puede hacer café. Pero, ¿realmente vale la pena pagar más del doble por el último grito de la tecnología?
Elektra ofrece el iPhone 17 Pro Max a un precio de contado de 51 mil 349 pesos. Pero si decides optar por pagos semanales, la broma sube a 683 pesos durante 154 semanas. Eso suma un total de 105 mil 182 pesos. Una ganga, ¿verdad?
Y no olvidemos que este precio es para la versión de 2 TB. Si tu presupuesto no llega a esa cifra, puedes optar por versiones más pequeñas. Pero, ¿quién no querría el tamaño máximo para guardar fotos de las vacaciones que nunca tomaste?
Las especificaciones suenan atractivas: pantalla OLED de 6.9″, cámaras de 48 MP y una batería que promete hasta 37 horas de video. Pero, a este precio, uno podría esperar que el teléfono también te prepare el desayuno.
Elektra, con su oferta, parece estar apuntando a un público que busca más que un teléfono. Tal vez se trate de una declaración de estilo, o simplemente de un capricho que pocos se pueden permitir.
Ricardo Salinas Pliego, dueño de Elektra, parece haber encontrado la fórmula mágica para hacer que el lujo sea aún más lujoso. Si tienes el dinero y el deseo de ser el propietario del último modelo, Elektra está lista para saquear tu bolsillo. Pero recuerda, el lujo tiene un precio y en este caso, es exorbitante.
La nueva Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) arrancó funciones con una pesada herencia: más de mil 500 asuntos pendientes, entre ellos los millonarios adeudos fiscales de Ricardo Salinas Pliego, que en conjunto superan los 74 mil millones de pesos.
De acuerdo con información de Dulce Olvera para Sin Embargo, los ministros acordaron que los casos se turnarán mediante un sistema automatizado y aleatorio, dejando atrás la discrecionalidad. Además, la reforma al Poder Judicial fija que los juicios fiscales no podrán extenderse más de seis meses, lo que obligará a resolver con mayor rapidez.
El SAT y la Consejería Jurídica de la Presidencia solicitaron aplazar hasta septiembre 15 litigios por 47 mil millones de pesos, de los cuales la mayor parte corresponde a Elektra y TV Azteca, empresas de Grupo Salinas, así como a Movistar.
El analista jurídico Luis Tapia, en entrevista para Sin Embargo, advirtió que aún falta precisar cómo se contarán los plazos y si existen recursos suficientes para cumplirlos, aunque la norma obliga a informar al Tribunal de Disciplina Judicial en caso de retrasos.
Con esta nueva etapa, la Corte promete transparencia, audiencias públicas y atención a casos de interés ciudadano, mientras el país espera que los grandes empresarios no sigan evadiendo impuestos con recursos legales.
La nueva integración de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) recibirá un rezago de más de mil 500 asuntos al asumir funciones el próximo 1 de septiembre de 2025, entre ellos temas fiscales, penales y de derechos fundamentales.
De acuerdo información de El Sol de México, hasta el 8 de agosto la Corte acumulaba mil 507 casos sin resolver, de los cuales solo 382 están listos para votación en el Pleno, mientras que más de mil 200 deberán ser estudiados desde cero por las ponencias de las y los nuevos ministros.
Entre los temas más relevantes destacan la discusión sobre la constitucionalidad de la prisión preventiva oficiosa, los conflictos fiscales de Grupo Elektra, el caso de Emilio Lozoya contra la periodista Lourdes Mendoza, así como debates emergentes como la regulación del uso de hongos alucinógenos en México.
También se encuentran pendientes asuntos como la extinción de organismos autónomos, la creación de un Banco de ADN, y las facultades de la consejera presidenta del INE.
El próximo Pleno estará conformado por Hugo Aguilar Ortíz —quien será presidente de la Corte—, Lenia Batres Guadarrama, Yasmin Esquivel Mossa, Loretta Ortíz Ahlf, Giovanni Figueroa, Irving Espinoza Betanzo, María Estela Ríos, Sara Irene Herrerías y Arístides Guerrero.
El nuevo ministro presidente adelantó que los temas fiscales y penales serán prioridad, y que la meta central será dar una salida rápida y eficaz al rezago judicial, que marcará el inicio de la nueva era de la Corte mexicana.
El Décimo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Primer Circuito negó un amparo a Grupo Elektra contra una resolución del Servicio de Administración Tributaria (SAT) que obliga a sus accionistas a cubrir un crédito fiscal de al menos 5 mil millones de pesos.
Este caso forma parte de una serie de batallas legales en las que Elektra ha intentado retrasar pagos al SAT mediante recursos e impugnaciones, incluyendo la recusación de magistrados.
De acuerdo con El Imparcial, la disputa se origina en operaciones de Mexicana de Aviación y su filial Omega, adquirida por Elektra. El tribunal concluyó que la venta posterior de Omega no tuvo un beneficio económico real, sino que generó pérdidas fiscales injustificadas que redujeron la base del impuesto en perjuicio del erario.
La magistrada Ana María Ibarra Olguín rechazó que un artículo que escribió afectara su imparcialidad, mientras que el presidente del tribunal, Alfredo Enrique Báez, acusó a la defensa de aplicar tácticas dilatorias durante más de un año.
La negativa de amparo también confirma una resolución que obliga a Elektra a pagar 2 mil millones de pesos por ISR, y se suma a otro caso donde la Suprema Corte retiró de discusión un amparo contra un crédito fiscal de 1,431 millones de pesos.
Grupo Salinas calificó las resoluciones como “ilegales” y “políticas”, y anunció que buscará una revisión constitucional ante la Corte.
Grupo Elektra vivió un segundo trimestre de contrastes en 2025: mientras sus ingresos consolidados crecieron 6%, el número de clientes con pagos atrasados también aumentó, reflejando los efectos de un consumo más débil y un gasto más controlado por parte de los hogares mexicanos.
De acuerdo con información de Expansión, el índice de morosidad se ubicó en 4.4%, frente al 3.8% del mismo periodo del año anterior, lo que evidencia un deterioro en la cartera vencida del negocio financiero, pilar clave del grupo.
Durante el trimestre, la firma reportó ingresos totales por 50 mil 864 millones de pesos, de los cuales 31 mil 544 millones provinieron de su área financiera (+7.8% anual) y 19 mil 320 millones del negocio comercial (+2%).
A pesar del crecimiento en ventas, el flujo operativo (EBITDA) cayó 3%, ubicándose en 6 mil 129 millones de pesos, y los costos y gastos operativos aumentaron 6.8%, sumando 44 mil 736 millones de pesos.
No obstante, Grupo Elektra logró revertir las pérdidas del mismo periodo del año anterior y cerró con una ganancia neta de 2 mil 696 millones de pesos, tras haber registrado una pérdida de 644 millones en 2024.
El número de acciones en circulación también se redujo: de 220.3 millones en junio de 2024 a 207.6 millones en junio de 2025.
¡Ninfa Salinas ingresa al consejo consultivo de la Fundación IMSS!
“Hoy hay más Fundación Azteca en el IMSS y más IMSS en Fundación Azteca que nunca”, dijo, orgulloso, Zoé Robledo, titular del Instituto Mexicano del Seguro Social.
Y eso no es todo.
Robledo firmó convenio para la implementación de la Orquesta y Coro IMSS Esperanza Azteca, a pesar de que el dueño de Elektra adeuda 74 mmdp al SAT.
El dueño de Grupo Salinas, a través de sus orquestas, entra por la puerta grande en el IMSS y tendrán presencia en la CDMX, Nuevo León, Edomex y Coahuila.
Salinas puso 110 instrumentos destartalados y el IMSS cargará con todo el paquete y pagará la nómina de los profesores, pondrá los foros, auditorios y aulas del IMSS.
El 5 de julio de 2023 se firmó el Convenio General de Colaboración entre el IMSS y Fundación Azteca de Grupo Salinas, dentro del Teatro Cubierto San Jerónimo Independencia.
Una vez que Salinas vendió al IMSS la idea de sus coros al Instituto Mexicano del SeguroSocial, no se ofreció ni un solo concierto. Hasta 2024, el IMSS puso en marcha el Coro IMSS Esperanza Azteca, con un concierto pequeño el cual decidió financiarse con parte del presupuesto del IMSS y concierto supuestos “donativos” gestionados a través de la Fundación Azteca.
El coro está integrado por 194 menores. Aunque el director de la institución, Zoé Robledo, afirma que el coro ha sido un éxito, desde su fundación, lo cierto es que solo han realizado una presentación en el foro Independencia, y lo demás ha sido negocio, nos dicen fuentes al interior de la propia fundación IMSS.
Lo extraño es que el IMSS ha anunciado que están trabajando para que el IMSS tenga otros 35 coros similares a un costo que, a pesar de las solicitudes de información que hemos pedido al IMSS, la institución aún no ha querido esclarecer.
Lo cierto es que, en años recientes, más de 1,700 millones de pesos del erario público han sido inyectados a los Coros Esperanza Azteca, y otros 10 millones de pesos han sido entregados a sus Planteles Azteca.
Estas cifras, provenientes de fondos federales y estatales, contradicen la narrativa de una iniciativa puramente privada y benéfica.
De la batuta filantrópica a la caja registradora pública
El caso de los Coros y Orquestas Esperanza Azteca es paradigmático. Su origen se remonta a una iniciativa del violinista Julio Saldaña, quien, ante la necesidad de financiación, se vio obligado a ceder los derechos de su proyecto a Salinas Pliego. Lo que inicialmente se presentó como un mecenazgo de Grupo Salinas, pronto reveló su verdadera fuente de sustento: la Secretaría de Educación Pública (SEP), CONACULTA, la Cámara de Diputados y, más recientemente, el IMSS.
La trama se complejiza con la figura de Esteban Moctezuma Barragán, exdirector de Fundación Azteca, quien posteriormente asumió el cargo de Secretario de Educación Pública. Esta transición no fue fortuita. En 2019, bajo su gestión en la SEP, los Coros Azteca fueron transferidos y renombrados como Orquestas y Coros de la Nueva Escuela Mexicana (ONEM). Sin embargo, antes de esta “millonaria transición”, la Fundación Azteca, en presunto contubernio con Moctezuma, supo explotar el potencial económico de las orquestas.
Un ejemplo terriblemente elocuente es el Fideicomiso Centro de Capacitación Esperanza Azteca en Puebla, creado en 2012 mediante un acuerdo con el gobierno estatal, entonces liderado por Rafael Moreno Valle.
Aquel fideicomiso no solo canalizó recursos públicos, sino que también implicó la cesión de un inmueble de más de 5 mil hectáreas, “La Constancia Mexicana”, a favor de las Orquestas y Sinfónicas Azteca. Entre 2011 y 2018, esta red de “donaciones” y contratos gubernamentales sumó los impresionantes 1,700 millones de pesos.
El modelo pseudo educativo: planteles Azteca
Pero el negocio no se ha limitado a la música. Los Planteles Azteca representan otro flanco de esta estrategia de captación de recursos públicos bajo el disfraz de la educación.
Aunque la Fundación Azteca promociona estos planteles como impulsores del “talento del mañana”, su funcionamiento se basa en un modelo que replica costos exorbitantes y que se nutre en un 85% de los presupuestos estatales.
En 2023, la Fundación Azteca recibió más de 10 millones de pesos de la SEP para la “Implementación y desarrollo del Modelo de Intervención Plantel Azteca”.
A pesar de la supuesta filantropía, la matrícula en estos planteles tiene costos considerables para los alumnos: alrededor de $1,800 pesos de inscripción, más el costo de la mensualidad (entre $587 y 1,850 pesos), a lo que se suman derechos de la SEP y papelería, elevando el costo total de ingreso a unos 5,000 pesos.
Si bien es cierto que 12 mil alumnos han egresado, generando ingresos por matrículas de aproximadamente 60 millones de pesos, para Salinas Pliego esto parece ser insuficiente.
La última melodía: el Coro IMSS Esperanza Azteca
Con la transferencia de los coros a la SEP, Fundación Azteca no detuvo su búsqueda de nuevas avenidas de ingresos. La estrategia ahora se replica en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). En 2024, se puso en marcha el Coro IMSS Esperanza Azteca, financiado con parte del presupuesto del IMSS y “donativos” gestionados por la Fundación Azteca.
Aunque el director del IMSS, Zoé Robledo, lo ha calificado de “éxito”, la realidad es que el coro, integrado por 194 menores, ha tenido una única presentación pública. El verdadero interés parece residir en la venta de la idea de replicar otros 35 coros similares, con un costo aún no esclarecido.
Las solicitudes de información pública al respecto permanecen sin respuesta, lo que genera opacidad y alimenta la sospecha de un nuevo esquema de lucro.
La firma de convenios para implementar más orquestas y coros IMSS Esperanza Azteca en Monterrey, el Estado de México y Coahuila, con el IMSS asumiendo la contratación de maestros y personal de apoyo, y Fundación Azteca aportando instrumentos, metodología y dirección artística, cierra el círculo de esta “sinfonía del negocio” donde el erario público parece ser la principal partitura.
Salinas Pliego, un “maestro de la evasión fiscal”, utiliza la filantropía como una estrategia de legitimación social. Al invertir en proyectos con una alta visibilidad pública y un halo de beneficio social (coros infantiles, planteles educativos), se construye una imagen de empresario comprometido y benefactor.
Esto desvía la atención de prácticas financieras cuestionables y permite consolidar un capital simbólico que, a su vez, facilita la negociación y la obtención de beneficios del Estado. La “cultura de la donación” se convierte en un mecanismo de marketing social que oculta el flujo de recursos públicos hacia intereses privados.
El modelo de Planteles Azteca y la expansión de los coros al IMSS revelan una clara mercantilización de los derechos sociales y la educación. Lo que debería ser una provisión universal del Estado se convierte en un servicio donde, aunque se reciban fondos públicos, también se exigen cuotas a los beneficiarios.
Este “modelo pseudoeducativo” no solo genera ganancias para la fundación, sino que también crea una segmentación social en el acceso a programas educativos y culturales. La supuesta “inversión social” se transforma en un negocio parasitario que extrae valor del presupuesto público y de las familias, en lugar de complementarlo o potenciarlo de manera genuina.
Ricardo Salinas Pliego ha transformado la filantropía en una lucrativa herramienta para la extracción de recursos públicos.
Los más de 1,700 millones de pesos canalizados a sus coros no son un acto de generosidad, sino una factura pagada por todos los mexicanos.
Lo suyo no es filantropía; es un esquema ingenioso para parasitar el presupuesto del Estado.
El IMSS, institución de salud pública, ahora desvía fondos vitales para financiar los “coros” de un magnate.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), bajo la presidencia de la ministra Norma Piña, dejará sin resolver el millonario adeudo fiscal de Ricardo Salinas Pliego y Grupo Elektra. La revisión del amparo relacionado con el caso no aparece en el listado de temas de la Segunda Sala para su última sesión del 6 de agosto.
El expediente, admitido en julio de 2024, fue pospuesto por una serie de maniobras legales de Salinas Pliego, incluyendo impedimentos contra tres ministros. Así, corresponderá a la nueva Corte, que iniciará funciones en septiembre con Hugo Aguilar Ortiz al frente, resolver el caso.
La deuda a discusión supera los 35 mil millones de pesos, derivados de tres créditos fiscales que, con multas y recargos, representan casi la mitad del total que Salinas Pliego debe al fisco: 63 mil millones de pesos. A pesar de que los proyectos de resolución perfilan el pago inmediato, la defensa del empresario ha interpuesto al menos 47 recursos legales para retrasar el proceso.
Aunque el pago es inminente, aún no hay fecha definida para que los nuevos ministros lo voten en sala o en el pleno. El caso Elektra se mantiene como uno de los pendientes más relevantes que hereda la gestión de Piña a la nueva SCJN.