La derecha mexicana sigue sin encontrar ningún rumbo político y no lograr asimilar la derrota del pasado dos de junio, en el que la Cuarta Transformación tuvo una aplastante victoria, y es que ahora entre los mismos voceros del PRIAN se están cuestionando y echando la culpa de su fracaso como opositores.
En redes sociales, el conservador Pablo Majluf trató de impulsar la ya gastada narrativa de la “dictadura” en México con el presidente, Andrés Manuel López Obrador, en la que volvió a iniciar los simpatizantes y militantes de las derecha a preparar sus documentos, incluso a sacar su patrimonio del país “porque el régimen obradorista nunca se irá del poder”.
Con una oposición como ustedes no necesitan ejercer una dictadura para mantenerse en el poder.
Sin embargo, lo sorprendente no fue la respuesta de algunos usuarios que se pronunciaron a favor “tener un plan de salida” frente al gobierno de la Cuarta Transformación, sino que fue un propio conservador, Christian Camacho, el que puso en su lugar a Pablo Majluf, al señalar que con el fracaso de la oposición mexicana la 4T “no necesitaba ejercer una dictadura”.
En referencia al fracaso de la alianza entre el PRI y el PAN, así como el impulsó de una candidata “ciudadana”, como Xóchitl Gálvez, para tratar de frenar la avalancha electoral del Morena y sus aliados. En una campaña donde la derecha exhibió su doble discurso, puesto que mientras su candidata firmaba con sangre la continuidad de los programas sociales, otros aseguraban que los iban a quitar de la Constitución.
En estos días, no, no en estos días, desde el inicio del sexenio han traído la palabrita a flor de piel. En los recientes días se viralizó un episodio más de un fiel y digno representante de lo que ahora ellos son y forman parte: la oposición moralmente derrotada, totalmente desquiciada y ahora (nuevamente lo digo) perramente envilecida. El episodio lleno de rabia, coraje y desesperación del personaje en cuestión que se escuda en un payaso, despotricó contra el gobierno del presidente López Obrador acusándolo de “dictador”.
Habría que mencionarle al susodicho lo que en realidad significa la palabra “dictadura” (igual y lo ignora o no lo sabe). Según la RAE [f. Régimen político que por la fuerza o violencia, concentra todo el poder en una persona o en un grupo u organización, y reprime los derechos humanos y libertades individuales.].
Pero más que aclararle, sería recordarle todo lo que implicó ese régimen que se manejó en México a lo largo del periodo neoliberal, periodo “lleno de libertad”. Una libertad (social, cultural, periodística, humana) que bajo su óptica era la perfecta, la idónea. Una libertad que a muchos “medios de comunicación” les acomodó perfectamente, pero a aquellos que se atrevían a levantar la voz, a luchar por sus derechos, a defender sus tierras, a escribir sobre los abusos del poder, a exhibir esos abusos del poder eran perseguidos, sí, perseguidos por el poder del estado de una forma aberrante.
Al parecer él nunca se dio por enterado, no la sufrió y tampoco vivió en carne propia el peso de esa palabra pero testimonios hay muchos.
Uno (de entre tantos) claro testimonio es el del periodista J. Jesús Lemus cuando en sus investigaciones periodísticas sacó a la luz la complicidad de la hermana de un expresidente con un líder del narcotráfico, para más claridad, con “La Tuta”, (evento ahora más que conocido) y sí que sufrió la embestida del aparato de poder. Ese episodio le costó más de tres años en prisión, en una prisión de “alta seguridad” junto a capos y reos de alta peligrosidad. En una entrevista contó una de esas experiencias verdaderamente aterradora cuando fueron por él, lo subieron a un helicóptero, lo amarraron de los pies y lo llevaron mar adentro, con los pies atados lo arrojaban y dejaban caer hacia el abismo del mar y lo mantenían colgando por horas.
Esa es una parte de los conocidos “vuelos de la muerte”. Sí, método conocido y que se aplicó en Chile en el tiempo de, ESA SÍ, DICTADURA MILITAR. Aquí en México esa táctica fue muy usada por el gobernador de Guerrero Rubén Figueroa. Entrar a esta historia sería entrar a la “Guerra Sucia” que dejó muchos muertos, desaparecidos o refugiados en otros países.
Otro caso, el de Carmen Aristegui cuando, en ese entonces el diputado Fernández Noroña, mostró una manta al interior del palacio legislativo con la leyenda: “¿Tú dejarías a un borracho que maneje tu coche? ¿No verdad? Entonces porqué dejas que maneje tu país”. Esto fue mostrado, como ya lo mencioné, en el recinto y la periodista lo retomó para su emisión matutina iniciando una serie de observaciones y cuestionamientos al aire como: “…y pongámosle atención al asunto, y dejemos la pregunta abierta. No es la primera vez que se habla de este tema, de un presunto problema de alcoholismo de Felipe Calderón”. Esas fueron las palabras de la periodista, pero la pregunta que dejó al aire e incomodó al poder fue: ¿Tiene o no, problemas de alcoholismo el presidente de la República?
El haber hecho esa pregunta fue devastador para la periodista porque empezó a sentir el peso, el real y verdadero peso del poder al sacarla del aire. El suceso fue ampliamente conocido por la difusión que tuvo y por la lucha que emprendió la señora para defender su derecho a la libertad de expresión.
Otro caso, el del periodista José Gutiérrez Vivó, un gigante de la comunicación. Fue un innovador en muchos sentidos. Los que crecimos con su noticiero sabemos que marcó a toda una generación. Su problema o su pecado, haberle dado voz a Andrés Manuel López Obrador en aquel lejano 2004 para anunciar que competiría por la presidencia en los comicios del 2006. Fue uno de los que le dio voz al hoy Presidente de la República y que se echó encima a los gobiernos de Fox y de Calderón. El resultado, nunca más lo volvimos a escuchar al aire por el sistema radial.
Otro ejemplo más, cuando la izquierda mexicana en el periodo del salinato hasta el peñanietismo, luchaba por su pueblo, por sus tierras, por sus ideales, por sus principios, muchos de sus integrantes fueron desaparecidos, asesinados.
Uno más para terminar, cuando el pueblo de San Mateo Atenco salió a defender sus tierras que les iban a comprar a precios irrisorios para construir el aeropuerto que traía Vicente Fox en su cabecita, el pueblo fue reprimido con una violencia inaudita, mujeres violadas, pobladores metidos a la cárcel, en fin, fue una represión horrenda a más no poder.
No expongo el largo proceso que enfrentaron por haber cuestionado al poder, es algo de sobra conocido, documentales hay muchos, testimonios más, familias afectadas cientos… y hoy es de sobra conocido cómo ahora esa prensa mercenaria se “confronta” tratando de parecer que enfrenta “valientemente al poder, que se enfrenta al aparato del Estado” y a un presidente con todo tipo de cuestionamientos y al que pueden cuestionar pero que, al recibir la respuesta o aclaración o usando su derecho a la réplica a los cientos de mentiras que propagan gritan ¡Dictadura!
No se cansan de gritar a los cuatro vientos que estamos viviendo una dictadura, dictadura que por cierto les permite dar opiniones en varios de sus medios, escribir sus artículos, editoriales o posturas en todos los espacios que tienen a su servicio, participar en sus mesas de “análisis” y lo peor, tratando de denigrar la investidura presidencial hasta con mentadas de madre, en todos los medios donde participan.
Pues sí que es una rara dictadura.
Tan manoseada la pobre palabra que ya ni miedo le tienen.
Disgregando
El presidente dio a conocer, ahora sí, con pelos y señales (con cantidades y nombres) el dinero DEL PRESUPUESTO que el gobierno del sexenio pasado “asignó” y entregó a los “medios de comunicación” en publicidad… EN UN AÑO, UN SOLO AÑO. ¡EL VAIVÉN DE LOS NÚMEROS ES IM-PRE-SIO-NAN-TE! No se alcanza a dimensionar la cantidad. Son cantidades con muchos, muchos pero muchos números, como impresionante es la guerra sucia que ahora están dando. Del tamaño de las cantidades que ya no se les asignaron en este sexenio, de ese tamaño es el enojo y de ese tamaño serán las mentiras y la lucha por el poder y no el poder en sí, sino del dinero del presupuesto del que se creían dueños.
Ahora entendemos porqué no ven nada, nadita de nada bien hecho en este gobierno, pero pues ¿cómo van a ver algo bien hecho, algún avance, algún parámetro a favor si lo que les iluminaba los ojos, la razón y el entendimiento eran precisamente las cantidades que les aportaban los gobiernos pasados a sus “empresas” por “publicidad”; y publicidad es sólo uno de los parámetros por los que recibían esos ingresos o en lo que estaban metidos.
Estaban metidos, sí, los dueños de los medios de comunicación junto con políticos de baja ralea que ahora vemos bien vestiditos para sus entrevistas, en la construcción de hospitales, en la distribución de medicinas, en las concesiones del agua, en las concesiones de carreteras, en la recolección de basura, en la privatización de las escuelas, bueno, como lo expuso la Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, “si quieres un caldito de pollo, hasta ése estaba privatizado”.
Y así iban por el mundo, creyéndose dueños de la nación.
Este lunes 20 de noviembre, se realizó la ceremonia de conmemoración de la Revolución Mexicana en el Zócalo Capitalino de la Ciudad de México, en donde el Presidente Andrés Manuel López Obrador, brindó un discurso a la ciudadanía el cual destacó la importancia de la fecha histórica en la que Francisco I. Madero llamó al pueblo a tomar las armas para derrocar a la dictadura porfirista.
El primer mandatario leyó un párrafo del manifiesto de transformación que se redactó el 20 de noviembre de 1910, mismo que describe las razones de ese movimiento de transformación que buscaba terminar con la prosperidad que beneficiaba a una minoría y no al pueblo ni a la nación.
Andrés Manuel indicó que la Revolución Maderista fue eficaz ya que en solo 6 seis se consumo el derrocamiento de Porfirio Díaz, en ese periodo muchas personas perdieron la vida, sin embargo, esas vidas representan el cambio para el beneficio del pueblo, entre ellas, la de Francisco I. Madero, el cual fue un sacrificio que no fue en vano pues después de su asesinato, se aprobó la Constitución de 1917, la cual fue la más avanzada del mundo en cuanto a justicia social y sus fundamentos continúan prevaleciendo a la actualidad.
López Obrador destacó los logros que hubo con la Revolución Mexicana, como la creación de las Fuerzas Armadas y el Ejército, por ello, mencionó el valor simbólico de las instituciones como la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), y la Secretaría de Marina (SEMAR), las cuales tienen un origen revolucionario en donde la causa de lucha era y es por la justicia y el bienestar.
AMLO indicó que actualmente está existiendo una Revolución pacífica y humanista en donde las Fuerzas Armadas han sido punto clave para la ayuda en la transformación.
Celebró el trabajo de la SEDENA y de la SEMAR las cuales han aportado mucho en muchas obras y acciones en beneficio del pueblo mexicano, el Presidente expresó que es muy satisfactorio decirle al pueblo de México que tienen a su lado al gobierno democrático, al ejército, a la Fuerza Aérea Mexicana, a la armada y a la Guardia Nacional para que la ciudadanía viva con paz y bienestar.
“¡Viva la Revolución Mexicana! ¡Viva México!”, concluyó.
“Se está instaurando una dictadura en México” nos dicen los que simularon por décadas, una democracia en nuestro país.
Durante 36 años de neoliberalismo, la derecha mexicana creó una nación con varias dolencias o padecimientos que resultan en desigualdades de todo tipo; desde luego, que los órganos (constitucionales) dejaron de trabajar al servicio de la nación, porque se vieron contagiados y afectados por el conocido virus de la burocracia dorada.
El país enfermó; sin embargo, esa misma derecha (agente infeccioso), bastó con que escuchara la frase “por el bien de todos, primero los pobres”, para así verse amenazada ante una nueva distribución de la riqueza y aprovechándose del mal estado en que ellos mismos dejaron a la nación, adoptaron una narrativa engañosa a partir de la llegada del presidente López Obrador, en la cual, se aglutinaron en un solo frente y acompañados y abrazados por las transnacionales nacionales y extranjeras, y sus medios de comunicación masivos, crearon falsos síntomas de una dictadura basándose en el clasismo y racismo.
La propaganda de la derecha consiste en hacerle creer al mexicano de a pie, a quien, cuando estuvieron en el poder, dejaron “a su santa suerte”, que el gobierno en curso es una amenaza, es decir, su narrativa es la continuación de la guerra sucia contra AMLO en 2006, pero ahora, creando síntomas inexistentes de una dictadura en nuestro país. “El dictador” le llaman columnistas, “intelectuales”, empresarios y políticos de derecha; dicen que parafraseando al presidente, este dice que “la pobreza es buena” , y escupen su odio y rechazo a que al pueblo se le apoye con presupuesto público, diciendo que a “AMLO le gustan los pobres y que por eso quiere un país de pobres”, “solo le gusta viajar a Cuba” dicen, ¿y por qué es correcto que un presidente viaje a entregar nuestro petróleo a Estados Unidos pero no lo es, que viaje a construir lazos de fraternidad en Latinoamérica y el Caribe? La hipocresía aflora en su discurso, por un lado, alertan al pueblo de la “instauración de una dictadura”, y por el otro, piden una inmediata intervención en México. Lo único que desean es regresar al modelo caduco que benefició a unos cuantos.
Toda esta construcción gelatinosa compuesta por todo tipo de argumentos insostenibles, que no cuajan, la derecha trata de legitimarlos por medio de una guerra jurídica y mediática como las que se han estado viviendo en Latinoamérica para destituir a presidentes constitucionales y progresistas. en este sentido, la SCJN protege intereses claramente marcados a favor de los grandes capitales del país, por lo que, rechaza cada una de las reformas propuestas por el ejecutivo; sin embargo, este conflicto escala a niveles de amenaza, como la que hizo la presidenta de la Suprema Corte, Norma Piña diciendo que: “No habrá elecciones pacificas sin aumento de presupuesto”, o también, podríamos señalar la amenaza del ministro Aguilar, de destituir al presidente de la república.
Para la oposición, los síntomas de la “dictadura de AMLO” se reflejan en la creación de las mañaneras, espacio en el cual, de acuerdo con ellos, divide y polariza. Mediante esto, la oposición intenta que las y los mexicanos pierdan la memoria histórica del origen de las profundas desigualdades de nuestro país a partir de la llegada del neoliberalismo.
Los síntomas que no son síntomas de una dictadura, sino engaños de la oposición, que, para justificar, utilizan la mañanera como uno de sus argumentos para señalar una dictadura, lo cual es de risa, porque ellos mismos están llevando a cabo una guerra mediática a través de televisión, radio y redes sociales; mientras que las mañaneras no cuentan con un espacio en los medios públicos como televisión o radio. Aun así, el presidente López Obrador se convirtió en el streamer más visto en Hispanoamérica. Quizá ese sea su coraje, el coraje de perder la lucha en el campo de los medios de comunicación.
Intenta argumentar la actual oposición de derecha mexicana encabezada por su representante genuina X.G, que en México existe una dictadura. Y así lo afirmó en su desdibujada reunión pasada dominical en el WTC (World Trade Center) de la capital del país ante su cada vez más desesperada actitud por su lejanía del primer lugar en las encuestas presidenciales.
Viene a colación el catastrofista e insidioso discurso que manejan estos opositores faltos de imaginación que lo único que saben hacer es insultar, mentir, exagerar, y distorsionar la realidad que a diario palpamos en los hechos.
Vivimos en México una dictadura según su desgastado decir, pero paradójicamente de manera libre pueden vejar, insultar, injuriar y hasta intentar desestabilizar el gobierno legítimamente constituido sin sanción alguna, es más; con bastante permisividad, hasta excesos criticables como lo hubiera dicho en sus tiempos de apogeo, el infame Gustavo Díaz Ordaz.
Hoy sin embargo, los mismos pseudo informadores y comentócratas que antes alababan y ensalzaban gobiernos represores, violadores de derechos humanos, exigen una postura igual a la que ellos apoyan y de la que son frecuentes aplaudidores para que el gobierno mexicano condene un ataque en Israel dejando de lado todos los matices que existen en esa trágica y cruenta historia en la que México es totalmente ajeno, y de posición neutral.
Se desgarran las vestiduras para que el Estado mexicano tome partido por un país como Israel del que ampliamente sabemos es un brazo armado de los estadounidenses y que flagrantemente ha violentado derechos humanos de palestinos y el que además se ha negado a enviar a México a presuntos delincuentes solicitados que se han escondido allá y que son muy importantes para esclarecer delitos de alto impacto aquí.
Estos resabios de “comunicadores” que principalmente se escuchan en cadenas nacionales de la radio como el gesticulador Gómez Leyva o el miserable López Dóriga sin duda pretenden utilizar el conflicto belicoso en otras latitudes para golpear a como dé lugar a un gobierno y un movimiento político nacional (Morena) que se pronuncia pacifista, instigando e intrigando para crear la percepción infame de que el Presidente López Obrador está a favor del terrorismo. Como en el caso de Ucrania buscan llevar agua para su molino ante su fracasada y perdedora estrategia en lo nacional.
Ahora resulta que exigen a la “dictadura” de López Obrador mande rescatar de Israel a compatriotas que quedaron en medio del fuego y las hostilidades de un gobierno beligerante.
No tienen congruencia, pues vendrían a un país destruido y dictatorial, según sus narrativas.
Actualmente, la defensa de la soberanía nacional también pasa por poner los límites legales establecidos a la prensa, pues ésta es toda una maquinaria propagandística del conservadurismo opositor y sus patrocinadores; como efectivamente se ha acreditado con los recursos que reciben de gobiernos extranjeros, como por ejemplo, el estadounidense que probadamente ha financiado al líder organizador de la actual oposición política, el empresario Claudio X. Glz. Ante lo que ya el Presidente López Obrador ha protestado formalmente ante su embajada en México.
Es preciso que la propaganda golpista sea debidamente erradicada porque así lo mandata la Constitución y nadie puede estar por encima de ésta.
Y que a los connacionales que están en Israel los traigan, los rescaten en la dictadura.