México reafirma su compromiso con el Tratado de Aguas de 1944. A pesar de la sequía crónica, el país entrega agua según lo disponible. Esto prioriza el consumo humano y la agricultura en la frontera.
La sequía golpea fuerte al Río Bravo desde 2019. Por eso, México ajusta sus entregas de agua a Estados Unidos. El gobierno de Claudia Sheinbaum lo confirma en un informe reciente. Ellos cumplen el tratado “conforme a la disponibilidad”. Esto significa que dan lo que pueden sin dañar a sus propias comunidades.
La presidenta Sheinbaum planea una llamada con Donald Trump. Él amenazó con aranceles si México no cumple. Pero México insiste en que respeta el acuerdo de 1944. Además, ambos países trabajan juntos en soluciones técnicas. Ellos manejan el agua en la cuenca del Río Bravo. Esto ayuda a resolver deudas pasadas y el ciclo actual.
La sequía afecta a familias y agricultores en ambos lados. México prioriza el derecho al agua para la gente. También cuida la producción de alimentos. Por ejemplo, entregan agua extra sin romper reglas. Esto mantiene la paz y evita daños a la vida diaria.
El informe de la Secretaría de Relaciones Exteriores destaca la colaboración. México y EUA respetan la soberanía de cada uno. Mientras tanto, la sequía limita el recurso para todos. Aun así, México actúa con responsabilidad. Ellos buscan acuerdos que beneficien a las personas reales, como los que viven en la frontera.
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