Cada uno de sus esfuerzos pareciera más inútil que el otro; sus esfuerzos son débiles, vacíos, sin razón y hasta absurdos; su historia conservadora, autoritaria, reaccionaria y… retrógrada, pareciera simplemente tenerlos sin cuidado, su panacea es negarla y asumirse logros ajenos, como el del demócrata y expresidente Francisco I. Madero.
En Derecholandia están desesperados, malhumorados diría yo. Sus discursos van cargados de contradicciones con graves violaciones a las leyes de la lógica y de la razón.
El fracaso de la ultraderecha en los tiempos de la 4ta Transformación ha sido mayúsculo, nada como en sus buenos tiempos, en los que el PAN llevaba a cabo un proyecto fascista en México con la revista racista, antisemita y pro-hitleriana, “La Reacción (?)”, hecho que queda muy marcado en nuestra historia a pesar de que con el neoliberalismo, cambiaron, o intentaron cambiar, la narrativa de su partido bajo una serie de banderas que incluían: el partido del progreso, de la democracia, de los empresarios progresistas etc.
En el presente se han quedado sin resultados y la mala costumbre del injerencismo se ha hecho notar en la pasada cumbre global de ultraconservadores (CPAC) que se llevó acabo en nuestro país, y en donde se hizo un llamado a formar un (verdadero) frente conservador nacional en México; al mismo tiempo que el hijo de Bolsonaro, Eduardo Bolsonaro, destapó al actor Eduardo Verástegui (tipo Zelenky) como posible candidato de la extrema derecha rumbo al “24”, y quién de igual forma, recibió el apoyo de Donald Trump, quién a su vezmencionó quese necesita detener “la propagación del socialismo”.
En dicha cumbre, Verástegui se lanzó contra el presidente López Obrador acusándolo de “socialista y autoritario”, usando los mismos falsos argumentos de la oposición. También acusó al régimen de “destruir las instituciones e impulsar ideologías progresistas importadas desde el extranjero”, cuando él mismo está siendo impulsado y apoyado desde el extranjero, sin perder de vista que Verástegui también organizó el CPAC por primera vez en México, organización que fue creada en EE. UU.
El actor también acusó al titular del Ejecutivo de militarizar al país, cosa que ya se ha desmentido en diversas ocasiones. No obstante, no se quedó hasta ahí con su discurso, sino que también recurrió a una fake news al decir que “AMLO quiere prohibir los nacimientos navideños”, cosa totalmente falsa, porque en México NO existe ninguna iniciativa que busque prohibir esto. No obstante, su idea era y es plantear que el presidente “busca desaparecer al catolicismo en nuestro país”, sabiendo que el pueblo mexicano es mayoritariamente católico.
“Ya deja las mañaneras, ya olvida tu popularidad. Era más popular el Chavo del Ocho y nunca quiso gobernar”, decía el actor, olvidándose de lo que significa una democracia y olvidándose que las mañaneras sirven para informar, para disminuir el analfabetismo político, al ser una estrategia de comunicación que impulsa la concientización y deja ver a los mexicanos cuál es la realidad de nuestro país y del escenario político, sin dejar a un lado y priorizando la libertad de expresión y de opinión.
El presidente López Obrador se está enfrentando a todo este grupo de políticos y de medios de comunicación convencionales a nivel internacional que promueve la rancia Ultraderecha conservadora, con el único fin de impulsar su narrativa y regresar a los enormes privilegios que el PRI y el PAN permitieron durante años.
Su regreso no parece fácil, Los conservadores se van debilitando cada vez más; Su modelo neoliberal que subordinó nuestra economía nacional a las políticas de las potencias neoliberales (EE. UU) y al capital de los privados fracasó, la alianza Va X México fracasó, Un(d)idos por México como era de esperarse, carece de fuerza, principios y unidad. Mientras que este nuevo movimiento político conjunta distintas fuerzas nacionales e internacionales, con una presencia más clara y evidente de influencias extranjeras que con Claudio X. González, como la de todos estos ultraderechistas apoyados por la iglesia católica, el apoyo de Trump, del senador Republicano Ted Cruz y de diputados europeos. La pregunta es: ¿Les alcanzará? La marcha del 27 de noviembre marcará un gran cambio, mostrando el “músculo” que posee el presidente Andrés Manuel López Obrador, que posee la 4ta Transformación
Hacemos comunicación al servicio de la Nación y si así no lo hiciéramos, que el chat nos lo demande.
Comentarios