García Luna y el INE sí se tocan

Ha sido una semanita cargada de información en el ámbito de la política nacional. Lo cual nos da bastante gusto. Entre tanta información hay dos puntos importantes que se pueden unir en la marcha de la derecha del pasado domingo, tanto el Plan B de reforma electoral (ya aprobado por ambas cámaras de representantes) y la declaración de culpabilidad de Genaro García Luna en los Estados Unidos de América. De eso reflexionamos más abajo.

Sí se tocaron

Debido a que no pasó la reforma constitucional en materia electoral (debido a la intransigencia y mezquindad de la rancia derecha) que buscaba profundizar y fortalecer la democracia de nuestro país, se decidió implementar unas reformas a la ley electoral para quitar al menos los privilegios del Instituto Nacional Electoral (INE) y algunos aspectos para democratizar más nuestro país.

Sin embargo, los medios de comunicación y la derecha (muchas veces es difícil diferenciar uno del otro) han creado una narrativa a base de mentiras para sostener que el INE es la democracia y por lo tanto se atenta contra ella cuando se les quieren quitar sus onerosos y ofensivos privilegios.

En el mismo sentido, después de algunos años y de un largo juicio, Genaro García Luna, ex Secretario de Seguridad Pública en el gobierno de Felipe Calderón, fue declarado culpable por narcotráfico y por corrupción. Es decir, su estrategia de seguridad realmente fue el apoyo incondicional a un cartel de la droga sobre los demás, trayendo consigo más de 100 mil personas asesinadas, la mayoría de ellas inocentes.

En ambas situaciones, la derecha busca cómo voltear la situación para verse lo menos afectada. No importa si hay que minimizar los privilegios de los consejeros del INE y casi desconocer a García Luna como elemento fundamental de su política de seguridad. En su situación mentir es la mejor forma de tratar de salir bien librados de arteros golpes. 

El espejismo de las marchas

Una marcha puede ser resultado de muchas cosas, desde el nivel de acarreo asqueroso que se pueda tener para movilizar a las personas, hasta una madurez importante de la concientización del pueblo que sale a exigir justicia o a defenderla. Lo que vimos hace unos días pareciera más cercano al primer momento, y es que la derecha es campeona mundial en el acarreo y compra de conciencias, son capaces de absolutamente todo para defender sus privilegios.

Teniendo esto en cuenta, debemos desmontar las mentiras que hablaban de que habían marchado hasta medio millón de personas en la CDMX y 30 mil en cada ciudad importante del país. La verdad si fue muy desalentadora para la oligarquía pues no llegaron a 100 mil en la capital mexicana y tuvieron desde cientos hasta unos pocos miles en las demás ciudades.

Pero si esto no fuera poco, las concentraciones donde podrían capitalizar el supuesto descontento reunido en ellas se terminaron después de una hora. Sí, la minoría es tan novata en temas de movilización social que desaprovecha oportunidades grandes de golpear políticamente. En fin, luego uno se pregunta por qué siguen perdiendo 

Sin máscaras

Lo cierto es que está muy claro que la derecha lo que defiende son los privilegios de unas cuantas personas en detrimento del empobrecimiento de la gran mayoría de la población. La corrupción es su principal bandera sin temor a que eso se traduzca en miles de muertes como en el sexenio de Calderón.

Finalmente, sería un error desestimar el nivel político de la marcha del domingo, es una amenaza a la cual hay que poner atención dentro de su justa dimensión. No podemos bajar la guardia, debemos continuar en la defensa del proyecto de las mayorías, de la cuarta transformación, es nuestra obligación seguir dando todo por el bienestar de las demás personas.

Hacemos comunicación al servicio de la Nación y si así no lo hiciéramos, que el chat nos lo demande.

Salir de la versión móvil