El pasado jueves 26 de octubre, en este mismo espacio https://losreporteros.mx/opacidad-institucional/, comentaba que los trabajadores de la Suprema Corte de Justicia podrían tener una visión distorsionada sobre el recorte por la desaparición de los fideicomisos y la forma en que se ejercía el presupuesto. Realicé un símil con otras instituciones donde, a pesar de que hay informes periódicos sobre el ejercicio presupuestal, era poco transparente y los trabajadores no tienen acceso a los detalles. Hablé en concreto de la UAM y mi responsabilidad ejerciendo el gasto anual de un área de investigación.
De forma concreta no gastaba el dinero sin aprobación colegiada de los profesores que formaban parte del beneficio presupuestal. Se repartía la mayor parte del dinero asignado anualmente a cada profesor miembro y además se dejaba una parte mínima a los gastos de operación del área. Pero esto sólo es una muestra de organizaciones diversas en cada uno de los sectores que componen la institución. Los lectores del artículo me comentaban que la opacidad propiciaba o servía para ocultar acciones corruptas, estoy de acuerdo.
Hoy quiero retomar a los beneficiarios de los fideicomisos del Poder Judicial que cuestionaron tanto su desaparición. En el primer trimestre de este 2023 conocí a un juez del interior de la república, amigos en común nos presentaron y convivimos algunas horas. Hace una semana acabo de saber de nuevo sobre la persona en cuestión, pues estábamos interesados en conocer su perspectiva al respecto y fue interesante lo que comentó.
Toda la información los ha tomado por sorpresa, carecían del conocimiento de que existían los beneficios de los fideicomisos para los jueces. No sabían que ellos podían tener una prestación de arreglo para sus casas, ellos han pagado por sus remodelaciones. Les ha sorprendido que la gente esté molesta por los grandes beneficios que tienen los jueces, lo que no sabemos es qué jueces, pues al parecer ellos no son los privilegiados.
La persona habla en plural porque ha comenzado a socializar con sus compañeros de trabajo sobre esa información dada a conocer a la opinión pública, no como una comunicación interna. Ahora hay elementos que se han cuestionado, por ejemplo, se acaban de dar cuenta que, a pesar de tener un buen sueldo, lo que por ley les van a otorgar como monto de jubilación es mucho menor al ingreso que tienen de forma regular. Así vemos que hay cosas que aún no se dan a conocer porque los mismos trabajadores están alejados de los espacios donde se toman las decisiones.
La manipulación de la Suprema Corte de Justicia se sostiene sobre un gran velo de ignorancia porque a nadie –de los altos mandos– le conviene que los involucrados sepa de sus decisiones. Por el momento, este artículo queda como una especie de especulación, lo que necesitamos es esperar, quizá en poco tiempo las circunstancias se darán a conocer y sabremos más detalles sobre la forma de brindar la prioridad de ese recurso que se queda muy arriba en una institución con grandes opacidades.
Hay que colocar especial atención en las instituciones de gobierno y continuar con el combate a la corrupción, que es uno de los elementos que más dañan a un país. Necesitamos generar procesos más eficientes para la rendición de cuentas no sólo ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, sino a los usuarios y beneficiarios. También es necesario comenzar una actividad pedagógica para exigir mejores tratos, convertirnos en ciudadanos más participativos donde las instituciones dejen de sentirse intocables. Por ello tenemos personajes como las ladies o lores que han protagonizado videos virales, su frase favorita suele ser “no sabes con quien te metes”. Ese es el punto, nadie tendría que estar por encima de la ley.
Xunu’:
Los resultados de las elecciones del domingo pasado en Argentina plantean un panorama complejo y es de sorprender la decisión de los argentinos. Un país lastimado por cuestiones económicas y la corrupción, difícilmente podrá tomar buenas decisiones. Es lamentable que los comentarios sobre ese país giren en torno a convertirlo en el nuevo laboratorio sudamericano, tal como lo fue en su tiempo Chile. Ojalá que no tengamos que ver su padecimiento y que se hagan cargo de la decisión que acaban de tomar.
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