Categoría: Opinión

  • GRAVAR LA ESPERANZA: EL CASTIGO DE TRUMP A LAS FAMILIAS MEXICANAS Y EL LLAMADO DE SHEINBAUM ANTES DEL SENADO

    GRAVAR LA ESPERANZA: EL CASTIGO DE TRUMP A LAS FAMILIAS MEXICANAS Y EL LLAMADO DE SHEINBAUM ANTES DEL SENADO

    Las remesas no son un lujo: son el salvavidas económico de millones de familias mexicanas. Gravar su envío desde Estados Unidos no solo es injusto, es cruel.

    El Partido Republicano en Estados Unidos, encabezado por el expresidente Donald Trump, ha vuelto a mostrar su rostro más crudo y oportunista: ahora, propone imponer un impuesto del 3.5% a las remesas que los trabajadores migrantes envían a sus familias desde territorio estadounidense. Una medida que no solo es económica, sino profundamente política y moralmente reprobable.

    Durante 2023, las remesas que llegaron a México alcanzaron la histórica cifra de 65 mil millones de dólares, lo que representa un ingreso superior incluso al generado por las exportaciones petroleras o el turismo. Estos recursos equivalen al 3.5% del Producto Interno Bruto nacional, pero su impacto es aún más determinante cuando se observa a nivel local. En estados como Chiapas (14.3%), Guerrero (13.6%), Michoacán (11.2%) y Zacatecas (10.6%), las remesas son literalmente la columna vertebral de su economía. En estas regiones, castigadas históricamente por el abandono gubernamental, el dinero que envían los migrantes no es un complemento, es un salvavidas.

    La propuesta de gravar las remesas no es nueva. Trump ya había insinuado esta medida durante su primera campaña presidencial en 2016, como una forma de “hacer que México pague el muro”. Hoy, en su intento por regresar a la Casa Blanca, revive la idea bajo el mismo pretexto nacionalista, apelando a los prejuicios más profundos del electorado republicano: la criminalización del migrante, la idea de que México se “aprovecha” de Estados Unidos, y una visión utilitaria de la política exterior.

    Lo alarmante es que esta medida —aunque aún necesita pasar por el Senado estadounidense para su aprobación definitiva— ya ha sido retomada como bandera política y amenaza con convertirse en realidad si los republicanos logran la mayoría en noviembre. En ese contexto, la advertencia de la presidenta Claudia Sheinbaum no es menor: “De ser necesario, nos vamos a movilizar”. Y tiene razón. Porque lo que está en juego no es solo dinero: es la dignidad y la vida de millones de personas.

    Las remesas no son un lujo. Quien ha tenido que migrar, dejar su tierra, su familia y su idioma para trabajar jornadas extenuantes en otro país, sabe que cada dólar enviado está cargado de sacrificio. Se utiliza para pagar alimentos, colegiaturas, rentas, medicinas, transporte, ropa. Es, en muchos casos, el único ingreso de las familias receptoras.

    Por eso, cobrar un impuesto por este acto de amor y responsabilidad familiar es no solo una injusticia, sino una crueldad. Jeanette Leyva, periodista especializada en economía, lo expresó con claridad en su columna para El Financiero: “Hay estados en donde deben encenderse las alertas, pues las remesas alcanzan montos muy elevados con respecto al PIB, y particularmente en aquellos con menores niveles de producto per cápita”. Es decir, los más pobres serán los más afectados.

    Además, la medida generaría efectos secundarios que podrían intensificar la desigualdad. Las familias con menos recursos perderán capacidad de consumo, lo que impactará a las economías locales. Podría aumentar el endeudamiento, la deserción escolar, y en muchos casos, el retorno forzado a Estados Unidos por vías irregulares, alimentando redes de tráfico de personas.

    Hay también un componente simbólico que no debe pasarse por alto. Este impuesto comunica algo más profundo: que el esfuerzo del migrante no vale. Que trabajar en Estados Unidos no garantiza derechos, ni respeto. Que enviar dinero a tu madre, a tus hijos o a tu comunidad es motivo de castigo fiscal. Es una forma sofisticada de discriminación: no se grava al inversionista extranjero, sino al jornalero que limpia casas, recoge cosechas, cuida ancianos o sirve mesas.

    Este tipo de propuestas tienen consecuencias más allá de lo económico. Alimentan discursos de odio, legitiman la xenofobia y polarizan aún más a las sociedades. En lugar de reconocer la aportación de los migrantes —quienes sostuvieron a buena parte de la economía estadounidense durante la pandemia—, se les trata como si fueran un problema que debe contenerse o monetizarse.

    Ante este panorama, la respuesta del gobierno mexicano debe ser clara y firme. La presidenta Sheinbaum ha mostrado sensibilidad y determinación al solidarizarse con la comunidad migrante. Pero la defensa no debe quedarse en lo simbólico. Es momento de construir una estrategia binacional que combine la presión diplomática, la movilización social, y el desarrollo de alternativas financieras para proteger a los remitentes y beneficiarios de las remesas.

    Una de las herramientas que ya se han mencionado es la Financiera para el Bienestar, que ofrece servicios de envío de dinero con comisiones mínimas. También se deben fomentar esquemas de bancarización en ambos lados de la frontera, uso de cuentas digitales en dólares y pesos, y mecanismos que transparenten y abaraten el proceso de envío.

    Además, se debe reforzar el trabajo con las comunidades migrantes, los consulados, y las organizaciones de derechos humanos para hacer frente común. Porque este no es un tema solo de economía: es de justicia social, de reconocimiento histórico y de respeto a los derechos humanos.

    Frente a un gobierno extranjero que ve en el migrante un blanco electoral, la movilización no es amenaza, es defensa propia. Como lo hizo en su momento el movimiento Chicano, como lo han hecho los trabajadores agrícolas con sus huelgas, o las organizaciones defensoras de migrantes con sus litigios, ahora es tiempo de unir voces a ambos lados de la frontera. Las calles, las redes, las plazas, las casas de migrantes, pueden convertirse nuevamente en espacios de dignidad y resistencia.

    La defensa de las remesas no debe confundirse con un asunto de “intervencionismo” o “asuntos internos”. México tiene todo el derecho de alzar la voz por sus ciudadanos en el exterior, especialmente cuando sus derechos y sus familias están siendo atacadas.

    El dinero que llega desde Estados Unidos no es un simple flujo financiero. Es un acto de amor, una expresión de lealtad familiar, un puente emocional entre quien se fue y quien se quedó. Gravarlo, condicionarlo o criminalizarlo es una forma de desprecio institucional que ningún país democrático debería tolerar.

    Por eso, decir no al impuesto a las remesas es decir sí a la dignidad humana. Es reconocer que ningún esfuerzo familiar debe convertirse en botín político. Que ninguna transferencia solidaria debe llevar un castigo. Y que ningún migrante debe pagar con intereses su derecho a ayudar.

    Hoy más que nunca, es momento de alzar la voz, de apoyar a quienes sostienen a México desde fuera, y de recordarle al mundo que las remesas no son dólares: son abrazos enviados a distancia. Cobrar por ellos es, sencillamente, inaceptable.

    • La columnista, Mariuma Munira Vadillo Bravo, es Maestra en Derechos Humanos y Garantías Individuales. Puedes contactarla en Facebook: MUMA Mariuma Munira, Twitter: @MariumaMunira.
  • Los otros maestros

    Los otros maestros

    Al día de hoy la CNTE sigue plantada en la plaza del zócalo de la CDMX y en el aeropuerto AICM, después de la intentona de cercar el palacio de gobierno para obstaculizar la mañanera de nuestra presidenta sin tener éxito, ya que se optó por la transmisión a distancia y se atendieron las preguntas de los periodistas y las secciones habitualmente programadas. Resulta interesante que una organización de supuestos maestros llegue a palacio de forma violenta y arremetan contra los periodistas, hagan disturbios y se nieguen al dialogo privilegiando la imposición de sus demandas en vísperas de la elección del poder judicial del 01 de junio. Los estudiosos hablan de que estas son simples estrategias para tener una mejor posición en la negociación política frente a nuestra presidenta, lo cierto es que esta organización se está develando de cuerpo completo haciéndole el caldo gordo a la derecha, amenazando incluso con boicotear las elecciones del próximo domingo donde elegiremos a un nuevo poder judicial conformado por jueces, magistrados y ministros. 

    Yo recuerdo las marchas de la antigua CNTE en tiempos de Calderón y de Peña Nieto en la que éramos reprimidos con lujo de violencia, donde los dirigentes eran masacrados, desaparecidos y muchos de ellos presos políticos. En esos años era claro las demandas de justicia del magisterio y clara también la línea de un gobierno represor, sin dialogo, y ocupando toda la fuerza pública y militar para “poner orden”. Frente a estas injusticias era común que la ciudadanía se sumara a estas marchas, la CNTE tenía el apoyo del pueblo que hacia suyas sus demandas y sufría con esta organización las bajezas de los gobiernos prianistas. Hoy creo que la CNTE se ha ido por el camino incorrecto, ya no son los tiempos de antes, me parece que se quedó en el almanaque y no se han enterado que estamos en la cuarta transformación de la vida pública de México. 

    Es urgente que alguien les diga a los dirigentes y líderes seccionales de la CNTE que México ya cambió y que en el año 2018 el pueblo de México voto por un cambio de país, de rumbo, un nuevo modelo de gobierno, con una filosofía distinta, que eligió a un gobernante democráticamente y que luchamos porque esta democracia permanezca. Dan tristeza sus desmanes, ellos podrán tener la militancia de los supuestos maestros, pero no tienen al pueblo, el pueblo es mucho más que una simple organización corrupta, charra y golpista. Desde mi punto de vista, la actual CNTE se comporta como si estuviera con gobiernos del PRIAN porque en ese escenario se originaron, en ese mundo fueron criados, no saben vivir en democracia, no saben cómo comportarse frente a gobiernos democráticos, sin duda quedan demandas por cubrir, pero no son las formas, en esta ocasión se atienden con ayuda del gobierno no a pesar del gobierno como lo era en el pasado, ahora en democracia no se les vitupera a los maestros como antes, no se les excluye, su comportamiento es antidemocrático, totalmente anacrónico y es por ello que no tienen el apoyo del pueblo de México y nuestra presidenta sí, ella no sólo tiene el respaldo de su pueblo sino también tiene su cariño, su entrega, porque si bien es cierto que hay cosas que mejorar en el magisterio, también es cierto que desde el 2018 se ha trabajado para que sus demandas sean atendidas en lo posible del presupuesto. 

    No hay represión, se les respeta sus derechos, se les basificó casi un millón de plazas, se les mejoró su salario como nunca antes, se les está ofreciendo una semana más de vacaciones, aumento del salario del 9% y de un 1% adicional en septiembre, se les está tomando en cuenta para una mejor evaluación, no como con la falsa reforma educativa de Peña, no se pagan ahora a medios corporativos para denigrar su labor docente como en el pasado donde el tal “X González” hablaba de que eran delincuentes y mafiosos. Ahora no es así, qué acaso no lo ven. El gobierno ha entregado miles de millones de pesos para mejora de las instalaciones educativas, se ha buscado detener la edad de jubilación y que esta sea justa tanto para hombres como para mujeres y se ha creado un fondo de pensiones para que ningún maestro o maestra se jubile con menos de lo que ganaba en su último salario registrado, ya no va a ver eso de que ganas 16,000 y te jubilas con 4,000, ya no, por el contrario, se busca complementar esta pensión para que esta sea justa y digna, adicional a todos los programas sociales que apoyan también a los maestros. 

    Recuerdo muy bien que AMLO se ocupó de que se les aumentara como nunca el salario a los maestros, y que ninguno ganara menos del promedio de salario mensual en México, retribuyendo con ello a la labor noble que realizan. Entonces ¿qué más quiere la CNTE? Claro que siempre hay cosas por mejorar y vamos en esa dirección, ajustarnos al presupuesto dado que este está asignado a otros apoyos sociales que también reclaman demandas justas y con las que también se tenían deudas históricas. No se trata de que aparezca una organización y diga atiéndeme a mí primero y saca dinero de donde puedas para atenderme sino te armo un desmadre, qué es eso, yo les diría tranquilos, vamos formados camaradas. Y es de esto apreciable lector, precisamente de eso de lo que me gustaría dedicar mis últimos párrafos, de hablar de: “los otros maestros”. 

    Cuando escucho que hay maestros que van a tener pensión y jubilación, que tienen salario mensual digno, seguridad social, cajas de ahorro, prestaciones superiores a las de la ley, que están sindicalizados, que tienen mejoras salariales, que están basificados, que tienen vacaciones pagadas, vales de despensa, prima vacacional, aguinaldo cada año, fiesta de fin de año, bonos, que generan antigüedad en su trabajo, que se pueden hacer de una vivienda, o que en caso de fallecimiento, discapacidad, o maternidad, tienen el apoyo que les corresponde por ley, cuando escucho todo eso, por un lado me alegra, porque los verdaderos maestros se lo merecen, se lo merecen todo por ejercer esa noble labor de hacer de los estudiantes personas de bien, de luz, de conocimiento, todo mi respeto y admiración para aquellos maestros que ponen un granito de arena en la formación de mejores estudiantes, mejores ciudadanos y mejores personas. 

    Por otro lado, quisiera decirle que, apreciable amigo lector, no todos los que son maestros gozan ni mínimamente de estos beneficios, alguien le debería decir a la CNTE que, bajo esta perspectiva, viven en una cuna de privilegios que pocos, muy pocos verdaderos maestros tienen actualmente. Posiblemente la CNTE no sepa que al día de hoy se gesta una larga lucha de maestros de la UNAM que son contratados por hora, que ganan apenas para vivir, con jornadas largas y horarios altamente flexibles, que no ganan lo suficiente para darle una vida digna a su familia y tienen que tener tres trabajos o más, que viven cada ciclo escolar con el temor de que tengan horas en este semestre pero quizás en el próximo semestre ya no, supongo que esta realidad alterna, que vive otro rubro de maestros, la CNTE lo ignora, y ellos sólo luchan por “sus maestros”, no por “los otros maestros”. 

    Parece incongruente, pero realmente cualquier profesor con condiciones como las ya mencionadas paupérrimas, terciarizadas y en condiciones laborales precarizadas, no se sentiría representado hoy por la CNTE, pareciera que hasta entre los maestros “hay niveles”, no son los mismos los del magisterio de educación básica pública que los maestros de educación superior pública de la UNAM o que los de educación privada, etc., así tan aberrantemente está fragmentada esta lucha por los derechos laborales y es tan desigual que es por ello que, por ejemplo, si yo soy un maestro de educación superior de escuela privada pauperizado que me pagan 85 pesos la hora, sin prestaciones, bajo un régimen fiscal de asimilado a salarios, sin derechos sociales ni a la vivienda, sin antigüedad, sin vacaciones pagadas, sin ni siquiera copia de contrato laboral, yo por ejemplo, yo   no me siento identificado con los maestros de la CNTE.

    Y es de esta magnitud la desigualdad entre los gremios de maestros, estamos los que por décadas y por vocación hemos dedicado nuestra vida a la docencia sin un futuro asegurado, y otro grupo que tiene y quiere más, y eso está bien, pero pareciera que se cumple esta frase del que se le da más al que más tiene y menos al que menos tiene, creando una mayor brecha de desigualdad. Convendría mirar también a “los otros maestros”, los que viven al día, a esos a los que una institución pública o privada les dice “hoy eres maestro, mañana ya no lo eres”, hoy te respalda una institución y te sellamos tu credencial, mañana yo no eres nadie, mañana ya no te resellamos tu credencial y ni siquiera te va a servir ni para tener descuento de transporte en vacaciones. Convendría conmoverse por lo menos del desamparo de estos maestros, que, tirados a la suerte de la oferta y demanda del mercado laboral, luchan por pagos por hora más dignos, que actualmente ni siquiera les permite cubrir la canasta diaria, su transporte o brindarles una vida digna a su familia. 

    Hay maestros con privilegios como los de la CNTE y los de la casta dorada de la UNAM, con sueldos exorbitantes, bonos, reconocimientos, categorías, y demás acumulados que sin duda terminan ganando más que la presidenta de la república, pero también están “los otros maestros”, que no ganan menos por contar con menos capacidades o menos grados de estudios, no, sino que ganan menos porque se han topado con instituciones educativas inmorales, que podrán tener una fachada muy bonita, pero que sus condiciones y exigencias son iguales de perversas. Que quede claro, no puede haber buenas instituciones educativas con salarios de miseria, no puede haber instituciones educativas de excelencia con condiciones laborales precarias o inexistentes para sus docentes. No somos ingenuos, “los otros maestros”, muchos trabajan por necesidad, pero la mayoría que he conocido trabajan por vocación, por un amor genuino a la enseñanza, verdaderos maestros no payasos, sino verdaderos maestros entregados en cuerpo y alma a sus estudiantes, no gañanes que se creen dueños y señores de las instituciones educativas, mafias educativas que dictan quien entra y quién no, quien concursa y quien no, a quien en este ciclo escolar se le colocará el mote de “maestro”, estará en la foto, se le felicitara el 15 de mayo, estará en el grupo de WhatsApp y tendrá la playera institucional y quién no.  

    Amigo lector, “los otros maestros” somos muchos, pero parece que somos invisibles. Por esos, por “los otros maestros” permítame alzar la voz. Somos los que habitamos en la mayor parte del sistema educativo en todos sus niveles, pero pareciera que no existimos. Pareciera que solo es maestro el que tiene plaza, no el que lleva 10 años firmando contratos cada ciclo escolar, sólo es maestro el que está en la nómina magisterial con su pago cada quincena, no al que le pagan en sobre amarillo al final de la impartición de la materia. Entonces, convendría preguntarnos ¿Qué es ser maestro hoy en día? ¿Acaso ser maestro lo define la contratación de una institución educativa? ¿Qué hay de la vocación?  Yo le puedo decir con convicción, que a mí no me define una institución, yo soy maestro esté de acuerdo o no una camarilla de dictaminadores, yo soy maestro porque así lo decidí desde hace más de 20 años, porque a la labor docente le he entregado mi vida, a pesar de los pesares de luchar incansablemente en contra de las injusticias laborales, en contra de los caciques sindicales, de las mafias universitarias, yo soy maestro porque así lo elegí, porque se me ha dado esa virtud divina de la enseñanza y el aprendizaje, porque siento tener un compromiso social, humano y ético con mi profesión como economista y el enderezamiento de su enseñanza que quedó toda inmoral y retorcida por el neoliberalismo. 

    Para finalizar, quisiera pedirle que piense, aunque sea un minuto en “los otros maestros”, que reflexione ahora con esta nueva visión sobre las demandas de la CNTE y sus formas, que no olvide a los pobres o, mejor dicho, empobrecidos maestros de la UNAM que llevan una larga lucha frente a estas injusticias cubiertas con el velo de la supuesta “autonomía” y que se repiten en las universidades autónomas en cada estado de la república. Hágame también un último favor, nunca dude de nuestra presidenta la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo, ella como usted y yo, está del lado correcto de la historia, ella es leal a su pueblo, recuerde que nuestro tata AMLO nos la encargó.

  • El PAN pierde todo

    El PAN pierde todo

    Mauricio Kuri, gobernador panista de Querétaro tiene todo el derecho a decir que no voten por Morena, como alguien de Morena tiene el derecho a pedir que no voten por el PAN, pero con la diferencia que no es necesario que el partido en el poder pida algo que ya está haciendo.

    La gente ya no vota por el PAN, cuyas simpatías populares van en declive y nadie las detiene. Al mismo tiempo, la militancia panista no ha crecido sino todo lo contrario. Un anuncio como el que hace el gobernador de Querétaro es un llamado de auxilio. Es el grito de alguien que ve que su barco naufraga.

    Sabemos que cuando se acabe de hundir la trajinera del PAN, uno de los primeros que va a tocar las puertas de Morena será Mauricio Kuri. Tiene amigos en Morena y si todavía milita en el partido en el poder Ricardo Monreal seguramente le dará la bienvenida como a todo náufrago que viene de otro partido.

    El hecho de que Mauricio  Kuri haya sido beneficiado por el gobierno de Morena, es algo casual, que no le impide defender su partido hasta el momento que considere necesario, lo que sí es urgente es advertir de la creciente falta de contenidos de un discurso panista que, para llenar huecos, tenga, en esa petición, una manera de darle solidez a sus palabras.

    La oposición en general y el PAN, en particular, no se ha caracterizado por tener oradores y menos aún discursos memorables. Sus declaraciones más sentidas en realidad se colocan del lado de la comedia, como aquel discurso de Santiago Creel dirigido a Andrés Manuel López Obrador en el que le aseguraba que si tocaba a un panista los tocaba a todos, a punto del llanto o del vómito.

    Los panistas mauricios Kuri y Vila son los más cercanos a Morena, uno en funciones, el otro ex gobernador de Yucatán. Nunca protagonizaron enfrentamientos con Morena  por más que pudieran esperar sus líderes un choque.

    Querétaro es, junto con Nuevo León, serán derrotadas por arrebatadas a la derecha para integrase en 2027 a la mancha guinda que crece en el país. 

    Acción Nacional tiene en sus militantes y líderes a sus peores enemigos, y la gente lo percibe como un partido que va de salida, no sólo por la falta de votos o de militantes sino por su manera de gobernar que pertenece, no al siglo pasado sino al antepasado.

    Su defensa a la vida, una de sus consignas clásicas, no se modernizó y sigue atorado en la lucha por prohibir el aborto, tanto que ya la naturaleza humana fue transformada por ellos, quines aseguran que los niños en México nacen a los 10 meses de embarazo.

    Con un líder corrupto que debería estar en la cárcel y senadores que están más cerca del delito que de la democracia, el PAN no puede hacer mucho por sí mismo y quiere tener contrincantes, lo cual, en su actual posición, es todo un lujo que no puede darse.

    Hay varios panistas presos, algunos investigados, otros huyendo de la justicia y otros más amparados en el fuero para evitar la cárcel.

    El PAN exige una refundación, que dejaría a muchos fuera del partido, si tomamos en cuenta que apenas y cubre su cuota mínima de militantes, lo que podría ser una refundación se convierte en una desaparición, porque se quedaría sin registro.

    El PAN está entrampado, lo único que le queda es gritar contra el contrincante para que no crezca más ya que en lugar de avanzar en las elecciones retrocede.

  • “Pajarito, pajarito”

    “Pajarito, pajarito”

    La fotografía es icónica. Centenares de personas rodean al presidente Andrés Manuel López Obrador, quien para llegar al Zócalo ha tenido que caminar muy lentamente, a la velocidad que lo han permitido centenares de personas que quieren estar cerca de él, que hacen cualquier cosa por saludarlo, por tomarse una selfie. Decenas de brazos con celulares en mano se alzan dirigiéndose al presidente: son los tentáculos de un enorme y amigable pulpo. Cerca de él, exhaustos, van algunos funcionarios de su gabinete. Atrás, sonriente y agotada, está Claudia Sheinbaum, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, que ya se perfila como la próxima presidenta (¿quién si no ella para continuar la épica odisea?). También se alzan las cámaras fotográficas y alguna de cine; la tuba y los platinos se confunden con los sombreros que protegen del sol, pero aún no llega la música, pues parece esconderse tras las banderas de Morena. No falta el verde, blanco y rojo de nuestras banderas, como tampoco las gorras de colores, las boinas, un casco de motociclista. Al fondo, un cartón verde escrito a mano reza: “La paz es fruto de la justicia”.

    La fotografía es icónica. Por eso el presidente la pidió para la portada de su libro ¡Gracias! Su autor, Luis Antonio Rojas, es un joven fotoperiodista nacido en Aguascalientes. Como él, la mayoría de la gente es joven; los viejos nos hemos rezagado y hay muy pocas cabezas calvas. Yo casi lo estoy… y por ahí andaba, pero no tan cerca como para aparecer en la foto, ya que Eva, mi hijo Sergio y yo mejor nos regresamos hasta el Palacio de Bellas Artes buscando una sombra o un refugio para sentarnos; y sí, encontramos un pasto y desde ahí pudimos ver y oír el discurso en una gran pantalla. 

    En la camisa del político tabasqueño está lo más blanco de la curva tonal de la instantánea. Andrés Manuel es el punto de enfoque, si bien hay una gran profundidad de campo y se aprecia todo, hasta la sonrisa de algunas o el cansancio de otros. Lo que no entiendo es cómo un dron pudo captar un signo de interrogación en la cara del presidente. Parece que desde arriba le hubieran gritado “pajarito pajarito”. Es la magia del fotógrafo que captura ese momento del 27 de noviembre de 2022, cuando la marcha convocada por el presidente alcanzó una afluencia que superó con mucho el millón de personas. La multitud parece girar en torno al personaje que logró lo imposible: sacar a nueve y medio millones de la pobreza. Nada más… o sí, ya que falta que el Inegi actualice la cifra y sume los datos de 2024. 

    Todavía se pueden ver dos o tres cubrebocas, reminiscencia del covid-19 que puso en jaque al mundo entero. Pasaron años para que llegara Andrés Manuel a la Presidencia y parece que también hubieran pasado décadas para que él pudiera llegar al templete donde habría de decir sus palabras y agradecer el apoyo de su pueblo.

    Tenemos ahora una gran presidenta, pero seguimos extrañando al viejo incansable, al de aquella marcha en la que yo estaba al borde del infarto, aquella marcha en la que conocimos al joven apodado el Cuatroté, que venía de Zacatecas de ida y vuelta para regresar al trabajo, el muchacho que no tenía pulgares y saludaba orgulloso con sus cuatro dedos. Aquella marcha en la que también encontramos a una aguja en un pajar llamada Tania.

    ***

    Claro que hay quienes quisieran ver preso a López Obrador y sin pruebas lo acusan de relacionarse con el narco o de negligencia criminal e incluso de genocidio, quizá por la pandemia, sin entender que los compatriotas que murieron al contraer el SARS-CoV-2 tenían la comorbilidad de la obesidad, la comorbilidad de la diabetes, la comorbilidad de la hipertensión arterial, debido a las pésimas prácticas alimentarias provocadas por el contubernio de políticos neoliberales con las empresas de comida chatarra, que nos dejó sin suficientes médicos especialistas, sin suficientes hospitales. Esos críticos insufribles no se dan cuenta –o no quieren hacerlo– de que se concluyeron o construyeron 90 hospitales, se atendió a la gente infectada y se vacunó a la población en tiempo récord, y se desbarató un entramado de empresas corruptas que en medicinas se robaban miles de millones de pesos al año.

    Los pejefóbicos –los que afirman serlo y los que no– acusan también a AMLO de no atender la delincuencia, de dejar vía libre a los narcotraficantes y, con el “argumento” de que saludó a la mamá del Chapo o de que liberó al Chapito, no quieren ver más allá de sus narices o de las narices de Aristegui, Reforma, Proceso o El Universal. Quieren meter al bote al presidente que logró detener la bola de nieve de los asesinatos e incluso los redujo en 10 por ciento. Ellos solo hablan de números absolutos, como absoluta es su… falta de razón.

    ***

    Me hubiera gustado conocerlos. Sé que eran jóvenes y que trabajaban por una ciudad mejor, por un país mejor, pues siempre fueron dos luchadores sociales muy inquietos. Pero los seres humanos podemos ser sublimes o nefandos. Ximena, José: ojalá se logre hacer justicia. Ojalá que sus familiares y amigos encuentren la paz que ustedes siempre buscaron.

  • La salud es primero

    La salud es primero

    La responsabilidad del Estado respecto a la salud de toda la gente, ya es ineludible. La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos la establece como un derecho.

    Sin embargo, en algunas entidades del país este derecho es conculcado con cinismo irresponsable que debería calificarse como un delito porque cuesta vidas y sufrimiento a muchas familias.

    Esta situación se repite en estados con gobiernos de cualquier origen partidista. No hay diferencia y las deficiencias generalmente son producto de priorizaciones producto de intereses, públicos y privados, que son menos legítimos que la salud de las personas.

    Realidades como esta provocan gastos mayores al sector y a los enfermos y sus familias junto con agravamiento y muerte en muchos casos.

    Es inadmisible que habiendo un incremento de casos de cáncer en Tabasco, se prefiera usar 100 mdp en espectáculos gratuitos para incrementar la asistencia y el consumo, especialmente de alcohol durante “La Feria”, que en la compra de un equipo avanzado de terapia de radiación y los pacientes tengan que ser trasladados a Yucatán para ser atendidos saturando aquellos espacios y ralentizando la necesaria inmediatez de la atención, con los consiguientes riesgos mortales de los enfermos.

    De acuerdo con información del Organismo Internacional de Energía Atómica de la ONU, un equipo de este tipo cuesta entre 3 y 5 mdd, lo que significa alrededor de 60 y 100 mdp. En Tabasco se ha preferido gastar en espectáculos gratuitos propiciando el consumo de alcohol, que comprar y reequipar los hospitales con equipos de este tipo, que pueden salvar a más de 1,300 personas por año, cifra de enfermos que va en aumento y cuya atención y salud no está garantizada.

    En tanto esto ocurre, el personal del IMSS se multiplica para lograr trasladar a sus pacientes lo más pronto posible a Yucatán para salvar sus vidas. Ahí se presentan doctores como el Dr. Chablé, el Dr. Morquecho, el Dr. Xala, el Dr. Mayorga, la Lic. Mónica Jesús Rangel, la Lic. Lidia Calderón Castro, la Lic. Karen Martínez y un número de compañeros que es difícil conocer, pero a quienes puede deberse haber salvado varias vidas.

    Sería interesante y muy importante que los gobiernos de los estados y la propia Presidencia de la República se ocuparan responsablemente de estas situaciones.

    Que la CNTE proteste, es extraño en la actual coyuntura de agresión constante contra el Gobierno de la República y distrae la atención de problemas mayores que precisan atención en la inmediatez y hacen sospechar de complicidades con fuerzas comprometidas con la derecha transnacional imperialista.

    Personalmente apoyo la lucha de los maestros y de la CNTE, pero creo que es necesario ser razonables y evitar ser infiltradis y abrirse al diálogo abierto de frente al Pueblo.

  • A unos días de la elección: ¿Qué hacer?

    A unos días de la elección: ¿Qué hacer?

    “… a diferencia de antes, en donde supuestamente había una Carrera Judicial… pero en realidad no hacían examen; o si los hacían, ya venía la orientación, porque si no: ¿cómo explica uno que la mitad del Poder Judicial sean amigos, primos, hermanos, que haya nepotismo en la mitad del Poder Judicial? Ahora va a ser distinto, quien va a elegir es la gente. Y la gente tiene que informarse de cómo van a ejercer su voto. Entonces, es muy distinto, antes decidía a los ministros y a las ministras, el presidente; y en mi caso: yo renuncié a que la presidenta decidiera a los ministros, ¿para qué?, para que lo decida el pueblo, esa es la diferencia. Entonces, ahora la gente va a decidir y tiene que informarse para poder ejercer su voto…”.

    Presidenta Claudia Sheiunbaum Pardo.
    Conferencia Matutina del Pueblo. 22 de mayo de 2025.
    https://youtu.be/Ymw_2o1q_yM Segmento 36:31/37:17

    Estamos a menos de una semana de volver a ir a las urnas para elegir a quienes participarán en la construcción de un nuevo Poder Judicial. Creo que las tareas a desarrollar son diversas.

    Primero. Contribuir en nuestro entorno a que se contrarreste la narrativa de la fachiza en el sentido de desanimar nuestra concurrencia a las urnas o de plano llamando a no votar. Bajo diversos argumentos como lo “difícil que será elegir”, “la escasa información acerca de cómo votar”, “por quiénes vamos a votar”, etc. Pero también identificar a los personajes que esa derecha golpista quiere hacernos pasar como dice el dicho popular “gato por liebre”, es decir a muchos impresentables que están siendo recomendados en diversos medios corporativos y en redes socio digitales. Tengamos cuidado.  

    La consigna debe ser ¡Vamos a votar masivamente, por quienes son garantía de transformación en el único poder del Estado mexicano al que no habían llegado los tan anhelados cambios! 

    Segundo. Informarnos para saber cómo llevar a cabo el ejercicio de nuestro voto. Lo cual ahora, más que en otras elecciones, es de muy alta responsabilidad. Tan solo hagamos una sumatoria de las y los candidatos a elegir en cada una de las seis boletas, 4 nacionales y dos regionales, más las tres que nos distribuirán en las casillas correspondientes a la elección local, a realizarse de manera concurrente en 19 entidades del país, incluida la CDMX y tendremos la conciencia de la importancia que cada votante tiene en este proceso electoral. 

    En las primeras seis boletas serán 37 votos, en las segundas tres boletas 17, total 54 votos por cada ciudadana y ciudadano. Nota: esta cantidad puede variar tomando en cuenta la sección de que se trate. Una buena práctica llévenla a cabo en el sitio del INE: https://ine.mx/conoceles-practica-y-ubica/  Así como en el del Instituto Electoral de la CDMX. https://www.iecm.mx/www/sites/poder_judicial/conoce_tus_boletas.html  En el caso de las otras 18 entidades busquen la información respectiva en las páginas de los organismos públicos locales electorales. 

    Tercero. Revisar los perfiles de candidatas y candidatos en las páginas de los organismos electorales poniendo especial atención en el curriculum vitae de cada persona candidata, puesto que ahí podremos saber en dónde y con quiénes ha colaborado. Esa información es relevante que la consultemos para saber de quién se trata el o la candidata. Sin embargo, esta revisión podría complementarse con la que numerosos medios alternativos han compartido, y lo siguen haciendo, de muchas y muchos prospectos. Tratemos de acercarnos a fuentes confiables.

    En los medios alternativos a los de desinformación y de la fachiza en redes socio digitales, se está sugiriendo la posibilidad de completar nuestras preferencias eligiendo a personas candidatas tomando en cuenta el comité de evaluación en el que más confianza tengamos. No olvidar que junto al número de cada persona candidata se encuentran las iniciales PE (Poder Ejecutivo), PL (Poder Legislativo) y PJ (Poder Judicial), las cuales corresponden a cada uno de los comités de evaluación integrados en los términos del artículo 96 de nuestra Carta Magna. 

    “… conformación por parte de cada uno de los tres Poderes, de Comités de Evaluación los cuales recibirán los expedientes de las personas aspirantes, evaluarán el cumplimiento de los requisitos constitucionales y legales e identificarán a las personas mejor evaluadas que cuenten con los conocimientos técnicos necesarios para el desempeño del cargo y que se hayan distinguido por su honestidad, buena fama pública, competencia y antecedentes académicos y profesionales en el ejercicio de la actividad jurídica. 

    Con todo lo antes sugerido estaremos en posibilidades de elaborar nuestro “acordeón”, el cual sin ningún problema podremos llevar el 1 de junio a la casilla que nos toca para colocar los números de nuestras preferencias en cada uno de los espacios y boletas correspondientes.

    Finalmente, como lo ofrecí en mi entrega anterior voy a mencionar algunas personas candidatas impresentables a las cuales mejor hay que evitarlas, tales como: Ulises Carlín de la Fuente, Magda Zulema Mosri Gutiérrez, Mauricio Flores Castro, Enrique Figueroa Ávila, Luis Espíndola Morales y otros más.

    • Ulises Carlín de la Fuente. Candidato a ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Propuesto por el comité de evaluación del Poder Legislativo. Procurador Fiscal de Nuevo León durante la gubernatura de Jaime Rodríguez Calderón y actual Consejero Jurídico del Titular del ejecutivo estatal. En 2023, Ulises Carlín fue incluido en la denuncia que hizo el Congreso de Nuevo León, por presuntamente falsificar documentos que le permitieron al gobernador Samuel García, solicitar una licencia para separarse de su cargo y participar en las elecciones presidenciales. Tras estas acusaciones, el partido MC, suspendió la candidatura de García Sepúlveda y terminó por designar a Jorge Álvarez Máynez. Fuente: https://diariobasta.com/2025/04/09/ulises-carlin-busca-puesto-en-la-scjn-mientras-enfrenta-acusaciones/
    • Enrique Figueroa Ávila. Candidato a magistrado de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). Propuesto por el comité de evaluación del Poder Judicial. Se desempeñó como asesor jurídico en diversas áreas de la Secretaría de Gobernación (1995-1999), durante el gobierno de Ernesto Zedillo. Fuente: https://www.te.gob.mx/front3/bulletins/detail/22130/3  Información que se omite en su perfil publicado en la página del INE, conóceles, sección Actividad Profesional. 
    • Luis Espíndola Morales. Candidato a magistrado de la Sala Superior del TEPJF. Propuesto por el comité de evaluación del Poder Judicial. Consejero en el Instituto Electoral del Estado de Querétaro. En 2020 el Senado de la República lo designó Magistrado de la Sala Regional Especializada del Tribunal Electoral. Actualmente, es Magistrado Presidente de la misma. Espíndola, vean que contradicción, se convirtió en el primer candidato denunciado por actos anticipados de campaña, al iniciar la difusión de la boleta electoral para la Sala Superior, cargo al que aspira, promoviéndose, a fines de febrero del 2025, con el número con el que aparece y por el que la ciudadanía podría votar. Fuente: https://www.milenio.com/politica/denuncian-luis-espindola-morales-actos-anticipados-campana

    Otros casos que engrosan la lista de aspirantes impresentables incluyen a jueces y magistrados con decisiones y antecedentes controversiales.

    • Samuel Ventura Ramos. Absolvió a 24 implicados en el ataque a normalistas de Ayotzinapa. Candidato a juez de Distrito. Postulado por el comité de evaluación del Poder Judicial. 
    • Carlos López Cruz. Exoneró al hermano de Carlos Salinas de Gortari por enriquecimiento ilícito. Candidato a magistrado de Tribunal Colegiado de Circuito. En funciones. 
    • Edgar Agustín Rodríguez Beiza. Denunciado por una estudiante por presunto abuso sexual. Candidato a magistrado de Tribunal Colegiado de Circuito. Postulado por el comité de evaluación del Poder Judicial.
    • Rocío Luna. Favoreció judicialmente a un agresor sexual. Candidata a magistrada de Tribunal Colegiado de Circuito. Postulada por los tres comités de evaluación. 
    • Belem Bolaños Martínez. Liberó a presuntos implicados en una desaparición forzada. Candidata a magistrada de Tribunal Colegiado de Circuito. Postulada por los tres comités de evaluación. 
    • Juan José Hernández Leyva. Concedió prisión domiciliaria a Jesús Murillo Karam. Candidato a juez de Distrito. En funciones. 
    • Gustavo Aquiles Villaseñor. Permitió la liberación de Juan Collado. Candidato a magistrado de Tribunal Colegiado de Circuito. Postulado por el comité de evaluación del Poder Legislativo. 
    • José Avelino Orozco Córdova. Ordenó la liberación de detenidos pese a pruebas contundentes. Candidato a juez de Distrito. En funciones. Fuentes: https://elsoberano.mx/2025/05/19/candidatas-y-candidatos-con-antecedentes-oscuros-ensombrecen-la-eleccion-judicial/ y perfiles INE. 

    Al igual que lo confirmamos con las personas candidatas mencionadas en el artículo de la semana pasada, volvemos a identificar que existe preferencia por obtener espacios en instancias claves del Poder Judicial como lo son la SCJN y el TEPJF. Pero también los hay para distintas magistraturas de circuito y juzgados distritales. 

    Nos vemos el domingo 1 de junio. Recordemos nuestro compromiso para que la transformación llegue al Poder Judicial ¡Votar masivamente!

  • México: una partida donde nadie quiere empatar

    México: una partida donde nadie quiere empatar

    Esta semana fue un parteaguas para la política nacional. Sin duda, los dos temas que concentraron la agenda pública fueron aquellos que, sin exagerar, marcarán un antes y un después en nuestro país. Algo así como si comenzara una nueva y compleja partida de ajedrez.

    El ajedrez no es solo un juego de estrategia, es un lenguaje silencioso donde cada pieza tiene un rol específico, una jerarquía y un propósito. El rey, aunque central, es lento y vulnerable; la reina, poderosa y versátil, mueve los hilos con fuerza. Los alfiles y caballos son impredecibles, mientras que las torres representan estructuras firmes. Pero son los peones, los más subestimados, quienes abren la partida y muchas veces la definen. En política, como en el ajedrez, las jugadas apresuradas, los movimientos impulsivos y el desprecio por las reglas terminan por volcar el tablero. Esta semana, México pareció sumido en una partida rota.

    Todo comenzó con el trágico y condenable asesinato de Ximena Guzmán y José Muñoz, los colaboradores más cercanos e importantes de la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada.

    Quienes planearon el atentado lo hicieron de una manera tan minuciosa que no solo eligieron a una secretaria particular y a un coordinador de ascensores. Escogieron a la familia política de la mandataria capitalina, y me atrevo a decir que a la mitad del cerebro del gobierno de la Ciudad de México.

    Mucho me he sentado a reflexionar sobre el tema. Evidentemente, como en cualquier episodio de esta magnitud, las especulaciones abundan. En mi reflexión, pensé que tanto Xime como Pepe fueron observados desde mucho antes de que siquiera se decidiera que serían ellos las víctimas. Como reportero de la fuente capitalina, tengo miles de videos de los distintos eventos públicos en los que estuvieron presentes, entre la gente, siempre discretos.

    Ya más tranquilo, entendí que quienes decidieron atentar contra ellos no fueron simples observadores de asambleas o actos públicos. Ellos tenían un perfil bajo: acercaban el agua, entregaban las tarjetas informativas, hacían el trabajo que a simple vista parece rutinario y simple, que si en algún momento faltaran habría quien lo supliera. Pero su lugar en el ajedrez político era vital.

    Quien eligió que fueran ellos quienes pagaran con su vida el costo del mejoramiento de la ciudad, fue alguien que conocía a fondo los engranajes del poder capitalino. Alguien que sabía que para llegar a Clara Brugada, primero había que pasar por Xime y por Pepe.

    Por ello, con profundo respeto, me atrevo a decir que en el tablero político su muerte equivale a la caída de un alfil. Después del rey y la reina, son de las piezas más importantes. No siempre visibles, pero imprescindibles para proteger a quien lidera. Su ausencia deja vulnerable el flanco más delicado del poder.

    Del otro lado del tablero se encuentra la CNTE. Una organización con larga trayectoria en la lucha social, formadora de conciencia y base de lo que llevó al movimiento de la Cuarta Transformación al poder. Porque Morena no es solo un partido: es un movimiento.

    Durante años, la CNTE ha sido reconocida por su habilidad política, su fuerza en las calles y su legitimidad como voz del magisterio. Sin embargo, esta semana actuaron más como caballos desbocados que como estrategas. Perdieron la oportunidad de sentarse con la presidenta Claudia Sheinbaum por tomar una decisión impulsiva: agredir a periodistas cuando ya tenían una reunión pactada.

    A pesar de que, por primera vez en la historia moderna del país, un gobierno les ha abierto la puerta al diálogo y ha puesto propuestas concretas sobre la mesa, la CNTE eligió la imposición antes que la negociación. Como en una partida de ajedrez en la que un jugador sacrifica piezas sin calcular las consecuencias, sus movimientos recientes parecen estar guiados por el enojo más que por la razón.

    El problema de actuar sin estrategia en un tablero político es que se corre el riesgo de convertirse en un peón que se mueve sin dirección, o peor, en un caballo que salta por impulso pero termina acorralado. Porque en política, como en el ajedrez, no gana quien grita más fuerte, sino quien piensa con más calma.

    Y al final, tal vez lo que realmente deberíamos preguntarnos es: ¿quién mueve las piezas que nadie ve? ¿Quién diseña los ataques que parecen espontáneos? ¿Y cuántas partidas se están jugando, mientras nosotros solo alcanzamos a ver un fragmento del tablero? Esto sin sumar a la estrategia al nuevo embajador norteamericano que se caracteriza por ser integrante de Fuerzas Especiales y de la CIA.

  • Trastornados

    Trastornados

    Agraviosa y maltrecha, monstruosa y contrahecha, a la derecha estrecha de este gran país ya no le queda más margen de acción que festejar tragedias. Los conservadores mexicanos quieren que a la mayoría de la gente le vaya mal, nos vaya mal. Su flamante Proyecto de Nación puede expresarse con nueve palabras: que todo se vaya al carajo para poder celebrarlo. Eso es lo único que le queda de sustancia a su ideología: el goce por el fiasco ajeno, el rechazo al bienestar colectivo, la esperanza de que la desilusión cunda, la negación sistemática del cambio… ¿Cómo llamar a este raquítico ideario?

    • Si la intención es enfatizar la falta de proyecto y su descarriada pulsión de muerte: conservadurismo nihilista. Aunque, ojo, bien podría decirse que es un oxímoron: se venden como defensores del orden, pero su práctica es el sabotaje. Así, más que desventaja tendría la prerrogativa de resaltar la hipocresía esencial de la derecha gacha. Ahora que si preferimos esquivar la aparente contradicción podemos usar conservadurismo tanático —el filósofo español Miguel Morey ya usó tanatopolítica para hablar de los regímenes que administran la muerte, como los fascistas—. El término subraya el hecho incuestionable de que, en lugar de proponer, su obsesión es destruir, negar o paralizar…
    • Si quisiéramos aludir esa actitud que no propone, sino que castiga: reaccionarismo punitivo, etiqueta que, aceptémoslo, podría ser tachada de pleonasmo, porque, efectivamente, toda postura reaccionaria es esencialmente punitiva y todo castigo, cualquier venganza es, necesariamente, reaccionaria.
    • Rencorismo: destaca que se trata de una ideología que se alimenta del enojo hacia los avances ajenos y captura la esencia de una posición política basada en el resentimiento, la nostalgia agria y la celebración del fracaso comunitario. Tiene algunas ventajas: precisión emocional, porque evoca el odio como motor ideológico —no sólo desacuerdo, sino gozo malintencionado—; resonancia histórica: resuena al ressentiment de Nietzsche —el rencor como política de los débiles que idealizan el pasado para negar el presente—; y evidencia la condición de una élite que, al sentirse desplazada, abandona cualquier proyecto y se dedica a sabotear el ajeno.
    • Derecha entrópica o ya de plano entropismo prianista: proyecta que solo se intenta generar desorden, caos o regresión. Combina Física —entropía, caos irreversible— con Política para describir una corriente que no sólo intenta oponerse al cambio, sino que se esfuerza por impulsar el desánimo y la degradación social.
    • Considerando que la oposición y sus esbirros atacan cualquier programa social de la 4T no porque lo consideren ineficaz, sino porque destruye su relato de que México debe seguir siendo el país del eterno sacrificio: miserabilismo hostil. Recalca la agresividad activa contra el bienestar ajeno, sobre todo el de los estratos sociales más desprotegidos.

    Llamémosla como la llamemos, la insatisfecha derecha mexicana ansía desdichas: que míster Trumpetas imponga aranceles, que se devalúe el peso, que el PIB se estanque, que nos pegue feo otro huracán, que se pare el metro, que los gringos impongan un impuesto a las remesas, que mañana maten a más gente, que haya recesión… Extasiados, celebraron el accidente que sufrió el Buque Escuela Cuauhtémoc en Nueva York y, claro, echaron culpas: antes nunca había pasado, luego entonces es culpa de la 4T o de Morena o de la presidenta… Insaciable de ruinas, la derecha facha desea con toda el alma que ocurran infortunios para poder parar el dedo y señalar culpables. Accidentes, fenómenos naturales, efectos dominó, pero sobre todo la enorme cauda de saldos que seguimos pagando como inercia de los pésimos gobiernos neoliberales, de todo hay que pasarle la factura a los morenacos y sus gobiernos de quinta… Así que también cabría tildar su ideología como catastrofismo inculposo, frase que destaca su adicción al apocalipsismo crónico discursivo y su compulsión por culpar al adversario. Así que, bien pensado, no estaría mal diagnosticarlos: la oposición de este país sufre de Trastorno de Catastrofización Inculposa (TCI):

    • Delirio de atribución omnidireccional
      • creencia patológica de que todo evento adverso (desde la inflación hasta los huracanes) es culpa exclusiva del gobierno en turno.
      • incapacidad para reconocer variables estructurales o herencias históricas.
    • Sesgo de confirmación catastrófica
      • sólo tienen capacidad de registro para las noticias negativas que validen su narrativa.
      • desarrollan una capacidad alquímica de transformar las buenas en pésimas noticias.
      • amnesia selectiva institucional: borrado de memoria histórica.
    • Neurogoce patriófobo crónico o Placer del Patriota Invertido: placer neuroquímico al presenciar fracasos ajenos, sobre todo cuando perjudican al país y pueden dar pie a acusar de causante al “mexicano típico”.
    • Examen de laboratorio (retórico): prueba de proyección: “Lo que usted llama ‘fracaso de la 4T’, ¿no será en realidad la metástasis de sus propias políticas fallidas o quizá la proyección delirante de sus deseos?”

    Coda

    En un aquelarre convocado por Latinus, rodeado de otros odiadores exintegrados y ahora apocalípticos a rabiar, Héctor Aguilar Camín, refiriéndose al asesinato de los funcionarios del gobierno de la CDMX, se aventó esta alhaja: “… esta ciudad ya no es más una excepción, por más que la hayamos imaginado. Es algo que sucede todos los días en otras ciudades de México. O sea, nos estamos mexicanizando en la Ciudad de México”. ¡Sopas aztecas! No es posible escatimar el logro: al chetumaleño novelista se le salió una de las expresiones más extremas del malinchismo conservador. Si alguna ONG financiada por el gobierno norteamericano otorgara la Medalla Cum Laude al Malinchismo, ya la estarían presumiendo en la portada de Nexos.

    • @gcastroibarra
  • David Lerma y la Bostik. Abran esa puerta

    David Lerma y la Bostik. Abran esa puerta

    Busco una grabadora portátil china perdida en el sopor del tiempo ido, con un reproductor de cintas y una pequeña bocina, que era nuestra asidua compañera en las tardes de desazón, o de alegría espumosa, cuando nos juntábamos en el tronco arrumbado en la banqueta -que servía de salita de estar- con vista a la Secundaria Diurna, No 40 “Don Melchor Ocampo”; entonces sonaba una y otra vez un casetito que compré en los puestos de San Juan de Letrán, de lo estricto personal, con una portada que parecía hecha en una hoja de cuadro chico arrancada de un cuaderno, al que dicen que Fausto Arrellín -cuando el ex músico de la banda de Rockfrigo González trabajaba en discos Pentagrama- le plasmó un logo sin duda ochentero, que advertía: Bostik. “Abran esa puerta”.

    Dicen que después del Mundial de México 86, allá por los rumbos de Tlanepantla, unos dicen que, en una bodega de impermeabilizantes que llevaba ese nombre, otros que, en una fábrica de engrapadoras, y otros más que en una azotea llena de botes gigantes, ensayaba un grupo de verdadero rock urbano, esencia de la mismísima y rota banda, y que por la referencia del lugar -donde brotaba como en manantial la música hacia las calles aledañas-, les comenzaron a llamar: “los de la Bostik”.

    Estoy en Monterrey, a mil kilómetros de la Catedral del rock urbano en México, la célebre Arena Tlalnepantla, dónde son famosos e icónicos los conciertos de cada primero de mayo, el día de los trabajadores, cuando la banda tiene un día de descanso oficial y obligatorio, y existe la dicha de un domingo entre semana, además hay dinero para el flan y la cerveza en bolsa, pues se reparten utilidades en las fábricas y es quincena. 

    Veo en las redes sociales, en tiempo real con melancolía y un profundo sentimiento de tristeza, pero a la vez contagiado de esos anhelos que produce la colectividad moviéndose hacia un mismo destino, decenas de personas del barrio que hacen fila para brindar la tarde del 19 de mayo un hasta siempre al Jefe de Jefes del rock urbano, David Lerma “el Guadaña”. Cómo quisiera estar ahí. Busco a mi lado pero no hay nadie con quien compartir la oleada de recuerdos que nos dejaron todos las tocadas con la Bostik, ni un alma con quien brindar o quien llorar. Chale. El Jefe Apache cabalga apacible a la eternidad con su gran penacho que se refleja y deslumbra, o más bien incendia la puerta celestial. La música vuelve a sonar treinta años después en aquel tronco banquetero que ahora es leña, y la canción es la misma: “Abran esa puerta”.

    Busco a más de 40 grados una señal, una canción. A los funerales de David Lerma llegan Luis Álvarez “el Haragán”; el maestro del blues Juan Hernández; y por supuesto no faltan los originales de la banda: Eduardo Cruz Martínez “Lalo Blues” y Carlos Godínez “Chalie Bostik”, (alejado de los escenarios del rock urbano pero vigente en el rock cristiano, a quien seguramente “el Guadaña” mira alegre por su compañía entrañable en la hora final). La banda corea los clásicos: “Viajero”, Voy recorriendo todo un camino de experiencia/ De hambres y desolación/ Mas no me importa esta vida la vivo como venga/ Esa es mi determinación/ Voy exponiendo mi vida con tanta frecuencia/ En caminos de perdición/ Trampeando el tren me encuentro/ hoy ponchando un cigarro/ Burlando voy la migración… en el ataúd de Lerma sobresale una Biblia y decenas de flores. La mezclilla y el cuero negro, las playeras de la Bostik Band y de otras bandas citadinas uniforman -un ambiente más bien festivo, nostálgico pero muy sincero-. Se ha ido no un ser extraño sino un carnal de la familia; hay abuelas, tías, madres, niños, y chavos, todos valedores de la voz que se apaga, una voz potente, sencilla, humilde, reventada e irreverente -pero cariñosa siempre con los suyos-, desde el barrio para el barrio. 

    No encuentro la respuesta a las preguntas de la vida sin respuesta, visito una revista de los noventas: David Lerma “el Guadaña” en una fotografía, debe ser un sábado por “el Chopo”, el gran Jefe mira a la cámara, no está posando, solía vérsele en las esquinas de callejones y calles del barrio tal cual, la mirada es desafiante al porvenir, la pared está tapizada de carteles de lucha libre y del próximo concierto de la Bostik. Al lado del “Guadaña” un hombre sentado en la banqueta también mira la cámara, un paria, un desterrado, un vendaval sin rumbo, quizá un poeta callejero con las botas sucias y una bolsita de hules con sus pertenencias, un ángel caído del cielo… El personaje que acompaña al gran Jefe y que quizá lo acompañó en las postrimerías de esa noche parece musitar la frase de Bob Dylan: “Cuando no tienes nada, no tienes nada que perder”.

    David Lerma le cantó sin mediaciones a los expulsados de los paraísos, a los hijos de nadie, a los otros. Sus rolas son himnos, le cantó a los migrantes muy antes que la globalización también los convirtiera en tema; también a los prófugos, las hijas descarriadas, las madres que sufren por el chavo que nunca regresó, los ladrones del barrio, los estudiantes caídos en la masacre de Tlatelolco, al Cristo del barrio, a la falsa sociedad. Decía también Bob Dylan que “las canciones me llegan cuanto más aislado estoy en el espacio y en el tiempo”, no puedo tomar el Metro o la pecera y llegar al “Lienzo Charro de Pantitlán”, al Centro Cívico de Ecatepec, o a Zapotitlán, ni hundirme en la borrascosa tarde sin fin de siempre en domingo de las maratónicas tocadas donde Lerma siempre arengaba “Viva México cabrones”; ni siquiera puedo recibir una palmada en el hombro por la partida de un carnal muy próximo para ovejas descarriladas… pero, ¿Quién nos podrá alejar de los latidos del corazón del blues que ha retumbado acompañándonos en buenas y malas bajo el cantico de: “¡abran esa pinche puerta y déjenlos pasar!”

  • Por una izquierda ambidiestra que sea más de derecha

    Por una izquierda ambidiestra que sea más de derecha

    Eso de ser de izquierdas está muy bien porque, honestamente, nadie en su sano juicio se puede presentar como de derecha. Es decir, hace falta una oligofrénica oligofrenia para sostener que se es de derecha sin darse un tiro en la sien inmediatamente. De ahí que abunden los eufemismos —máscaras—  para la gente de derecha, conservadores, liberales, patriotas, defensores del orden, libertarios, etc. Quien desde la derecha se presenta como de derecha es un reaccionario… la crema y nata de los conservadores y —para bien o para mal— en el espectro político hay pocos reaccionarios. Sin embargo, no hay mejor careta para alguien de derecha, que presentarse como de izquierdas, porque quien se proclama de izquierdas inmediatamente adquiere un halo de sacralidad que lo autoriza para ejercer toda autoridad como lo haría el más derechoso de la derecha sin que nadie le diga nada. Al menos, mientras sigan creyendo que es de izquierdas.

    Y es que hace falta un vulgar cinismo cínicamente vulgar para manifestarse en contra de la intención de transformar a México por la vía pacífica y electoral para dejar atrás el modelo de corrupción y privilegios y construir el bienestar y la felicidad de nuestro pueblo; en contra de pensar que cuando hay honestidad y la economía se riega desde abajo, hay resultados; en contra de cree que el dinero y el poder no son el éxito de una persona, sino lo es su legado en la lucha por los derechos del pueblo de México, la democracia, las libertades y la patria; para manifestarse a favor del exceso de pragmatismo sin principios; de la frivolidad, el consumismo y la ambición por el poder y el dinero; a favor del amiguismo, el influyentismo y nepotismo; en contra de la organización desde abajo; a favor de la colusión con la delincuencia, organizada o de cuello blanco; en contra de arrodillarse frente al poderoso; en contra de que el fin nunca justifica los medios, pues si en el camino se pierden los principios, será difícil recuperarlos; o en contra de entender el poder como humildad; como reza la carta que la presidenta, Claudia Sheinbaum, mandó simbólicamente a Morena. Sostener, públicamente, lo contrario implica inmolarse en el altar del descaro.

    Para fortuna de la afortunada clase política mexicana, que es de una izquierda nominal, la demagogia permite la entronización de una izquierda ambidiestra que se conduzca por la derecha. Para muestra unos cuantos botones, una cosa es manifestar en el papel que se condena el exceso de pragmatismo, y otra es dejar de tejer alianzas con el Partido Verde, los Alejandro Murat, los Adrian Ruvalcaba, los Eruviel Ávila, los Manuel Espino, los Rommel Pacheco, los Sergio Mayer, o los José Chedraui, por mencionar algunos. Y es que nos está peleado declararse en contra del nepotismo y postergar la aprobación de la ley anti nepotismo hasta 2030. Desde luego que se está en contra de la colusión con la delincuencia, organizada o de cuello blanco, pero se apoya incondicionalmente a Rocha Moya y a Cuauhtémoc Blanco. Por último, y digo último por decir algo, porque la lista podría continuar, nada de arrodillarse frente al poderoso, el poder hay que entenderlo como humildad, eso sí, sin renunciar a prácticas de escarnio y humillación como la de ofrecer disculpas públicas a su alteza serenísima en el Senado de la República, sin que ello signifique que se está de acuerdo con el actuar del abogado que lo agredió en el AICM, seremos muy de izquierdas, pero las prácticas palaciegas y saborear las miles de tener a los súbditos postrados a tus pies no tiene precio.

    Entrados en gastos

    Ser de izquierdas, lo que se dice de izquierdas, es —cuando menos— entender que el otro tiene capacidad de decidir por sí mismo, que es capaz de construir su propio destino, forjar su criterio. Por eso son izquierdas, en plural. En el extremo opuesto, ser de derecha es estar convencido de que existe un pensamiento único y que los otros necesitan ser conducidos por la senda del bien pensar y el bien hacer, de ahí que no hablemos de derechas, sino de derecha. Si alguien sabe de esto es El Fisgón, Rafaél Barajas, presidente del Instituto Nacional de Formación Política de Morena, el órgano encargado de diseñar, coordinar y ejecutar los programas de formación, capacitación e investigación política dentro del partido Morena, su función central es fortalecer la participación política de sus militantes y simpatizantes, así como impulsar la acción política del partido con base en sus principios, valores y objetivos, quien sin tapujos ha dado muestra de esta izquierda ambidiestra al pedir silencio a las voces críticas que han surgido al interior de Morena, argumentando que esas críticas son un error, calificando esas críticas como una “estupidez del tamaño de una catedral” y diciendo que a quienes cuestionan hay que decirles que “se callen, que maduren, que crezcan, que sean responsables”… en resumen, proclamando con proclamatoria autoridad que las izquierdas deben consolidarse en una izquierda que siga la senda del bien pensar y el bien hacer de la izquierda ambidiestra para consolidar un proyecto de derecha que reconozca desde la izquierda la incapacidad humana de construir su propio destino.

    • Carlos Bortoni es escritor. Su última novela es Historia mínima del desempleo.