En respuesta a las recientes declaraciones del aspirante republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, en las que calificó al futuro secretario de Economía de México, Marcelo Ebrard, con despectivos términos, el propio Ebrard y la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, han manifestado su rechazo y defensa.
Trump afirmó que durante su presidencia obtuvo todas sus demandas de México y se refirió a Ebrard con comentarios despectivos sobre su inteligencia.
“El representante del presidente [Marcelo Ebrard], porque el presidente de México era y es una excelente persona, vino y dijo que quería discutir esta iniciativa con el presidente de Estados Unidos y yo le dije que sólo le daría cinco minutos porque tenía cosas más importantes que hacer y vino a decir que con gusto nos darían los soldados gratuitamente. Nos dieron todo lo que yo quería, obtuve todo de México a pesar de esa persona estúpida [Ebrard] con un IQ bajo, les aseguro que tenía un IQ menor a 50 o 60, intentó negociar”, declaró Trump.
Ante esto, Ebrard respondió con firmeza: “Cuando te insultan en campaña, como acaba de hacerlo el ex Presidente Trump, siempre hay un propósito electoral: ganar adeptos. Nunca aceptaré calificación de un candidato en el exterior. No me intimida. Defenderé los intereses de México con toda dignidad y firmeza”.
La presidenta electa, Claudia Sheinbaum, también salió en defensa de Ebrard, destacando su capacidad y compromiso. “Lamento el lenguaje soez del expresidente Trump y desde luego discrepo de su opinión sobre Marcelo Ebrard. Para mí, es uno de los mejores servidores públicos de México y será un gran secretario de Economía de nuestro país, que nadie debe olvidar, es libre y soberano”, afirmó Sheinbaum.
Esta situación refleja la postura firme del próximo gobierno mexicano en defensa de sus funcionarios y la soberanía del país, frente a los comentarios despectivos de figuras políticas extranjeras.
Comentarios